Número de Expediente 3776/07

Origen Tipo Extracto
3776/07 Senado De La Nación Proyecto De Comunicación CORREGIDO : PROYECTO DE COMUNICACION SOLICITANDO INFORMES SOBRE LAS ACCIONES DE PREVENCION EMPRENDIDAS CONTRA EL CANCER DE UTERO Y OTRAS CUESTIONES CONEXAS .
Listado de Autores
Corregido , Elena Mercedes

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
22-02-2008 27-02-2008 168/2007 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
25-02-2008 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO

ORDEN DE GIRO: 1
25-02-2008 28-02-2009

EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2009

ENVIADO AL ARCHIVO : 09-11-2009

En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-3776/07)

PROYECTO DE COMUNICACION

El Senado de la Nación

Vería con agrado que el Poder Ejecutivo nacional arbitre los medios necesarios a los efectos de informar las acciones de prevención emprendidas contra el cáncer de útero. En el caso que ellas hayan sido desarrolladas en forma disímil, considerando distintos grupos de riesgo u otras condiciones que así lo requieran, es de utilidad que se indiquen los parámetros valorados para determinar dichos grupos, como así también las acciones impartidas y resultados obtenidos en cada uno de ellos.

Elena M. Corregido.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

La infección por el virus de papiloma humano o HPV constituye la principal causa del cáncer cervical, llamado también cáncer de cuello uterino.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que cada año se diagnostican en el mundo quinientos diez mil (510.000) nuevos casos de cáncer de cuello de útero. La mortalidad es muy elevada, aproximadamente doscientos ochenta y ocho mil (288.000) mujeres mueren por año en todo el mundo por este motivo.-

En América Latina, un estudio de la Organización Panamericana de la Salud fechado en 2003, indica que el cáncer de útero es un "problema importante de salud pública entre las mujeres del mundo en desarrollo, especialmente en América Latina y el Caribe".

El ochenta por ciento (80%) de las defunciones por cáncer de útero suceden fuera del primer mundo, dado que la enfermedad se encuentra asociada a causas de riesgo como: inicio precoz de las relaciones sexuales, múltiples parejas sexuales, y principalmente bajo nivel social, baja inmunidad, consumo de cigarrillo, alcohol, drogas, muchos hijos, deficiente educación sexual y controles médicos preventivos.

En nuestro país, el virus del HPV afecta a treinta y tres (33) de cada cien mil (100.000) mujeres, implicando la muerte de once (11) mujeres por día. Según una investigación de las Dras. Elena Matos y Dora Loria, del Instituto de Oncología Angel Raffo, la mayor cantidad muertes se registra en Formosa, Misiones, Chaco y Corrientes, lo que se explica por una menor práctica de procedimientos preventivos.

Estos datos demuestran a las claras la trascendencia de definir y desarrollar una política de prevención que disminuya la probabilidad de contagio del virus HPV y la detección precoz de su enfermedad.

El cáncer de útero, a diferencia de otros, se puede prevenir. Ello significa que pueden detectarse lesiones preinvasoras que de no ser tratadas se convierten en un cáncer invasor. Si se detecta una vez que se transformó en un cáncer invasor, deben realizarse tratamientos muy agresivos (cirugías, radioterapia, quimioterapia) y a pesar de ellos, la mitad de las pacientes que realizan tratamiento, mueren a causa de este cáncer.

Cuando se habla de prevención del cáncer de útero, se hace referencia a que desde los años 60, gracias a los estudio de Papanicolaou y al desarrollo de la colposcopía, los ginecólogos pueden detectar alteraciones celulares en el cuello uterino, que si son tratadas correctamente evitan la aparición de un cáncer cervical invasor.

Un avance en la prevención del cáncer ha sido el desarrollo de la vacuna contra los subtipos 6, 11, 16 y 18 del virus del papiloma humano, denominada Gardasil.

La Administración Nacional de Alimentos, Medicamentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó, en el mes de septiembre de 2006, la comercialización de dicha vacuna que, luego de la aplicación de tres dosis, otorga inmunidad contra los subtipos 16 y 18 (malignos) y los subtipos 6 y 11 (benignos).

Esta vacuna, indicada para chicas, adolescentes y mujeres de entre 9 y 26 años que no hayan contraído el virus, es de alto costo.

En nuestro país, el precio de cada dosis es de $ 926,40; lo cual implica un costo de casi $ 2.800 para el esquema completo de vacunación por persona. Este hecho genera, sin lugar a dudas, una restricción para el acceso a la vacuna por parte de la población femenina de nuestro país, y especialmente, por aquellas mujeres de bajos recursos que tienen mayor probabilidad de contagio dado que habitualmente tienen deficiente o escaso nivel de información, baja inmunidad, muchos hijos, manejo inapropiado de las lesiones que produce el HPV y escasos o nulos controles ginecológicos.

Sin lugar a dudas, la información sobre la enfermedad, los medios de prevención y el acceso generalizado a ellos son esenciales para disminuir el número de mujeres que se encuentran con la muerte como consecuencia del cáncer de útero.

Una encuesta realizada por un grupo del investigadores del Programa de Adolescencia del Hospital de Clínicas de la Universidad de Buenos Aires entre mayo y noviembre del 2006, demuestra que el desconocimiento del Papanicolaou (P.A.P.) en varones y mujeres adolescentes es llamativo. Y la Sociedad Argentina de Ginecología Infanto-juvenil recomienda hacer el primer P.A.P. en las mujeres después del inicio de las relaciones sexuales.

Sin embargo, la situación de la Ciudad de Buenos Aires señala que la recomendación ¿no ha sido incorporada¿ por los adolescentes, según los investigadores. El 42,3% de los varones y el 37,7% de las mujeres, que tenían entre 12 y 19 años y que contestaron la encuesta, ya habían iniciado su vida sexual. La edad promedio de inicio fue 14,7 años.

La mayoría de adolescentes (74,4%) no sabía qué era el PAP. Sólo el 36% de mujeres y el 14% de los varones entrevistados manifestó conocer para qué sirve ese análisis.

El Profesor Méndez Ribas, integrante del grupo de investigación citado mencionó: ¿El desconocimiento implica que hace mucho que no se hacen campañas constantes para recomendar a las mujeres que, a partir del inicio de las relaciones sexuales, deben realizarse el PAP¿.

Los profesionales concluyen que el conocimiento del PAP es crucial: cuanto más temprano se detectan las lesiones cancerosas y precancerosas por medio del PAP (acompañado de la colposcopia), más chances hay de controlar la enfermedad.

La encuesta efectuada por investigadores del Hospital de Clínicas, antes mencionada, reveló también que el 94,3% de los adolescentes desconocían la infección por virus del papiloma humano (HPV).

Por los fundamentos expuestos, solicito a mis pares que me acompañen con la aprobación de la presente iniciativa.

Elena M. Corregido.