Número de Expediente 78/06

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Bar , Graciela Yolanda

En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones


(S-78/06)

PROYECTO DE DECLARACIÓN

El Senado de la Nación

DECLARA

De interés parlamentario el Foro Mundial de Educación Temático 2006 bajo el lema ¿Educación pública, inclusión y derechos humanos¿, a realizarse en la ciudad de Buenos Aires los días 4, 5 y 6 de mayo de 2006.

Graciela Bar.-

FUNDAMENTOS

Señor presidente:

En enero de 2001 en Porto Alegre, Brasil, se llevó a cabo la primera reunión del Foro Social Mundial. En aquella oportunidad se constató la necesidad de que haya mayor participación del área de educación y se propuso entonces la realización de un evento denominado Foro Mundial de Educación.

Se realizaron tres ediciones de este Foro Mundial de Educación, en Porto Alegre, en octubre de 2001, enero de 2003 y julio de 2004. Las temáticas que se abordaron fueron ¿La educación en un mundo globalizado¿, ¿Educación y transformación¿ y ¿Educación para que otro mundo sea posible¿.

Dos pilares fundamentales sostienen al Foro: la construcción de una alternativa al proyecto neoliberal y el pluralismo de ideas, métodos y concepciones y el ser un espacio plural, no confesional, no gubernamental y no partidario, verdaderamente mundial.

El objetivo este Foro es elaborar directrices que puedan ser parte de las reflexiones en todo el mundo, en la búsqueda del establecimiento de políticas, planes, programas y proyectos educacionales, en los cuales se incorpore la perspectiva de la educación como política pública, como deber del Estado y derecho social universal ligado a la condición humana.

La labor del Foro tiende a movilizar las instituciones, redes y movimientos ligados al área de la educación para el debate y gestión de propuestas alternativas; posibilitar el intercambio de experiencias educacionales; profundizar las referencias políticas, éticas y de conocimiento comprometidas con la educación popular, democrática e inclusiva y divulgar experiencias en torno al proceso de democratización de la educación como expresión de la posibilidad de otro mundo posible.

El Foro Mundial de Educación se constituye como un gran movimiento mundial en defensa del derecho a la educación. Sostiene una concepción que respeta y convive con la diferencia, y a partir de allí se construye el espacio público. Se rechaza la noción de la educación como mera mercancía, que reduce a los sujetos a simples consumidores y niega la dimensión humanista del proceso educacional.

La Carta de principios del Foro Social Mundial en uno de sus artículos afirma que ¿estas alternativas surgidas en el seno del Foro tienen como meta consolidar una globalización solidaria que, como una nueva etapa en la historia del mundo, respete a los derechos humanos universales, a todos los ciudadanos y ciudadanas de todas las naciones y al medio ambiente, apoyándose en sistemas e instituciones internacionales democráticos que estén al servicio de la justicia social, de la igualdad y de la soberanía de los pueblos.¿ La educación es entendida como una herramienta prioritaria, tal vez la única posible para lograr revertir este tipo de globalización que hoy intenta atarnos a una lógica despiadada.

En este marco se sustenta el Foro Mundial de Educación Temático Buenos Aires 2006, bajo el lema ¿Educación pública, inclusión y derechos humanos¿, cuyo comité ejecutivo está formado por Abuelas de Plaza de Mayo, CTERA y Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas entre otros miembros, que se llevará a cabo en la Ciudad de Buenos Aires el 4, 5 y 6 de mayo del corriente año.

Se propone como un espacio de encuentro, intercambio, debate y construcción de propuestas entre organizaciones, instituciones públicas, movimientos y actores sociales que llevan a cabo experiencias democráticas en el vasto campo educativo.

La educación es un derecho humano inalienable, que puede ser una poderosa herramienta en la construcción de una sociedad justa e igualitaria. Desde el Foro Mundial de Educación se considera necesario construir otro modelo de intervención estatal, que se sustente en la defensa y promoción de los derechos humanos y en la construcción de una sociedad más justa.

Es necesario orientar políticas que aseguren la plena inclusión educativa, una educación de calidad que garantice no sólo el ingreso, sino fundamentalmente el egreso de toda la población en edad escolar, que favorezca la participación política y ciudadana plena, que transmita saberes y conocimientos integrales que permitan comprender la complejidad de la sociedad actual, que contribuya a formar sujetos críticos y reflexivos, comprometidos solidariamente en la resolución de los numerosos problemas sociales, que contribuya a mejorar las capacidades y las condiciones para la actividad productiva.

Encaminadas en este sentido existen numerosas experiencias -algunas promovidas desde el Estado y otras por iniciativa de organizaciones sociales o de grupos de docentes- que se compartirán y debatirán en el foro. Éstas permitirán analizar cuestiones tales como la selección cultural que propone la escuela (es decir, el equilibrio entre un curriculum relevante para los alumnos y los saberes generales a apropiarse de los cuales todos tienen derecho), las condiciones que hacen posible la inclusión (es decir, cómo y para qué se incluye y cuáles son las prácticas más justas y democráticas) y los esfuerzos que se requieren para desarrollar las capacidades necesarias que posibiliten el ejercicio efectivo de la ciudadanía y la incorporación de todos en los nuevos procesos productivos (es decir, cuál es el recorrido para que los derechos humanos se extiendan como experiencia cotidiana en la escuela y en todos los ámbitos de formación).

La deliberación y la construcción de consensos colectivos permitirán delinear un nuevo proyecto basado en la felicidad y la dignidad humana. Y para ello es necesario fortalecer una educación por una cultura de justicia y paz, solidaridad y sustentabilidad en el mundo.

Es este el mandato que tenemos como representantes del pueblo de la nación Argentina: trabajar fuertemente en nombre de la paz, de la justicia y de la libertad, para romper con la lógica de la desigualdad, que cada vez más ahonda la brecha entre ricos y pobres, entre alfabetizados y analfabetos, entre quienes cuentan con las habilidades para participar en este complejo mundo globalizado y quienes cada vez más quedan fuera de toda posibilidad, pierden todo acceso a una vida digna.

En nombre de nuestros niños y jóvenes que hoy nos reclaman ser escuchados, nos reclaman participar en la construcción de un mundo nuevo, en el cual todos y todas tengamos la seguridad de que los derechos humanos no sólo serán respetados, sino que se constituyan en parte de la experiencia cotidiana, que dejen de ser un reclamo y se conviertan en realidad.

Por lo expuesto, pido a mis pares, la aprobación del presente proyecto.

Graciela Bar.-