Número de Expediente 3057/06

Origen Tipo Extracto
3057/06 Senado De La Nación Proyecto De Declaración RODRIGUEZ SAA Y NEGRE DE ALONSO : PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL DIA DE LA AGRICULTURA Y DEL PRODUCTOR AGROPECUARIO , A CELEBRARSE EL 8 DE SEPTIEMBRE DE 2006 .
Listado de Autores
Rodríguez Saá , Adolfo
Negre de Alonso , Liliana Teresita

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
29-08-2006 30-08-2006 139/2006 Tipo: NORMAL

ENVIADO AL ARCHIVO : 25-09-2006

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 30-08-2006
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:SE AP. TEXTO UNIF. CONJ. S. 2932/06
En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-3057/06)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación

DECLARA:

Su adhesión a la conmemoración del Día de la Agricultura y del Productor Agropecuario, que se celebra el día 8 de Setiembre de 2006, haciendo llegar un especial saludo a los habitantes de Esperanza, Provincia de Santa Fe, al cumplirse este año el Sesquicentenario de su Fundación, hecho que motivara la instauración de este día, por haber sido el origen del desarrollo de nuestra agricultura.

Adolfo Rodríguez Saa. - Liliana T. Negre de Alonso.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente

El 8 de Setiembre de 1856, hace 150 años, por iniciativa del salteño Aarón Castellanos, se pone en marcha la primera empresa colonizadora argentina dedicada a la agricultura, con la fundación de la Colonia Esperanza en la Provincia de Santa Fe.

La Colonia Esperanza, hoy devenida en ciudad, capital del Departamento Las Colonias de la Provincia de Santa Fe, debe su origen al Contrato de Colonización firmado el 15 de Junio de 1853 entre el Gobierno de la Provincia y el empresario salteño, por el cual se promovía el desarrollo de las riquezas naturales, particularmente la agricultura. Debía Castellanos introducir 1000 familias en el territorio de la provincia en un plazo de 10 años y así lo hizo, a partir de la fundación de la Colonia el 8 de Setiembre de 1856.

Esperanza fue un modelo de colonia agrícola organizada y la subdivisión en lotes de la propiedad concedida inició una experiencia que llevó bienestar material y moral a los colonos que llegaron para ocupar esas tierras. La agricultura, que hasta ese momento solamente tenía un desarrollo precario, se organizó en forma extraordinaria y fue desde entonces Esperanza el más importante centro agrícola que podía mostrar el país. Eran en su mayoría familias suizas, con importantes aportes de alemanes y franceses, aunque también se encontraban en pequeño número familias de otros países europeos.

Este ha sido el punto de partida de nuestro desarrollo agrícola, siendo importantísima la contribución de estos esforzados trabajadores en la construcción de nuestra Nación, y es por ello que debemos valorar en su justa medida su esfuerzo y dedicación.

Los homenajes a los antiguos colonizadores han estado presentes siempre en nuestra Historia. El 8 de Setiembre de 1910, en la Plaza San Martín de la antigua colonia agrícola Esperanza, se inauguró el Monumento a la Agricultura Nacional y el Gobierno Nacional, por Decreto N° 23.317 del 28 de Agosto de 1944, instauró esa fecha como el Día del Agricultor, por considerar que la Fundación de la Colonia fue el punto de partida para el desarrollo de la importantísima actividad agrícola en nuestro país.

Es absolutamente cierto que la agricultura es la base de toda acción civilizatoria, en tanto es el pilar fundamental del que se nutre la humanidad, si bien no ha alcanzado un reconocimiento y valoración acabado. Cualquier alteración importante de la producción agroalimentaria global podría sumir a una parte del género humano en el hambre más atroz. Sin embargo es llamativo ver como nuestra sociedad subordina sus formas de producción y alimentación al dominio exclusivo de los mercados, y a procesos de intensificación bajo una nueva forma de hacer agricultura que poco tiene que ver con los agricultores, sus familias y su cultura, tal como la hemos conocido en el pasado.

Nuestra Argentina no es ajena a este proceso. La agricultura enfrenta un modelo de expansión global y transformador de recursos, donde los hombres son simple engranajes de un modelo que los desatiende completamente. Para este modelo no cuenta el agricultor pequeño y mediano, aquel que aún está afianzado a su terreno, ya que el modelo industrialista los desatiende o directamente los amenaza.

Creemos que como país debemos realizar un esfuerzo en fortalecer los caminos que lleven a la sostenibilidad del hombre de campo, a través de procesos que aseguren sus formas de producción y la consiguiente estabilización en sus propias formas de vida. Esto fue bien entendido por los principales países desarrollados, que comprendieron que para un verdadero desarrollo rural sostenible es la agricultura un pilar insustituible, pero solo con una base familiar bien constituida. Así es que mejoraron sus condiciones de salud, calidad y esperanza de vida, elevaron sus niveles educacionales y de esa forma lograron una elevada renta que fortaleció el esquema familiar.

Este capital social que en el sector rural tiene obligadamente a los agricultores como principal elemento cementante debe ser sostenido e incrementado. Debemos establecer un modelo de desarrollo rural que tenga a la agricultura familiar como el eje fundamental y para ello deberá contemplar un modelo de producción y consumo que garantice niveles de calidad de vida similares a los de las oblaciones urbanas, asegurando la sustentabilidad y la seguridad agroalimentaria junto con un nivel de ingresos adecuados y un equitativo crecimiento económico. Sólo así podremos evitar el despoblamiento de nuestro sector rural, para evitar de esa forma la explosión demográfica sin sentido de nuestras poblaciones urbanas.

La única forma de conseguirlo será a través de un plan Maestro de desarrollo rural nacional que vuelva a poner a la gente del campo en ¿sus campos¿, en su territorio, para que vuelvan a ser parte integrante de nuestro país.

Señor Presidente: esta es una fecha muy cara para todos los hombres de campo. Es el homenaje justo a los agricultores en su día. Pero este año es a la vez una fecha memorable para los pobladores de la antigua colonia agrícola, hoy ciudad, de Esperanza. Ellos hace ya 150 años que luchan contra todas las adversidades y nos han dado a todos nosotros un ejemplo de vida.

Por estas razones, entendiendo que todos, Agricultores y Pobladores de Esperanza, merecen nuestro homenaje, venimos a presentar este Proyecto de Declaración que estamos seguros habrá de merecer la aprobación de nuestros Pares.

Adolfo Rodríguez Saa. - Liliana T. Negre de Alonso.