Número de Expediente 2895/03
N° | Origen | Tipo | Extracto |
---|---|---|---|
2895/03 | Senado De La Nación | Proyecto De Comunicación | CURLETTI Y LATORRE :PROYECTO DE COMUNICACION SOLICITANDO LA ACTUALIZACION DE LOS ARANCELES PERCIBIDOS POR LOS PRESTADORES DE SERVICIOS DE SALUD .- |
Listado de Autores |
---|
Curletti
, Mirian Belén
|
Latorre
, Roxana Itatí
|
Fechas en Dir. Mesa de Entradas
MESA DE ENTRADAS | DADO CUENTA | Nº DE D.A.E. |
---|---|---|
13-11-2003 | 19-11-2003 | 170/2003 Tipo: NORMAL |
Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones
DIR. GRAL. de COMISIONES | INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS |
---|---|
13-11-2003 | SIN FECHA |
Giros del Expediente a Comisiones
COMISIÓN | FECHA DE INGRESO | FECHA DE EGRESO |
---|---|---|
ORDEN DE GIRO: 1 |
14-11-2003 | 28-02-2005 |
EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2005
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-2895/05)
PROYECTO DE COMUNICACION
El Senado de la Nación,
Solicita al Poder Ejecutivo Nacional que a través del organismo
competente, intervenga y regule el proceso de negociación tendiente a
lograr, por parte de las administradoras de fondos de salud, la urgente
y necesaria actualización de los aranceles percibidos por los
prestadores de servicios de salud, habida cuenta que los mismos rigen
sin modificaciones desde la década del 90'.
Miriam Curletti.- Roxana Latorre.-
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
Como consecuencia de la aguda crisis socio-económica que sufrió nuestro
país desde la década del 90' hasta diciembre de 2001, las partes
intervinientes en el mercado de la salud se vieron obligadas a adoptar
una serie de medidas tendientes a evitar un colapso del sistema.
El principal síntoma sufrido por el sector, fue la restricción
financiera, originada principalmente por el estancamiento de la
recaudación, generado por el deterioro de las variables vinculadas al
empleo, la morosidad y la evasión.
Esta restricción financiera, trajo como consecuencia que los
prestadores de los servicios de salud, conscientes de la reducción de
ingresos que tuvieron que enfrentar las administradoras de fondos y con
el fin de no perder su caudal de trabajo, tuvieran que efectuar
sacrificios reflejados en aspectos tales como aceptar una drástica
rebaja de aranceles, extensión en los plazos de pago, renegociación de
pasivos prestacionales y la absorción de los mayores costos como
consecuencia del incremento de precios en los insumos.
A mediados de 2002, la situación económica del país se ha venido
modificando y los indicadores reflejan una incipiente recuperación
evidenciada en la generación de nuevos puestos de trabajo,
incrementándose la masa salarial, sobre la cual se establece la base
imponible de las contribuciones a la seguridad social y que, sumado a
los incrementos operados en la alícuota sobre las contribuciones
patronales (pasaron del 5% al 6% en julio de 2002) permitieron que las
administradoras de fondos de salud, experimentaran una rápida
recuperación, con la cual, en un lapso inferior a los seis meses,
lograran el nivel de recursos que habían perdido en la etapa de
depresión económica.
Esta recuperación, se afianzó con el reacomodamiento de precios
relativos del mercado interno que las administradoras de fondos,
efectuaron como consecuencia de la devaluación del peso y que alcanzó,
al cabo de un año, un incremento que supera el 30 por ciento.
No obstante esta modificación altamente favorable para las
administradoras de fondos, éstas no han transferido los incrementos de
ingresos logrados al último eslabón de la cadena de valor, representado
por los prestadores de servicios de salud, quienes a pesar de ser la
parte sustancial del sistema, siguen percibiendo idénticos aranceles
desde la década del 90'.
La gravedad de la situación, obliga a los profesionales de la salud a
atender, con los mismos ingresos de la etapa pre-devaluación, conceptos
que se adquieren a valor dólar tal, los bienes de capital importados,
insumos o innovación tecnológica, poniéndose en riesgo la calidad de
los servicios prestados ante la incapacidad económica de reinvertir en
equipos, o de modernizar los actuales.
Los prestadores de la salud, demandan en forma urgente una
actualización arancelaria, pero, tal como se distribuye el poder en el
circuito, están expuestos a participar en condiciones de desigualdad
por cuanto, de un total de 270 administradoras de fondos (incluídas
obras sociales, prepagas, etc.) el 62.4% de los afiliados está nucleado
sólo en 20, situación que otorga, a las administradoras, un gran poder
de negociación permitiéndoles, entre otras prerrogativas, disminuir los
precios unitarios de las prestaciones como lo vienen haciendo, sin que
se opere, por parte del Estado, una acción tendiente a lograr el
equilibrio de fuerzas, considerando la vulnerabilidad de los eslabones
con menor poder de negociación.
El sector de la salud, constituye un servicio que no puede estar
expuesto al libre juego del mercado, siendo el Estado, quien debe
asumir su rol, arbitrando e impidiendo, que las distorsiones derivadas
de factores de poder, coloquen en situación de riesgo los servicios de
salud, ejercidos por profesionales médicos que durante más de una
década, vienen siendo sometidos por la fuerza de decisiones cuasi
monopólicas.
La función del Estado en este plano, es indelegable y la omisión,
constituye un acto violatorio de los derechos humanos.
Por todo lo expuesto, solicitamos la aprobación del presente Proyecto.
Miriam Curletti.- Roxana Latorre.-
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-2895/05)
PROYECTO DE COMUNICACION
El Senado de la Nación,
Solicita al Poder Ejecutivo Nacional que a través del organismo
competente, intervenga y regule el proceso de negociación tendiente a
lograr, por parte de las administradoras de fondos de salud, la urgente
y necesaria actualización de los aranceles percibidos por los
prestadores de servicios de salud, habida cuenta que los mismos rigen
sin modificaciones desde la década del 90'.
Miriam Curletti.- Roxana Latorre.-
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
Como consecuencia de la aguda crisis socio-económica que sufrió nuestro
país desde la década del 90' hasta diciembre de 2001, las partes
intervinientes en el mercado de la salud se vieron obligadas a adoptar
una serie de medidas tendientes a evitar un colapso del sistema.
El principal síntoma sufrido por el sector, fue la restricción
financiera, originada principalmente por el estancamiento de la
recaudación, generado por el deterioro de las variables vinculadas al
empleo, la morosidad y la evasión.
Esta restricción financiera, trajo como consecuencia que los
prestadores de los servicios de salud, conscientes de la reducción de
ingresos que tuvieron que enfrentar las administradoras de fondos y con
el fin de no perder su caudal de trabajo, tuvieran que efectuar
sacrificios reflejados en aspectos tales como aceptar una drástica
rebaja de aranceles, extensión en los plazos de pago, renegociación de
pasivos prestacionales y la absorción de los mayores costos como
consecuencia del incremento de precios en los insumos.
A mediados de 2002, la situación económica del país se ha venido
modificando y los indicadores reflejan una incipiente recuperación
evidenciada en la generación de nuevos puestos de trabajo,
incrementándose la masa salarial, sobre la cual se establece la base
imponible de las contribuciones a la seguridad social y que, sumado a
los incrementos operados en la alícuota sobre las contribuciones
patronales (pasaron del 5% al 6% en julio de 2002) permitieron que las
administradoras de fondos de salud, experimentaran una rápida
recuperación, con la cual, en un lapso inferior a los seis meses,
lograran el nivel de recursos que habían perdido en la etapa de
depresión económica.
Esta recuperación, se afianzó con el reacomodamiento de precios
relativos del mercado interno que las administradoras de fondos,
efectuaron como consecuencia de la devaluación del peso y que alcanzó,
al cabo de un año, un incremento que supera el 30 por ciento.
No obstante esta modificación altamente favorable para las
administradoras de fondos, éstas no han transferido los incrementos de
ingresos logrados al último eslabón de la cadena de valor, representado
por los prestadores de servicios de salud, quienes a pesar de ser la
parte sustancial del sistema, siguen percibiendo idénticos aranceles
desde la década del 90'.
La gravedad de la situación, obliga a los profesionales de la salud a
atender, con los mismos ingresos de la etapa pre-devaluación, conceptos
que se adquieren a valor dólar tal, los bienes de capital importados,
insumos o innovación tecnológica, poniéndose en riesgo la calidad de
los servicios prestados ante la incapacidad económica de reinvertir en
equipos, o de modernizar los actuales.
Los prestadores de la salud, demandan en forma urgente una
actualización arancelaria, pero, tal como se distribuye el poder en el
circuito, están expuestos a participar en condiciones de desigualdad
por cuanto, de un total de 270 administradoras de fondos (incluídas
obras sociales, prepagas, etc.) el 62.4% de los afiliados está nucleado
sólo en 20, situación que otorga, a las administradoras, un gran poder
de negociación permitiéndoles, entre otras prerrogativas, disminuir los
precios unitarios de las prestaciones como lo vienen haciendo, sin que
se opere, por parte del Estado, una acción tendiente a lograr el
equilibrio de fuerzas, considerando la vulnerabilidad de los eslabones
con menor poder de negociación.
El sector de la salud, constituye un servicio que no puede estar
expuesto al libre juego del mercado, siendo el Estado, quien debe
asumir su rol, arbitrando e impidiendo, que las distorsiones derivadas
de factores de poder, coloquen en situación de riesgo los servicios de
salud, ejercidos por profesionales médicos que durante más de una
década, vienen siendo sometidos por la fuerza de decisiones cuasi
monopólicas.
La función del Estado en este plano, es indelegable y la omisión,
constituye un acto violatorio de los derechos humanos.
Por todo lo expuesto, solicitamos la aprobación del presente Proyecto.
Miriam Curletti.- Roxana Latorre.-