Número de Expediente 3958/04

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Morales , Gerardo Rubén

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Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-3958/04)

PROYECTO DE LEY

El Senado y Cámara de Diputados,...

Artículo 1°: Declárase bien de interés histórico-cultural nacional la
"Bandera Nacional de Nuestra Libertad Civil", legada por el General Don
Manuel Belgrano al Cabildo de San Salvador de Jujuy y a su pueblo el 25
de Mayo de 1813.

Art. 2º: Declárase a la Provincia de Jujuy, depositaria y custodia de
la "Bandera Nacional de Nuestra Libertad Civil" debiendo el gobierno de
la Provincia de Jujuy garantizar su conservación en concordancia con
las autoridades federales.

Art. 3º: La Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares
Históricos realizará las gestiones y procedimientos establecidos en los
artículos 3°, 4° y 5° de la Ley 12.665 modificada por la Ley 24.252; y
en los artículos 8° (modificado por el Decreto 144.643/43), y 10° de su
Decreto Reglamentario 84.005/41, notificando a las partes interesadas
los alcances y contenidos de las disposiciones citadas y las
responsabilidades previstas en el artículo 8° de la Ley citada en
primer término y en los artículos 40°, 41° y 42° de su reglamentación.

Art. 4°: Regístrase como bien cultural de la Nación la "Bandera
Nacional de Nuestra Libertad Civil" identificada en el artículo 1° de
esta ley, conforme lo dispone la Ley 25.197.

Art. 5°: Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Gerardo R. Morales.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

Por el presente proyecto de ley se declara de interés histórico
cultural la "Bandera Nacional de Nuestra Libertad Civil", conocida
también como "Bandera Blanca", creada y legada por el General Manuel
Belgrano al Cabildo de la Ciudad de San Salvador de Jujuy y su pueblo
el 25 de Mayo de 1813 en reconocimiento a su gesta por la independencia
nacional.

Corría el año 1912, Belgrano, "sin dudas el primer argentino que soñó
la Patria" , encabezaba la segunda campaña del Alto Perú.

Es el mismo Belgrano quién relata el primer juramento y bendición de la
bandera argentina, ya que ante el desaliento de sus tropas y en
circunstancias de la memorable fecha de Mayo, para entusiasmar al
ejército y levantar el espíritu del pueblo jujeño, donde había
instalado su cuartel general, mando preparar grandes fiestas, y ante
salvas de artillería y todo un pueblo, que acudió presuroso, el
Canónigo doctor Gorriti, la bendijo ante el altar principal.

"Paseaba yo, refiere el futuro vencedor de Tucumán y Salta, por entre
las filas de la bandera, puedo asegurar a V.E. que pude observar el
fuego patriótico de las tropas y también oí, en medio de un acto tan
serio, murmurar entre dientes: ¨¡Nuestra sangre derramaremos por esta
bandera!¨, y dijo entonces a sus soldados ¨El 25 de Mayo será para
siempre memorable en los anales de nuestra historia, y vosotros
tendréis una ocasión más para recordarlo cuando en él veis por primera
vez la bandera nacional en mis manos, que ya os distingue de las demás
naciones del globo".

Y se adelanta Belgrano a interpretar lo que será fuente de unión e
identidad nacional, despertando la lealtad de todo un pueblo que verá
en su bandera la representación de la patria misma.

A pesar de la resistencia de las provincias del norte, la penetración
realista no se hizo esperar y se produzco la gran emigración de todo un
pueblo para combatirla; llevándose a cabo el " Éxodo Jujeño", época de
un gran sufrimiento y de sabiduría patriótica.

Todo un pueblo sacrificado, acompaña a Belgrano hacia el Tucumán en una
gesta heroica. Atrás sólo queda tierra arrasada, por delante un futuro
de libertad e independencia.

Belgrano dio batalla a los realistas en Tucumán el 24 de Septiembre, en
donde la caballería gaucha hizo su primera aparición, al día siguiente,
se produjo la retirada hacia el norte de aquellos que sostenían la
reconquista española.

El 20 de Febrero de 1813, en épocas de lluvia, Belgrano libró en Salta
una nueva victoria, anticipo de lo que un año más tarde concretó el
accionar de la caballería criolla, desterrando definitivamente a los
realistas y dando el triunfo a la revolución emancipadora en el norte
argentino.

El 25 de Mayo de 1813, en Jujuy, Belgrano deja constancia de haber
cedido y puesto en manos de ese ayuntamiento la "Bandera Nacional de
Nuestra Libertad Civil", conforme surge del Acta Capitular del Cabildo
de la Ciudad de San Salvador de Jujuy: "Para que la conservara con el
honor y valor que habían manifestado los dignos hijos de esa ciudad y
su jurisdicción, que habían servido en las acciones del 24 de
Septiembre y 20 de Febrero".

Esta bandera que hizo ondear en la ciudad norteña, no es la que se
enarbolara en Rosario el 27 de febrero de 1812, la misma está compuesta
de un solo paño totalmente blanco, lleva pintada además, el escudo de
la Soberana Asamblea General Constituyente que usa en su sello, y la
cedió al Cabildo, en recuerdo, habiendo prestado la de su ejercito
para la víspera y fiestas mayas de 1813.

Lo que se conserva es un rectángulo de seda envejecido, de 1,65 m de
largo por 1,46 de ancho. La intemperie hizo que si bien se conserva el
rojo del gorro frigio, el azul de la elipse se ha convertido en una
mancha de tierra mojada con reflejos verdosos; el paño se ha patinado
con un viejo matiz.

En 1815 el Coronel Francisco Pico la sacó de Jujuy con el Archivo de la
Ciudad, dejando todo en Tucumán, a su paso para Catamarca. A
requerimiento del Cabildo de Jujuy en 1816, la devolvió al gobernador
Bernabé Aráoz.

Fue depositada en la Iglesia Matriz, guardada en un principio en un
mueble, se la colocó en un astra dentro del templo, cerca de una puerta
donde sufrió la acción del agua y la luz que la deterioró. El emblema
patrio fue conservado durante muchos años en distintos lugares: El
Cabildo, la Iglesia Matriz, la Legislatura hasta el 20 de Abril de
1927, fecha en que se inauguró el Salón especialmente dedicado a su
guarda. El Salón de la Bandera de estilo barroco francés fue construido
por iniciativa de Octavio Iturbe, en 1914. Está situado en el Primer
Piso de la Casa de Gobierno, su habilitación tuvo lugar durante la
Gobernación de Benjamín Villafañe.

En el recinto además de la Bandera se hallan cuatro estatuas en sus
respectivos nichos, obras del Profesor Nicasio Fernández Mar. Ellas
representan las virtudes del General Manuel Belgrano: la fuerza, la fe,
el derecho y la gloria. Completan la ornamentación del salón, un busto
del creador del símbolo patrio y un escudo, que él mismo mandó pintar.
El óvalo es de madera, representa el Escudo Nacional y esta rodeado por
una Leyenda, cuyo texto dice: "Venid que de gracias se os da el néctar
agradable y el licor divino de la sabiduría".

Es tal la devoción patriótica que este emblema despertó que ha sido
adoptada como la bandera de la Provincia de Jujuy. En la Ley
Provincial Nº 4816 se indica que ella representa:

- Los ideales de autonomía de Jujuy como parte indivisible de la
República Argentina constituida en Estado federal.

- El valor del pueblo jujeño en la defensa de la Patria durante la
guerra de la Independencia y su afectuoso reconocimiento por el
Comandante del Ejército del Norte y creador de la bandera Nacional, el
General Don Manuel Belgrano.

- El espíritu de libertad y federalismo que animó a la Provincia desde
los primeros años de la emancipación.

- Los duros sacrificios y logros de su pueblo a través de la historia.

- La vigencia de las instituciones provinciales, afianzadas en la
Constitución como símbolo de la participación democrática.

- La caracterización de los objetivos definidos en el Preámbulo de la
Constitución Provincial como proyecto social; y

- La vocación de unidad y de amor al terruño de todos los hijos de
Jujuy, cualquiera sea el lugar en que se hallaren.

Declarar de interés histórico cultural a la "Bandera Nacional de
Nuestra Libertad Civil" es un reconocimiento a la lealtad y constancia
de aquellos pueblos en donde ha nacido la patria y para aquellos
hombres que se animaron a soñarla.

Nos toca a nosotros señor Presidente hacer posible a través de la
sanción del presente proyecto de ley, un acto de veneración a nuestra
querida insignia patria, como diría Joaquín V. González "vínculo
sagrado e indisoluble entre las generaciones pasadas, presentes y
futuras".

Por estos conceptos y porque no debemos como Congreso de la Nación
postergar más esta declaración, solicito a mis pares acompañen esta
iniciativa.

Gerardo R. Morales.-