Número de Expediente 4016/05

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Bar , Graciela Yolanda

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Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones


(S-4016/05)

PROYECTO DE RESOLUCION

El Senado de la Nación

Resuelve adherir a las conclusiones de la XI Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, realizada en la ciudad de Montreal, Canadá, del 28 de noviembre al 9 de diciembre.


Graciela Bar.-

FUNDAMENTOS
Señor Presidente:

En la ciudad de Montreal, Canadá, se llevó a cabo, desde el 28 de noviembre al 9 de diciembre, la XI Convención Marco de la Naciones Unidas sobre Cambio Climático.

Este evento contó con la participación de representantes de 180 países, observadores de grupos ambientales, organizaciones científicas y empresarios de diferentes rubros. El objetivo fue ampliar el alcance del protocolo de Kyoto, a fin de disminuir el ritmo del cambio climático y el calentamiento global del Planeta, por causa del aumento de la emisión de gases de efecto invernadero.

En la ocasión se discutieron diferentes formas de promover la formación de conciencia sobre la problemática, la necesidad de una acción inmediata conjunta para reducir los efectos del aceleramiento del cambio climático, y explorar oportunidades nuevas de desarrollo de tecnologías sostenibles que reduzcan la emisión de gases que producen una peligrosa modificación atmosférica. Así mismo se consideraron planes de asistencia inmediata en caso de desastres naturales.

En los últimos años, el incremento del cambio climático del planeta se ha convertido en una de las problemáticas con mayor urgencia que debe enfrentar la humanidad.

Este cambio global climático se debe directa e indirectamente a las actividades humanas que alteran la composición global atmosférica; y provoca graves consecuencias sobre la sociedad y el ecosistema, con lamentables daños y millonarias pérdidas.

Los gases de efecto invernadero (GEI) cumplen la función de mantener la temperatura adecuada para sostener la vida en la Tierra. Sin ellos nuestro planeta se congelaría, pero, a la inversa, al aumentar su concentración por sobre lo normal potencian su efecto, incrementando la rapidez y severidad del cambio climático.

Entre los GEI de mayor importancia se destacan: el dióxido de carbono que se produce al quemar combustible fósiles (carbón, petróleo y gas) y al talar y quemar bosques; el metano, producto de las actividades agrícolas y los basurales; y el oxido nitroso.

Al respecto, científicos y ambientalistas coinciden que el incremento del recalentamiento del planeta traerá serias consecuencias para todo el mundo: modificación de ecosistemas; temperaturas máximas y mínimas más elevadas; descongelamiento de los cascos polares y disminución de los glaciares; aumento del nivel del mar; precipitaciones más intensas con incremento de fuertes tormentas, tornados, huracanes; mayores riesgos de inundaciones y sequías debido a que la evaporación se acelerará a nivel mundial y ello implica que lloverá más, pero que la lluvias también se evaporarán más rápidamente, volviendo los suelos más secos durante los períodos claves en la temporada de cultivos; aumento del riesgo de olas de calor e incendios en asociación con las sequías; etc.

Como consecuencia de esto, disminuiría el abastecimiento de agua potable, sumando otra gravísima amenaza.

Al mismo tiempo, estas modificaciones climáticas llevarán a la extinción de especies animales y vegetales, ocasionarán grandes dificultades en la producción de alimentos y la economía, y graves daños para la salud de las personas.

Ante este panorama, los expertos sostienen que el futuro de la humanidad es incierto.

Las consecuencias del cambio global climático ya son bien evidentes. Por ejemplo, el nivel medio del mar ha subido 15 centímetros en el último siglo y se prevé que el calentamiento de la Tierra ocasionará un aumento adicional de alrededor de 18 centímetros para el año 2030. Ante esta tendencia, el mar ocupará las tierras más vulnerables de las regiones costeras, que en muchos casos se encuentran densamente pobladas, e islas pequeñas.

Por otra parte, los especialistas aseguran que las grandes tormentas tropicales registradas en los océanos Atlántico y Pacífico han aumentado en un 50% en duración e intensidad partiendo de la década del setenta del siglo XX. En el último año se sucedieron huracanes y tempestades de magnitud jamás vista desde 1850, momento en que comenzaron a registrarse oficialmente estos fenómenos.

Asimismo, decenas de estudios científicos recientes han corroborado cambios de temperatura en distintas regiones, variaciones en los registros de precipitaciones, alteración de las estaciones, a los cuales el hombre ha tenido que adaptarse. Según se afirma, hay cambios que ya son irreversibles.

La estadística presentada en la Conferencia de Montreal sostiene que en el 2005 las pérdidas financieras por catástrofes climáticas ascienden a más de 200 mil millones de dólares, superando ampliamente los 145 mil millones de 2004.

Los ambientalistas aseguran que ya no hay tiempo que perder, y que la lucha contra el cambio climático debe comenzar de inmediato en todo el mundo.

Frente a este panorama, en la XI Convención Marco de la Naciones Unidas sobre Cambio Climático se destacó la impostergable necesidad de desarrollar de forma urgente un plan de acción global ante esta angustiante situación. Y, principalmente, se instó a los países industrializados a intensificar sus esfuerzos para bajar las emisiones de gases de efecto invernadero al nivel de año 1990.

En el mismo sentido, se insistió en incentivar el desarrollo del negocio de tecnologías para producción con menos riesgos para la ecología; y se puntualizaron alternativas y cambios en hábitos corporativos y de consumo.

Al mismo tiempo, se reforzó el compromiso de los Gobiernos para acelerar la implementación de políticas y leyes que tengan como prioridad atacar esta problemática, y se destacó la importancia de articular al sector privado como parte esencial en esta acción.

La cuestión ambiental debe transformarse en un tema central de las decisiones políticas, y por lo tanto el Senado Argentino no puede estar ajeno a ello, para el bienestar de la sociedad actual y las generaciones futuras.

Por todo lo expuesto, solicitamos la aprobación del presente proyecto.

Graciela Bar.-