Número de Expediente 4419/04

Origen Tipo Extracto
4419/04 Senado De La Nación Proyecto De Declaración BUSSI Y PINCHETTI : PROYECTO DE DECLARACION DECLARANDO PREOCUPACION POR LA DECISION DEL GOBIERNO DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES DE FACILITAR EL CENTRO CULTURAL RECOLETA PARA UNA MUESTRA OFENSIVA A LOS SENTIMIENTOS DE LA GREY CRISTIANA.
Listado de Autores
Bussi , Ricardo Argentino
Pinchetti de Sierra Morales , Delia Norma

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
21-12-2004 03-02-2005 254/2004 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
28-12-2004 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO

ORDEN DE GIRO: 1
28-12-2004 28-02-2006

EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2006

ENVIADO AL ARCHIVO : 13-09-2006

En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-4419/04)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación:

DECLARA:

Su mas profunda preocupación por la desafortunada decisión del
Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, de facilitar el Centro
Cultural Recoleta para hacer publica una muestra de arte altamente
ofensiva a los sentimientos de la grey cristiana, cual es la
retrospectiva del artista León Ferrari, desconociendo y ofendiendo con
ello, el sentimiento popular de nuestro pueblo.

Ricardo A Bussi.- Delia N. Pinchetti.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El pasado 30 de Noviembre del corriente año se inauguro en el Centro
Cultural Recoleta una retrospectiva del polémico artista León Ferrari.

En dicha ocasión la curadora a cargo declaro que "la muestra quiere
desplegar el repertorio de temas y de dispositivos que estructuran las
genealogías internas de su obra, en las que se entrelazan la sostenida
problematización del poder, el cuestionamiento de los valores éticos y
estéticos dominantes, la representación de la violencia, la celebración
de la sensualidad, las indagaciones sobre el erotismo, el uso del
montaje, las repeticiones, la literalidad, la ironía, el humor"

Mas allá de que podamos acordar o no con dichas expresiones, la
realidad demostró ser más prolífica, que las supuestas buenas
intenciones.

Hoy en el país, pero principalmente en la Capital Federal, se asiste a
un profundo debate sobre la muestra que León Ferrari exhibe en el
Centro Cultural Recoleta.

En un espacio público, paradójicamente donado por la Iglesia en otro
tiempo, se esta dando lugar a una muestra de arte altamente ofensiva a
los sentimientos de la comunidad, especialmente la cristiana

Así podemos ver una colección de obras donde puede verse a Cristo
dirigiendo un avión de guerra, a dos monjas 'transando' bajo la leyenda
'ámense unos a los otros', a la virgen cubierta de cucarachas o una
nueva versión de la última cena donde Cristo comparte el pan con ratas
y un mono. Abundan también las escenas que representan al Papa pisando
cadáveres y los santos presenciando numerosas orgías.
En pocas palabras, arte o no, lo que se exhibe en el Centro Cultural
Recoleta es agraviante. Y hasta el propio Ferrari lo ha admitido.

Basta bucear un poco en los antecedentes de este artista, para
encontrar, en que no es la primera vez, que sus exposiciones generan
polémica.

Así podemos ver que:

El Cristo del avión una de sus obras más emblemáticas, dado que fue la
primera obra directamente política de Ferrari y también la primera en
ser prohibida.

En el 2000 la muestra Infiernos e Idolatrías-montada en el ICI de
Buenos Aires- fue repudiada por la Agrupación Custodia que no dejaban
entrar a los espectadores y proclamaban a los cuatro vientos que ' los
derechos de los hombres no pueden pisotear los derechos de Dios'.

En septiembre de 2002, la pintura Amate -que muestra una masturbación
femenina- no pudo ser colgada en el Museo Castagnino de Rosario por
orden de la Secretaría de Cultura de la comuna.

Con todos estos antecedentes, que indudablemente eran de conocimiento
de las autoridades de la Secretaria de Cultura del Gobierno de la
ciudad autónoma de Buenos Aires, resultar difícil entender como en un
Centro de Cultura que se sostiene con los impuestos de los ciudadanos
se permite la exposición de una obra que no solamente ataca a los más
caros símbolos de la Iglesia Católica sino al mismo pueblo que lleva
arraigados en su corazón los más profundos sentimientos hacia el
cristianismo, hacia el Señor Jesús y la Virgen María.

Estamos viviendo en la Argentina un tiempo socio - político muy
particular. La instalación de una corriente neoprogresista en el poder
ha alterado algunos conceptos y percepciones del sentir popular.

Tolerar es aceptar lo diferente. Permitir la diversidad, resignar el
objetivo de la uniformidad bajo la propia bandera. Pero de ningún modo
tolerar significa permitir que el 'diferente' agravie o dañe las
creencias sobre las cuales se construyo nuestra sociedad. Tampoco es
valido, que bajo la consigna de la tolerancia, el 'diferente' utilice
una espacio de todos para perpetrar una ofensa a millones de
argentinos.

El respeto al arte y la libertad de expresión son dos aspectos básicos
y esenciales de la democracia y del pluralismo ideológico, al cual las
autoridades publicas deben y están obligadas a sostener y defender.

Sin embargo eso, no implica que para sostenerlos las autoridades deban
conculcar el conjunto de principios, valores sentimientos y
percepciones sobre los cuales se construyo y hoy se afirma el entramado
social de nuestro país.

Desde el gobierno de la ciudad y cierta prensa crítica de la Iglesia,
se ha querido defender a Ferrari sobre el argumento de la necesidad de
lograr una sociedad tolerante, lo cual en si, es absolutamente cierto y
seria de necios negarlo, pero como todo, eso también tiene sus limites.

Limites, que en este caso se encuentran en los sentimientos religiosos
de las personas y de la comunidad.

Hay que volver a los valores más propios del ser humano que son el
respeto y la libertad entendida como acto responsable que acaba cuando
empieza la del otro.

Mucho se discurrirá, sobre lo que es arte o no, aclaro que no es de mi
interés entrar en esa discusión, para lo cual reconozco no estar
preparado intelectualmente para ello.

Muchos podrán parangonar en descargo a esto, que un Caravaggio, un
Gaugin etc. fueron artistas, cuyas obras en su momento histórico,
fueron denostadas y criticadas por su entorno social y hoy son
considerados clásicos del arte.

Lo cual es absolutamente cierto, y con esto quiero dejar sentada mi
posición de que no estoy criticando específicamente la obra del Señor
León Ferrari, independientemente de que no comparta su criterio
artístico, simplemente quiero expresar mi desacuerdo con la decisión
del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, de utilizar un espacio
publico, como es el Centro Cultural Recoleta, para exponer esta
retrospectiva, que por su carácter, era absolutamente presumible, que
iba a despertar polémica, tal cual sucedió.

El Gobierno del Ciudad a través de la instancia pertinente,
indudablemente actúo en el marco de sus competencias, no se puede
catalogar a dicha decisión como contraria a derecho, simplemente se
puede afirmar que fue desafortunada por la repercusión social que tal
medida trajo aparejado y que es de publico conocimiento.

Por las razones expuestas es que nos permitimos solicitar a nuestros
pares la pronta aprobación del presente Proyecto de Declaración.-

Ricardo A Bussi.- Delia N. Pinchetti.-