Número de Expediente 2849/04

Listado de Autores
Arancio de Beller , Lylia Mónica

En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2849/04)

PROYECTO DE COMUNICACIÓN

El Senado de la Nación

Vería con agrado que el Poder Ejecutivo Nacional, por
intermedio del Ministerio de Salud y Ambiente de la Nación, y/o el
organismo que corresponda implemente medidas para prevenir y curar el
Cáncer de Cuello Uterino, principalmente en la Provincia de Jujuy, zona
donde tiene mayor incidencia.

Mónica Arancio de Beller.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El Cáncer de Cuello Uterino es uno de los más importantes problemas de
salud pública en todos los países en desarrollo.

En las naciones desarrolladas, si bien no ha desaparecido totalmente la
incidencia del cáncer de cuello ha disminuido significativamente en las
últimas décadas por la implementación de una estructura sanitaria
adecuada en prevención secundaria.

Sería fundamental que acciones en ese sentido se implementaran en
nuestro país.

Un paso trascendente en esa dirección es el conocimiento de la
incidencia y mortalidad del Cáncer de Cuello: El conocimiento de la
epidemiología así como la necesidad de establecer un programa de
control del Cáncer de Cuello son aspectos salientes para disminuir la
mortalidad por Cáncer de Cuello Uterino, esta enfermedad cuyo
pronóstico, si no es detectado temprano es grave.

El cáncer de cuello uterino está extendido en el mundo entero. Las
poblaciones de mayor riesgo están asociadas a la pobreza y a la
promiscuidad, y a la presencia de determinadas cepas de HPV.

Se estima que en Argentina ocurren 5.500 nuevos casos de cáncer de
cuello de útero por año y la mayoría de los mismos son detectados en
estadios invasores, por lo que son más bajas las probabilidades de
curación.

Así, en 2001 se registraron un total de 947 muertes por tumor maligno
del cuello uterino, con una tasa ajustada por edad (TAE) de 4,96 por
100.000 mujeres. El 2.5% del total de muertes en el país, es decir 24
muertes, tenía residencia en la provincia de Jujuy, lo que representó
una tasa ajustada por edad de 7,72 por 100.000 mujeres.

En el mismo sentido, en Jujuy se registra un promedio de 18 muertes por
año clasificadas como mortalidad por tumor de útero sin especificar la
localización, estimando que más de la mitad de estas muertes son por
tumor de cuello.

La situación en los departamentos en que se divide la provincia es
diferente: mientras que en seis departamentos no se ha notificado
ningún caso en el departamento de Tumbaya la tasa fue muy elevada, con
valores 48,7 muertes por 100.000.

Las muertes por tumor maligno de cuello uterino representan un
importante problema y pueden evitarse mediante la prevención, el
diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado.

El cáncer de cuello de útero, es un cáncer que se da más frecuentemente
en mujeres de bajo nivel socioeconómico, con antecedentes de múltiples
parejas sexuales, primeras relaciones sexuales a edad temprana, y
multíparas. Sin embargo puede ser curado si se detecta en períodos
preinvasores, por lo cual la detección precoz es el pilar fundamental
para controlar la mortalidad por este tumor, que se agrupa dentro del
grupo de enfermedades evitables por diagnostico precoz y tratamiento
adecuado.

En conclusión, existe evidencia suficiente de la eficacia de la
detección precoz en cáncer de cuello uterino para disminuir la
mortalidad y el test de papanicolaou es la herramienta por excelencia
para el screening de ese diagnostico.

En Argentina se realiza hace más de 30 años, pero la cobertura del test
a nivel poblacional es muy baja, estimada entre el 15 y 25% según los
lugares y por lo general las mujeres que se realizan el estudio, son
las que tienen más bajas probabilidades de contraer la enfermedad.

Tomando en cuenta esta premisa preventiva, en el período
1998-99 se realizó en la ciudad de Tilcara, de la provincia de Jujuy un
plan que contemplaba la prevención de este tipo de cáncer.
Posteriormente el gobierno nacional dejó de enviar los fondos y el plan
dejó de funcionar y fracasó por desinteligencias burocráticas, dejando
como resultados los números que ya fueron aludidos en el año 2001 y que
coloca a la Provincia de Jujuy como una de las más afectadas por la
enfermedad.

Teniendo en cuenta todos estos antecedentes es imprescindible tomar
conciencia de que hay que invertir adecuadamente los recursos
económicos, y también los recursos humanos en la prevención, no
solamente por la solidaridad que implica el diagnóstico oportuno de
esta enfermedad, sino porque este diagnóstico oportuno ahorrará muchos
gastos al no tener que invertir en el tratamiento del cáncer avanzado,
y también ahorrará muchas lágrimas a las familias que padecen este mal.

Estas razones me animan a impulsar la presente iniciativa que
solicita al Poder Ejecutivo Nacional disponga un plan de Prevención y
Cura, con atención particular de las zonas mas vulnerables.

Mónica Arancio de Beller.