Número de Expediente 287/03
N° | Origen | Tipo | Extracto |
---|---|---|---|
287/03 | Senado De La Nación | Proyecto De Declaración | PRADES : PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL DIA INTERNACIONAL DE LA ELIMINACION DE LA DISCRIMINACION RACIAL Y OTRAS CUESTIONES CONEXAS .- |
Listado de Autores |
---|
Prades
, Carlos Alfonso
|
Fechas en Dir. Mesa de Entradas
MESA DE ENTRADAS | DADO CUENTA | Nº DE D.A.E. |
---|---|---|
21-03-2003 | 26-03-2003 | 21/2003 Tipo: NORMAL |
Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones
DIR. GRAL. de COMISIONES | INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS |
---|---|
24-03-2003 | 09-06-2003 |
Giros del Expediente a Comisiones
COMISIÓN | FECHA DE INGRESO | FECHA DE EGRESO |
---|---|---|
ORDEN DE GIRO: 1 |
02-04-2003 | 09-06-2003 |
ENVIADO AL ARCHIVO : 16-07-2003
Resoluciones
SENADO |
---|
FECHA DE SANCION: 02-07-2003 |
SANCION: APROBO |
COMENTARIO: |
APROBADO COMO: Proyecto de Resolucion |
NOTA:CONJ.S. 41/03 |
Órdenes del Día
NÚMERO | DE FECHA | ESTADO | ANEXO |
---|---|---|---|
130/03 | 18-06-2003 | APROBADA | Sin Anexo |
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-0287/03)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación
DECLARA
1.- Su adhesión a la conmemoración del trigésimo séptimo aniversario de
la proclamación del "Día Internacional de la Eliminación de la
Discriminación Racial" instituido por la Organización de las Naciones
Unidas para honrar a las víctimas del régimen discriminatorio
institucional más violento del siglo pasado conocido mundialmente como
el apartheid.
2.- Su adhesión a la "Semana de la solidaridad con los pueblos que
luchan contra el racismo y la discriminación racial" que se celebra
entre el 21 y el 27 de Marzo de cada año, y se realiza con el fin de
materializar uno de los propósitos de la ONU: ..." Promover y
estimular el respeto universal y efectivo de los derechos humanos y de
las libertades fundamentales de todos, sin distinción por motivos de
raza, sexo, idioma o religión".
3.- Persistir con su compromiso de trabajar para la eliminación de la
discriminación racial en todas sus formas y manifestaciones, prevenir
y combatir las doctrinas y prácticas racistas con el fin de promover el
entendimiento entre las razas y edificar una comunidad libre de todas
las formas de segregación y discriminación raciales, repudiando toda
actitud que atente contra la dignidad humana por causas de raza, sexo,
nacionalidad o religión.
Carlos A. Prades.-
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
El Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial se
observa todos los años el 21 de marzo. En ese día del año 1960, la
policía disparó contra una manifestación pacífica que se realizaba en
Sharpeville (Sudáfrica) para protestar contra las leyes de pases del
apartheid. Al proclamar el Día Internacional en 1966, la Asamblea
General de las Naciones Unidas exhortó a la comunidad internacional a
que redoblara sus esfuerzos por eliminar todas las formas de
discriminación racial.
En la presente Convención la expresión "discriminación racial" denota
toda distinción, exclusión, restricción o preferencia basada en motivos
de raza, color, linaje u origen nacional o étnico que tenga por objeto
o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o
ejercicio, en condiciones de igualdad, de los derechos humanos y
libertades fundamentales en las esferas política, económica, social,
religiosa, cultural o en cualquier otra esfera de la vida pública.
La Convención entró en vigor en 1969 tras la ratificación o adhesión de
27 Estados. A fines de 1990, habían ratificado la Convención o se
habían adherido a ella 128 Estados, es decir, más de las tres cuartas
partes de los Miembros de las Naciones Unidas. Entre las convenciones
de las Naciones Unidas sobre los derechos humanos ésta es la más
antigua y la que ha sido ratificada por mayor número de Estados.
Además de definir las obligaciones de los Estados Partes, se estableció
en virtud de la Convención el Comité para la Eliminación de la
Discriminación Racial.
El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial fue el primer
órgano creado por las Naciones Unidas para vigilar y examinar las
medidas adoptadas por los Estados para cumplir con las obligaciones que
les incumben en virtud de un acuerdo concreto de derechos humanos.
La entrada en vigor de la Convención Internacional sobre la Eliminación
de todas las Formas de Discriminación Racial y el examen periódico
realizado por el Comité a lo largo de los últimos 20 años de los
informes sobre las medidas adoptadas por los Estados Partes para
cumplir con sus obligaciones han dado resultados positivos pero , en
opinión de este Comité, los Estados Partes deben intensificar sus
esfuerzos en cuatro esferas, que son las siguientes:
§ Promulgación de leyes que castiguen la difusión de ideas basadas en
la superioridad o el odio racial, la incitación a la discriminación
racial, así como los actos de violencia y la asistencia a las
actividades racistas; y la prohibición de las organizaciones y
actividades que promuevan la discriminación racial o inciten a
practicarla.
§ Legislación que garantice la igualdad de las personas ante la ley,
independientemente de su raza, color, origen nacional o étnico.
§ Legislación que proporcione protección y recursos contra los actos de
discriminación racial.
§ Medidas en las esferas de la educación, la enseñanza, la cultura y la
información para combatir los prejuicios, promover la comprensión, la
tolerancia y la amistad, y difundir conocimientos sobre la Carta de las
Naciones Unidas y los acuerdos internacionales de derechos humanos.
Con respecto a este último punto, la Convención destaca que los Estados
Partes deben comprometerse a
tomar medidas en las esferas de la enseñanza, la educación, la cultura
y la información para combatir los prejuicios y promover la
comprensión, la tolerancia y la amistad entre las naciones y los grupos
raciales o étnicos.
Los hechos acontecidos desde el 11 de Septiembre del año 2001 y los que
actualmente mantienen en vilo a todas las comunidades del mundo,
demuestran que aunque hayamos entrado al siglo XXI cargados de
avances tecnológicos y científicos, el hombre sigue repitiendo una y
otra vez el sangriento recorrido hacia su propia destrucción y que todo
esfuerzo por mantener la paz y la seguridad mundial es avasallado por
intereses políticos, económicos, religiosos, culturales que no miden
consecuencias y exponen a seres inocentes a la más terrible de las
masacres: la guerra.
Como parte de su programa para el primer Decenio de la Lucha contra el
Racismo y la Discriminación Racial, en 1979 la Asamblea General instó a
todos los Estados a que observaran la Semana de Solidaridad con los
Pueblos que Luchan contra el Racismo y la Discriminación Racial,
considerada del 21 al 27 de marzo (resolución 34/24).
Es entonces, que este proyecto también adhiere a la Semana de la
Solidaridad con los Pueblos que Luchan contra el Racismo y la
Discriminación Racial.
Que esta semana, sea un espacio de reflexión. Los acontecimientos que
están azotando al mundo, también afectan a la Argentina. Los hechos que
día a día tienen lugar en nuestro querido país deben llevarnos a la
reflexión, para que finalmente confrontemos la realidad y exista un
cambio.
Para que nos eduquemos en la tolerancia, en la diversidad, en el uso de
la palabra no de la fuerza. Para que nos eduquemos en la solidaridad,
en el respeto por la vida, en la igualdad pero principalmente en la
libertad.
Que repudiemos los atentados terroristas así como también la guerra.
Por nosotros, pero principalmente por los que vendrán, por nuestros
niños argentinos y todos los niños del mundo para que palabras como
prejuicio, odio racial, tortura, abuso, violencia, apartheid,
genocidio, terrorismo, guerra sean parte de un pasado oscuro en la
historia mundial del que pudimos aprender para no repetirlo.
Es esta una ardua tarea, de la cual quizás no lleguemos a ver sus
frutos, pero que debemos comenzar sino queremos caer en el precipicio
de la destrucción.
Considero que los fundamentos expuestos son más que suficientes para
que los honorables funcionarios de ésta cámara me acompañen con su
adhesión a este proyecto de declaración.
Carlos A. Prades.-
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-0287/03)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación
DECLARA
1.- Su adhesión a la conmemoración del trigésimo séptimo aniversario de
la proclamación del "Día Internacional de la Eliminación de la
Discriminación Racial" instituido por la Organización de las Naciones
Unidas para honrar a las víctimas del régimen discriminatorio
institucional más violento del siglo pasado conocido mundialmente como
el apartheid.
2.- Su adhesión a la "Semana de la solidaridad con los pueblos que
luchan contra el racismo y la discriminación racial" que se celebra
entre el 21 y el 27 de Marzo de cada año, y se realiza con el fin de
materializar uno de los propósitos de la ONU: ..." Promover y
estimular el respeto universal y efectivo de los derechos humanos y de
las libertades fundamentales de todos, sin distinción por motivos de
raza, sexo, idioma o religión".
3.- Persistir con su compromiso de trabajar para la eliminación de la
discriminación racial en todas sus formas y manifestaciones, prevenir
y combatir las doctrinas y prácticas racistas con el fin de promover el
entendimiento entre las razas y edificar una comunidad libre de todas
las formas de segregación y discriminación raciales, repudiando toda
actitud que atente contra la dignidad humana por causas de raza, sexo,
nacionalidad o religión.
Carlos A. Prades.-
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
El Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial se
observa todos los años el 21 de marzo. En ese día del año 1960, la
policía disparó contra una manifestación pacífica que se realizaba en
Sharpeville (Sudáfrica) para protestar contra las leyes de pases del
apartheid. Al proclamar el Día Internacional en 1966, la Asamblea
General de las Naciones Unidas exhortó a la comunidad internacional a
que redoblara sus esfuerzos por eliminar todas las formas de
discriminación racial.
En la presente Convención la expresión "discriminación racial" denota
toda distinción, exclusión, restricción o preferencia basada en motivos
de raza, color, linaje u origen nacional o étnico que tenga por objeto
o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o
ejercicio, en condiciones de igualdad, de los derechos humanos y
libertades fundamentales en las esferas política, económica, social,
religiosa, cultural o en cualquier otra esfera de la vida pública.
La Convención entró en vigor en 1969 tras la ratificación o adhesión de
27 Estados. A fines de 1990, habían ratificado la Convención o se
habían adherido a ella 128 Estados, es decir, más de las tres cuartas
partes de los Miembros de las Naciones Unidas. Entre las convenciones
de las Naciones Unidas sobre los derechos humanos ésta es la más
antigua y la que ha sido ratificada por mayor número de Estados.
Además de definir las obligaciones de los Estados Partes, se estableció
en virtud de la Convención el Comité para la Eliminación de la
Discriminación Racial.
El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial fue el primer
órgano creado por las Naciones Unidas para vigilar y examinar las
medidas adoptadas por los Estados para cumplir con las obligaciones que
les incumben en virtud de un acuerdo concreto de derechos humanos.
La entrada en vigor de la Convención Internacional sobre la Eliminación
de todas las Formas de Discriminación Racial y el examen periódico
realizado por el Comité a lo largo de los últimos 20 años de los
informes sobre las medidas adoptadas por los Estados Partes para
cumplir con sus obligaciones han dado resultados positivos pero , en
opinión de este Comité, los Estados Partes deben intensificar sus
esfuerzos en cuatro esferas, que son las siguientes:
§ Promulgación de leyes que castiguen la difusión de ideas basadas en
la superioridad o el odio racial, la incitación a la discriminación
racial, así como los actos de violencia y la asistencia a las
actividades racistas; y la prohibición de las organizaciones y
actividades que promuevan la discriminación racial o inciten a
practicarla.
§ Legislación que garantice la igualdad de las personas ante la ley,
independientemente de su raza, color, origen nacional o étnico.
§ Legislación que proporcione protección y recursos contra los actos de
discriminación racial.
§ Medidas en las esferas de la educación, la enseñanza, la cultura y la
información para combatir los prejuicios, promover la comprensión, la
tolerancia y la amistad, y difundir conocimientos sobre la Carta de las
Naciones Unidas y los acuerdos internacionales de derechos humanos.
Con respecto a este último punto, la Convención destaca que los Estados
Partes deben comprometerse a
tomar medidas en las esferas de la enseñanza, la educación, la cultura
y la información para combatir los prejuicios y promover la
comprensión, la tolerancia y la amistad entre las naciones y los grupos
raciales o étnicos.
Los hechos acontecidos desde el 11 de Septiembre del año 2001 y los que
actualmente mantienen en vilo a todas las comunidades del mundo,
demuestran que aunque hayamos entrado al siglo XXI cargados de
avances tecnológicos y científicos, el hombre sigue repitiendo una y
otra vez el sangriento recorrido hacia su propia destrucción y que todo
esfuerzo por mantener la paz y la seguridad mundial es avasallado por
intereses políticos, económicos, religiosos, culturales que no miden
consecuencias y exponen a seres inocentes a la más terrible de las
masacres: la guerra.
Como parte de su programa para el primer Decenio de la Lucha contra el
Racismo y la Discriminación Racial, en 1979 la Asamblea General instó a
todos los Estados a que observaran la Semana de Solidaridad con los
Pueblos que Luchan contra el Racismo y la Discriminación Racial,
considerada del 21 al 27 de marzo (resolución 34/24).
Es entonces, que este proyecto también adhiere a la Semana de la
Solidaridad con los Pueblos que Luchan contra el Racismo y la
Discriminación Racial.
Que esta semana, sea un espacio de reflexión. Los acontecimientos que
están azotando al mundo, también afectan a la Argentina. Los hechos que
día a día tienen lugar en nuestro querido país deben llevarnos a la
reflexión, para que finalmente confrontemos la realidad y exista un
cambio.
Para que nos eduquemos en la tolerancia, en la diversidad, en el uso de
la palabra no de la fuerza. Para que nos eduquemos en la solidaridad,
en el respeto por la vida, en la igualdad pero principalmente en la
libertad.
Que repudiemos los atentados terroristas así como también la guerra.
Por nosotros, pero principalmente por los que vendrán, por nuestros
niños argentinos y todos los niños del mundo para que palabras como
prejuicio, odio racial, tortura, abuso, violencia, apartheid,
genocidio, terrorismo, guerra sean parte de un pasado oscuro en la
historia mundial del que pudimos aprender para no repetirlo.
Es esta una ardua tarea, de la cual quizás no lleguemos a ver sus
frutos, pero que debemos comenzar sino queremos caer en el precipicio
de la destrucción.
Considero que los fundamentos expuestos son más que suficientes para
que los honorables funcionarios de ésta cámara me acompañen con su
adhesión a este proyecto de declaración.
Carlos A. Prades.-