Número de Expediente 881/04
N° | Origen | Tipo | Extracto |
---|---|---|---|
881/04 | Senado De La Nación | Proyecto De Declaración | IBARRA : PROYECTO DE DECLARACION RECHAZANDO MANIFESTACIONES DEL MINISTRO DEL INTERIOR QUE SIGNIFICAN UN TRATO DENIGRATORIO PARA LAS MUJERES . |
Listado de Autores |
---|
Ibarra
, Vilma Lidia
|
Fechas en Dir. Mesa de Entradas
MESA DE ENTRADAS | DADO CUENTA | Nº DE D.A.E. |
---|---|---|
12-04-2004 | 14-04-2004 | 55/2004 Tipo: NORMAL |
Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones
DIR. GRAL. de COMISIONES | INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS |
---|---|
14-04-2004 | SIN FECHA |
Giros del Expediente a Comisiones
COMISIÓN | FECHA DE INGRESO | FECHA DE EGRESO |
---|---|---|
DE ASUNTOS CONSTITUCIONALES
ORDEN DE GIRO: 1 |
14-04-2004 | 28-02-2006 |
EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2006
ENVIADO AL ARCHIVO : 13-09-2006
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-0881/04)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación
DECLARA:
Su rechazo a las manifestaciones realizadas por el Sr. Ministro del
Interior de la Nación, Dr. Anibal Fernández que significaron un trato
denigratorio para las mujeres.
Vilma L. Ibarra.-
FUNDAMENTOS
Sr. Presidente:
El Sr. Ministro del Interior, Dr. Anibal Fernández, al realizar
declaraciones en los medios de comunicación con relación al congreso
del Partido Justicialista realizado el pasado viernes 26 de marzo, en
el cual se originó una discusión protagonizada, entre otros, por tres
dirigentes mujeres de su partido, se refirió a que la misma fue "una
discusión de alta peluquería", descalificando no al debate político
sino a las mujeres en su conjunto.
Optó por minimizar el debate, no desde su contenido, sino desde el
género femenino de sus protagonistas. Está claro que al aludir a la
"discusión de peluquería" colocó a las mujeres fuera del ámbito
público, y las situó en un lugar peyorativo donde, precisamente, no
parece discutirse ni el futuro de un partido político, ni el sistema de
representación.
El Ministro se ha sumado al coro de voces peyorativas que quieren que
las mujeres "vayan a lavar los platos" cuando hacen una mala maniobra
con el auto (por cierto, no privativas de las mujeres). Ni lavar los
platos ni ir a la peluquería es denigratorio. Pero descalificar a una
conductora de auto, o a una dirigente política desde ese lugar, sí lo
es. Porque se toma la condición de género y se sitúa a la protagonista
en ámbitos ajenos a lo público. De esos lugares, precisamente es de
donde le costó a las mujeres muchos años de lucha salir, para ser parte
del proceso político y de la vida pública.
El Sr. Ministro debería comprender que desde el cargo institucional que
ocupa, debe extremar los recaudos en velar por las conquistas logradas
durante muchos años por las mujeres en el ámbito público, y donde
todavía (y sus comentarios fueron un claro ejemplo) queda muchos por
recorrer.
Resulta conveniente invertir muestro tiempo en repudiar este tipo de
expresiones. Se trata de que las mujeres expresemos que tenemos
capacidad de reacción frente a los obstáculos sociales, políticos,
culturales y entre estos últimos, los hechos del lenguaje, que tienden
a dificultar el acceso de la mujer a la vida pública.
Agrego finalmente que el lenguaje es un arma poderosa en la formación
de opinión, y es un enorme hecho cultural.
Sé de la vocación del Ministro por bregar por la igualdad de
oportunidades entre varones y mujeres y su tarea para que ésta sea
protagonista a la par de los hombres, de la vida pública.
Pero creo que en este caso corresponde exhortarlo a que tal convicción
la incorpore a sus expresiones, porque los cambios más difíciles,
precisamente, son los que hay que lograr en el ámbito cultural.
Vilma L. Ibarra.-
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-0881/04)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación
DECLARA:
Su rechazo a las manifestaciones realizadas por el Sr. Ministro del
Interior de la Nación, Dr. Anibal Fernández que significaron un trato
denigratorio para las mujeres.
Vilma L. Ibarra.-
FUNDAMENTOS
Sr. Presidente:
El Sr. Ministro del Interior, Dr. Anibal Fernández, al realizar
declaraciones en los medios de comunicación con relación al congreso
del Partido Justicialista realizado el pasado viernes 26 de marzo, en
el cual se originó una discusión protagonizada, entre otros, por tres
dirigentes mujeres de su partido, se refirió a que la misma fue "una
discusión de alta peluquería", descalificando no al debate político
sino a las mujeres en su conjunto.
Optó por minimizar el debate, no desde su contenido, sino desde el
género femenino de sus protagonistas. Está claro que al aludir a la
"discusión de peluquería" colocó a las mujeres fuera del ámbito
público, y las situó en un lugar peyorativo donde, precisamente, no
parece discutirse ni el futuro de un partido político, ni el sistema de
representación.
El Ministro se ha sumado al coro de voces peyorativas que quieren que
las mujeres "vayan a lavar los platos" cuando hacen una mala maniobra
con el auto (por cierto, no privativas de las mujeres). Ni lavar los
platos ni ir a la peluquería es denigratorio. Pero descalificar a una
conductora de auto, o a una dirigente política desde ese lugar, sí lo
es. Porque se toma la condición de género y se sitúa a la protagonista
en ámbitos ajenos a lo público. De esos lugares, precisamente es de
donde le costó a las mujeres muchos años de lucha salir, para ser parte
del proceso político y de la vida pública.
El Sr. Ministro debería comprender que desde el cargo institucional que
ocupa, debe extremar los recaudos en velar por las conquistas logradas
durante muchos años por las mujeres en el ámbito público, y donde
todavía (y sus comentarios fueron un claro ejemplo) queda muchos por
recorrer.
Resulta conveniente invertir muestro tiempo en repudiar este tipo de
expresiones. Se trata de que las mujeres expresemos que tenemos
capacidad de reacción frente a los obstáculos sociales, políticos,
culturales y entre estos últimos, los hechos del lenguaje, que tienden
a dificultar el acceso de la mujer a la vida pública.
Agrego finalmente que el lenguaje es un arma poderosa en la formación
de opinión, y es un enorme hecho cultural.
Sé de la vocación del Ministro por bregar por la igualdad de
oportunidades entre varones y mujeres y su tarea para que ésta sea
protagonista a la par de los hombres, de la vida pública.
Pero creo que en este caso corresponde exhortarlo a que tal convicción
la incorpore a sus expresiones, porque los cambios más difíciles,
precisamente, son los que hay que lograr en el ámbito cultural.
Vilma L. Ibarra.-