Número de Expediente 3355/07

Origen Tipo Extracto
3355/07 Senado De La Nación Proyecto De Declaración CAPARROS : PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL DIA INTERNACIONAL PARA LA ELIMINACION DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER , EL 25 DE NOVIEMBRE Y OTRAS CUESTIONES CONEXAS .
Listado de Autores
Caparrós , Mabel Luisa

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
02-11-2007 14-11-2007 148/2007 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
13-11-2007 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE POBLACIÓN Y DESARROLLO HUMANO
ORDEN DE GIRO: 1
14-11-2007 21-11-2007

ENVIADO AL ARCHIVO : 18-12-2007

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 21-11-2007
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:SE AP. TEXTO UNIF. CONJ.S 3525,3151,3196 Y 3203/07
En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-3355/07)

PROYECTO DE DECLARACIÓN

El Senado de la Nación

DECLARA:

1°) Su adhesión a la conmemoración del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que por Resolución 54/134 de la Asamblea General de Naciones Unidas se celebra el 25 de noviembre de cada año, como resultado de un creciente movimiento internacional para acabar con este flagelo que devasta las vidas de mujeres y niñas, rompe comunidades y es una barrera para el desarrollo en todas las naciones.

2°) La necesidad de fortalecer nuestra lucha contra la violencia basada en el género en todas sus modalidades: violencia doméstica, violaciones, acoso sexual, tortura, abuso de prisioneras o violencia contra las mujeres en los conflictos armados, instando a aumentar la atención pública hacia estos hechos aberrantes que merecen la censura mundial y el rechazo generalizado de las naciones del mundo.

Mabel L. Caparrós.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

La plataforma de acción de la ONU ha definido la violencia contra las mujeres como ¿cualquier acto de violencia específica por razones de sexo que resulte o pueda resultar en daños o sufrimientos físicos, sexuales o psíquicos para las mujeres, incluyendo la amenaza de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad¿. Incluye entre otros, los malos tratos, las agresiones físicas, las mutilaciones genitales y sexuales, el incesto, el acoso sexual, el abuso sexual, la trata de mujeres y la violación.

La violencia masculina contra las mujeres jóvenes y adultas se da tanto en la familia como en el lugar de trabajo y en la sociedad. Constituye un atentado contra el derecho a la vida, a la seguridad, a la libertad, a la dignidad y a la integridad física y psíquica de la víctima. Supone por lo tanto, un obstáculo para el desarrollo de una sociedad democrática.

Hoy celebramos la observancia por parte de las Naciones Unidas del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Este día nos brinda la oportunidad de fortalecer nuestra lucha contra la violencia basada en el género en todas sus modalidades: violencia doméstica, violaciones, acoso sexual, tortura y abuso de prisioneras, o violencia contra las mujeres en los conflictos armados. La ocasión nos insta a aumentar la atención publica hacia este flagelo en todas sus formas, asegurando que cuando éste se presente, enfrentará la censura mundial y el rechazo generalizado de las naciones del mundo.

Los activistas por los derechos de la mujer han señalado el día 25 de noviembre como día contra la violencia desde 1981, y durante la pasada década se han celebrado 16 días de activismo contra la violencia de género, ya fuera el 25 de noviembre o el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos. La elección del 25 de noviembre como fecha para la celebración se debe al brutal asesinato de las tres hermanas Mirabal en la República Dominicana, el 25 de noviembre de 1961.

Por resolución de la Asamblea General, el 25 de noviembre ha sido designado ¿Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer¿ (Resolución 54/134 del 17 de diciembre de 1999). Presentada por la República Dominicana, con el apoyo de más de 60 gobiernos, la resolución es el resultado de un creciente movimiento internacional para acabar con una trágica práctica que rompe el tejido social de las comunidades, devasta las vidas de mujeres y niñas y es una barrera para el desarrollo en todas las naciones. Los promotores de la resolución esperan que el día constituya, como ha ocurrido en otras ocasiones, el punto de partida para que los gobiernos y la población en general tomen acción para acabar con la violencia contra la mujer.

En el mundo, el 25% de las mujeres son violadas en algún momento de su vida. Dependiendo del país, de un 25 a un 75% de las mujeres son maltratadas físicamente en sus hogares de forma habitual. Cerca de 120 millones de mujeres han padecido mutilaciones genitales. Las violaciones han devastado mujeres, niñas y familias en los conflictos armados en Ruanda, Camboya, Liberia, Perú, Somalia, Uganda y la antigua Yugoslavia.

El Secretariado General de Naciones Unidas manifestó recientemente que desde la fundación de las Naciones Unidas, ha surgido una progresiva aceptación de que el disfrute de los derechos humanos es indispensable para el bienestar y el desarrollo del individuo, de la comunidad, de la nación y del mundo. Se ha experimentado una gradual toma de conciencia sobre las violaciones de los derechos de las mujeres y de las niñas. Sin embargo, la violencia contra las mujeres (una de las más degradantes violaciones de los derechos humanos) continúa propagándose. No respeta fronteras geográficas, culturales o económicas. Surge en épocas de conflicto armado y en tiempos de paz, en el hogar, en el trabajo y en las calles. Se interpone en el camino de nuestro progreso hacia la igualdad, el desarrollo, la paz y los derechos humanos para todos.

En el ámbito nacional e internacional se han logrado algunos avances en los esfuerzos mundiales por enfrentar la violencia contra las mujeres. Los Estados Afiliados a las Naciones Unidas han adoptado la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, la cual delinea las estrategias para su erradicación. Los Estatutos de los Tribunales Internacionales Ad Hoc para la antigua Yugoslavia, Ruanda y Sierra Leona, y el Estatuto de 1998 del Tribunal Penal Internacional, incluyen crímenes contra las mujeres basados en el género en épocas de conflicto. Se ha presentado una movilización mundial en contra de las prácticas tradicionales consideradas lesivas tales como los denominados "asesinatos de honor", y que fundadamente deben llamarse "asesinatos deshonrosos".

Los Estados Afiliados han adoptado legislaciones que prohíben la violencia en contra de las mujeres y que cubren el hogar, el sitio de trabajo y la sociedad en general. Han establecido servicios de protección y han asignado profesionales idóneos para la aplicación de medidas efectivas. Han lanzado campañas para que todos los sectores de la sociedad comprendan que la violencia contra las mujeres es inaceptable en cualquiera de sus modalidades.
Pero sin embargo queda mucho por hacer aún en esta materia.

Según datos del Parlamento Europeo, en la Unión Europea la violencia contra las mujeres en el hogar es frecuente y persistente. A escala nacional, en la generalidad de los países no existen instrumentos jurídicos, o los que existen son insuficientes, para defenderse de los abusos cometidos por los hombres. La mayoría de los abusos no se denuncian a la policía, principalmente porque no existen los instrumentos jurídicos, sociales y económicos adecuados que protejan a las víctimas, lo que hace que la violencia contra las mujeres siga siendo en gran parte un delito invisible.

Las estadísticas que existen muestran que la violencia es endémica en las sociedades en que se enquista y afecta diariamente a las mujeres. Los hombres que recurren a la violencia pertenecen a todos los grupos de edad y proceden de todos los medios, culturas y clases sociales. La violencia de los hombres contra las mujeres sigue estando rodeada de mitos, por ejemplo, que la violencia doméstica es un asunto privado o que el comportamiento de las mujeres puede ser la causa de la violencia ejercida por los hombres contra ellas.

Aunque la mayoría de las mujeres maltratadas sigue sin denunciar a sus agresores, en el 2006 hubo un incremento del 9.5% de denuncias respecto al 2005, pero se ha dado un aumento también de las mujeres asesinadas por sus maridos luego de haberles denunciado.
Sin entrar a la cuestión de si estos datos reflejan que hace unos años se maltratara más pero se denunciara menos o que actualmente se maltrate igual pero las mujeres denuncian más, el problema es el mismo ¿Cuál es el origen de estos escalofriantes datos del maltrato? Durante las últimas décadas el desarrollo de la economía y del capitalismo, ha necesitado incorporar mano de obra que genere riqueza, y en ese proceso las mujeres se han incorporado paulatina pero masivamente al trabajo, con lo cual ha cambiado el papel de la mujer.

Al margen de los factores históricos y culturales de cada nación, el capitalismo ofrece una base sobre la que aumenta la independencia de las mujeres, tener un trabajo, capacitación para trabajos calificados, la posibilidad de acceder a puestos de poder, etc. Estas condiciones de independencia inevitablemente chocan con relaciones tradicionales del papel de la mujer en la familia, en el trabajo o en la sociedad. Cuando las mujeres asumen otro papel, se rebelan a relaciones de dominación y dependencia en su forma tradicional. Como consecuencia se dan las dos situaciones descriptas anteriormente: al poner en cuestión en diferentes ámbitos su rol tradicional es más susceptible de ser agredida y en segundo lugar, está dispuesta a soportar menos imposiciones, maltratos, agresiones y condiciones injustas de subyugación.

La violencia que padecen las mujeres tiene severas consecuencias físicas y psíquicas, sumamente perjudiciales para ellas, para sus hijos y para la sociedad por lo que se debe fomentar la creación de estructuras organizativas que proporcionen la atención adecuada, y la condena judicial y social hacia las conductas agresivas hacia las mujeres y las niñas, verdaderos ¿grupos de riesgo¿ cuando de violencia se trata.

Recordemos hoy que la acción para eliminar la violencia contra las mujeres es responsabilidad de todos: las Naciones Unidas, los Estados Afiliados, la sociedad civil y cada hombre y mujer. Este día nos brindan la oportunidad de seguir luchando para construir un nuevo Milenio libre de violencia contra las mujeres y las niñas; una era en la cual la humanidad entera sabe que, en lo que se refiere a la violencia contra las mujeres y las niñas, no hay bases para la tolerancia ni existen excusas tolerables.

Por las razones expuestas y en cumplimiento del expreso pedido de la Asamblea General para que todos los estados adhieran a este día internacional, solicito de mis pares la aprobación del presente Proyecto de Declaración.

Mabel L. Caparrós.-