Número de Expediente 4002/06

Listado de Autores
Rodríguez Saá , Adolfo
Negre de Alonso , Liliana Teresita

En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-4002/06)

PROYECTO DE COMUNICACIÓN

El Senado de la Nación

Vería con agrado que el Poder Ejecutivo de la Nación mediante su organismo pertinente, informe a este Honorable Senado de la Nación:

I. ¿Que parámetros médicos utilizo la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Medica (ANMAT) para determinar que únicamente serán beneficiarias de la vacuna para prevenir el desarrollo del cáncer de cuello uterino, las mujeres comprendidas entre los 9 a 26 años?

II. ¿Por qué no se ha determinado como las mujeres mayores de 26 años, que se encuentran afectadas por la enfermedad puedan hacer uso de dicha vacuna?


III. ¿Que políticas sanitarias se implementaran a nivel nacional, para lograr el acceso a la vacunación de forma equitativa e igualitaria, de las mujeres del país que no puedan acceder a la compra de la vacuna para prevenir el desarrollo del cáncer de cuello de útero, dado el elevado costo de la misma?


IV. ¿Cuales son las medidas que implementará el Ministerio de Salud, para concientizar a la sociedad acerca de los beneficios y necesidades de la aplicación de la vacuna de prevención del cáncer de cuello de útero?

Adolfo Rodríguez Saa.- Liliana T. Negre de Alonso.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

Su nombre es Gardasil, y es la primera vacuna con capacidad de evitar la infección por virus de papiloma humano (HPV), principal causa de la enfermedad. La vacuna cuenta con la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica. En el país, la edad promedio de aparición del cáncer cervical es de 29 años.

Los estudios clínicos realizados en 21.000 mujeres de entre 16 y 26 años han demostrado que la vacuna es ciento por ciento efectiva contra las cepas 16 y 18 del HPV, que constituyen la causa del 70% de los casos de cáncer cervical, al igual que contra las cepas 6 y 11, que representan el origen del 90% de las verrugas genitales femeninas.

Ese grado de inmunización se obtiene luego de tres dosis de la vacuna, que se administran en un período de 6 meses. La vacuna no brinda protección a las mujeres que ya se encuentran infectadas con el HPV, lo que indica la importancia de la inmunización previa a la exposición al virus, señalaba un comunicado de las autoridades regulatorias norteamericanas, que aprobaron la vacuna a principios de junio ultimo.

Una de cada cinco mujeres argentinas de entre 15 y 60 años en algún momento de su vida va a contraer un HPV de alto riesgo. En el país, 11 mujeres fallecen cada día, víctimas de esta afección también conocida como cáncer de cuello uterino.

Según estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se diagnostican 510.000 casos de cáncer cervical, enfermedad que se cobra la vida de aproximadamente 288.000 mujeres en todo el mundo.

Dado su elevado costo, la vacuna podría quedar fuera del alcance de sus posibles beneficiarias. Eso dependerá del grado de cobertura que la vacuna tenga por parte de obras sociales, empresas de medicina prepaga e incluso desde el mismo sistema de salud público.

En la Argentina, según dijeron fuentes de la filial argentina del laboratorio Merck Sharp y Dohme, todavía no se ha definido cuál será su precio. Recién comienzan las negociaciones con el Gobierno y las entidades involucradas, todavía no se puede dar una cifra.

Se estima que la negociación va a tener como referencia el costo actual de la vacuna en mercados con sistemas de salud similares al de la Argentina, como el de México o Brasil.

El cáncer de cuello de útero es un serio problema de salud pública. Es teóricamente evitable, prevenible, con un muy prolongado período en que puede ser detectado y tratado en forma curativa. Las pacientes tendrían amplia oportunidad para acceder a la atención médica que detectase las etapas "pre-malignas.

Desde este análisis, prácticamente toda muerte por cáncer de cuello de útero es, un marcador apuntado a la situación de salud pública, y a una falta de acceso a cuidados médicos elementales, por diversas causas.

Correspondería entonces que nuestra autoridad sanitaria nos informe como se considerara el caso de la mujeres mayores de 26 años, que puedan verse también seriamente afectadas por la enfermedad.

Por ello, considerando la importancia que tiene para un amplio espectro de la población femenina del país, la correcta información sobre el cáncer de útero y su posible prevención a través de la vacuna aprobada, es que presentamos el siguiente Proyecto de Comunicación para el que pedimos la aprobación de nuestros Pares.

Adolfo Rodríguez Saa.- Liliana T. Negre de Alonso.-