Número de Expediente 3223/05

Origen Tipo Extracto
3223/05 Senado De La Nación Proyecto De Declaración CAPARROS : PROYECTO DE DECLARACION DECLARANDO BENEPLACITO Y ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL DIA MUNDIAL DEL HABITAT EL PRIMER LUNES DE OCTUBRE.
Listado de Autores
Caparrós , Mabel Luisa

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
29-09-2005 02-11-2005 158/2005 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
05-10-2005 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE POBLACIÓN Y DESARROLLO HUMANO
ORDEN DE GIRO: 1
05-10-2005 28-02-2007

EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2007

ENVIADO AL ARCHIVO : 21-06-2007

En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-3223/05)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación

DECLARA:

1°) Su beneplácito y adhesión a las conmemoraciones por el "Día Mundial del Hábitat", instituído cada primer lunes de octubre por la Asamblea General de Naciones Unidas, (Resolución 40/202A), atendiendo a una recomendación de la Comisión de Asentamientos Humanos.

2°) La necesidad de establecer estrategias de prevención del delito en nuestro país, dirigidas a las raíces del problema de la criminalidad urbana para hacer ciudades y comunidades más seguras y habitables.

Mabel L. Caparros.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El Hábitat no es un tema más de la agenda internacional, sino que debiera ser un tema central de las decisiones y de las políticas de estado, porque cuando se habla de hábitat se habla de nuestra casa, se habla de nuestro entorno más cercano, se habla de la posibilidad de vivir en un ambiente armónico con nosotros mismos, con nuestra familia, con la naturaleza y con todo aquello que rodea nuestro contexto cotidiano. Por eso hablar de hábitat es hablar de nosotros, de aquello que más amamos, de nuestros hijos y de una vida de mayor calidad para ellos, de mejores condiciones de dignidad y de posibilidades para cada uno de nosotros.

En 1985 la Asamblea designó el primer lunes de octubre Día Mundial del Hábitat (resolución 40/202A). La primera celebración del Día, en 1986, coincidió con el décimo aniversario de la primera conferencia mundial sobre ese tema: "Hábitat: Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Asentamientos Humanos" (Vancouver, Canadá, 1976). En su mensaje con ocasión del Día Mundial del Hábitat de 1998, cuyo tema era " Ciudades más seguras", el Secretario General observó que " las estrategias de prevención dirigidas a las raíces del problema de la criminalidad urbana son prometedoras" e instó a los Estados Miembros, los gobiernos locales y los ciudadanos de todo el mundo a actuar para hacer sus ciudades y comunidades más seguras.

Teniendo como sede Cancún, una de las ciudades de mayor crecimiento en México y de las primeras de América Latina, se desarrolló en 1998 el II Foro Mundial de Parlamentarios para el Hábitat, donde se puso de manifiesto que la globalización de las economías también ha implicado la globalización de la crisis entre las naciones, deterioros ecológicos, epidemias, malformaciones de la sobrepoblación mundial y los defectos de la planeación urbana.

Estimaciones de la ONU vertidas durante el evento arrojaron que en las regiones más desarrolladas del mundo 75% de los habitantes vive en ciudades, cifra que contrasta con el 38% de las regiones con menor desarrollo. Además, se calcula que aproximadamente mil millones de personas carecen aún de servicios básicos como agua entubada, drenaje y energía eléctrica. Se vaticina que en el año 2010 la mayoría de la población mundial vivirá en ciudades y el 40% estará conformada por niños.

Esta alarmante perspectiva debe alertar a los legisladores para que la vivienda se constituya en verdadero derecho humano, que haya acceso a tener la propiedad y la tenencia de la tierra, que haya derechos iguales para las mujeres en cuanto a propiedades porque las acciones en estas tres áreas contribuirán a un mejoramiento global.

Ya en 1985 el Grupo Mundial de Parlamentarios para el Hábitat, reconoció que a nivel mundial el panorama legislativo de los asentamientos humanos es desigual, ya que algunos países están a la vanguardia en esa materia, pero en otros simplemente no hay leyes que rijan este tipo de fenómenos. La falta de previsión en muchas naciones ante los movimientos migratorios, ha sido el motivo del surgimiento de problemas sociales, económicos, políticos y ambientales a los que se enfrentan las ciudades y comunidades urbanas y rurales del mundo.

Entre las conclusiones valiosas a que arribaran se consideró que ante este panorama, era imprescindible actuar con decisión para institucionalizar leyes y políticas públicas y "probablemente consigamos volvernos a reunir en el 2016, a 20 de años del I Foro celebrado en Estambul, para constatar nuestra incapacidad e irresponsabilidad con lo retos que nos plantea el siglo XXI, el cual ha dejado de ser ciencia ficción." A diecinueve años de ese evento vemos ante nuestros ojos que la mayoría de los países no han rectificado los patrones que tornan insustentable el crecimiento de la humanidad.

Los organismos internacionales han hecho un llamado urgente a que haya una voluntad de progreso para seguir avanzando en la construcción de ciudades más justas y más equitativas. La condición del hábitat es ya un factor determinante de la calidad de vida de las personas por la constante reducción de los espacios habitacionales del mundo, por las densas concentraciones demográficas y por las alarmas encendidas del deterioro ambiental y los desgastes energéticos. Pareciera como si el fenómeno de la globalización hubiera extendido sus efectos a los deterioros ecológicos y ambientales, las epidemias, la sobrepoblación mundial y la inseguridad en los centros urbanos.

El Día Mundial del Hábitat debe ofrecer a los políticos, las Organizaciones No Gubernamentales y a los ciudadanos alrededor del mundo, una oportunidad para reflexionar sobre los problemas y retos que deben enfrentar en sus propias ciudades y sobre cómo esos problemas pueden ser resueltos para hacer a estas ciudades más equitativas, justas y sostenibles. Asentamientos humanos en donde todos tengan condiciones de vivienda aceptables, un ambiente sano y seguro, servicios básicos y un empleo productivo y elegido libremente.

Algunos de los retos y de las tareas para llevar adelante versan sobre un desarrollo regional y urbano sostenidos, distinguiendo las características y las vocaciones propias de cada región, sobre un proceso de descentralización bajo principios de subsidiariedad, la planeación participativa, el crecimiento demográfico ordenado, la adecuada planeación física, el desarrollo de infraestructura urbana y servicios para toda la población, especialmente los más pobres de nuestro país, sobre la conservación y mejoramiento del medio ambiente, la generación de mecanismos económicos y financieros que permitan acceder a una vivienda adecuada.

Todos estos retos requieren prácticas que desde hace años en Argentina no se han venido implementando, pero sobre todo requieren prácticas novedosas y que también nos permitan resolver los problemas inmediatos pero previendo otros que hasta el momento no hemos sido capaces de ver y nos permitan construir soluciones en el largo plazo.

Como representantes de las provincias de nuestra Nación sabemos de la importancia que los asentamientos humanos han tenido en el desarrollo de vastas regiones, otrora deshabitadas e inexplotadas de nuestro país. Las distintas políticas de incentivo y promoción de asentamientos urbanos y rurales en nuestra Patagonia dan cuenta del éxito obtenido con mínimos recursos, pero con patrones de crecimiento y desarrollo que han demostrado ser sustentables. Debemos pues hacer confluir el desarrollo urbano y regional para promover niveles aceptables de ocupación, elevar el nivel de vida de la población, proteger los recursos ambientales, propender al aprovechamiento del territorio, incitar a la gestión participativa y brindar incentivos para la gobernabilidad urbana.

El Día Mundial del Hábitat es, por tanto, una ocasión apta para ver cuanto trabajo se ha realizado y que tanto resta por hacer, para transformar las ciudades en habitables y sostenibles. Por los motivos expuestos solicito de mis pares la aprobación del presente Proyecto de Declaración.

Mabel L. Caparros.-