Número de Expediente 2818/04

Origen Tipo Extracto
2818/04 Senado De La Nación Proyecto De Declaración ESCUDERO : PROYECTO DE DECLARACION DECLARANDO PESAR ANTE LA FALTA DE ESCLARECIMIENTO JUDICIAL DEL ATENTADO CONTRA LA SEDE DE LA AMIA .
Listado de Autores
Escudero , Sonia Margarita

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
07-09-2004 15-09-2004 176/2004 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
08-09-2004 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE JUSTICIA Y ASUNTOS PENALES
ORDEN DE GIRO: 1
08-09-2004 28-02-2006

EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2006

ENVIADO AL ARCHIVO : 13-09-2006

En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2818/04)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación:

DECLARA

Su profundo pesar ante la falta de elucidación judicial del atentado
cometido contra la Sede de la AMIA el 18 de Julio de 1994, tras diez
años de investigaciones.-

Asimismo, exhorta al Poder Ejecutivo, Poder Judicial, y las Comisiones
de Seguimiento de la Investigación y Esclarecimiento de los Atentados a
la Embajada de Israel y la AMIA, y Bicameral de Fiscalización de los
Organismos y Actividades de Inteligencia, a realizar su máximo esfuerzo
para permitir la individualización y castigo de los responsables del
atentado, y de quienes hubieren eventualmente obstaculizado o desviado
el correcto cauce de las investigaciones.-

Sonia M. Escudero.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El reciente veredicto del Tribunal Oral Federal N° 3, no solo no
encontró elementos para atribuir responsabilidad penal a los sindicados
como integrantes de la llamada "conexión local" del atentado a la AMIA,
sino que advirtió sobre posibles maniobras tendientes a obstaculizar
y/o desviar la investigación del correcto cauce por la que debía
discurrir.-

A diez años del mayor atentado terrorista sufrido por nuestro país, la
sociedad toda asistió estupefacta al veredicto pronunciado por el
mencionado Tribunal, que tras tres años de juicio oral, más de mil
testigos, y una multitud de diligencias probatorias, no encontró
elementos de convicción suficientes para condenar a los imputados en
tan trágico episodio.-

Quizás aun más grave es el hecho de que la frustración de la causa no
se produjo por meras insuficiencias probatorias, sino que en apariencia
el proceso estuvo plagado de irregularidades, cometidas con una
intencionalidad diversa al deber ser de todo proceso, esto es, llegar a
la verdad material y a la objetiva atribución de responsabilidades.-

Por ello este Senado de la Nación, sin entrar a emitir opinión alguna
sobre el contenido de la sentencia, no puede dejar de expresar su
profundo pesar por la frustración colectiva que implica la falta de
resolución de tan grave hecho.

Y ello en tanto la administración de justicia, en tiempo y forma, es la
suprema garantía del que es agredido ilegítimamente, y en ella se basa
la confianza y el respeto al sistema en que vivimos. La justicia es la
piedra basal de nuestro pacto social, y sin ella se buscan mecanismos
alternativos que degradan nuestra sociedad.

Pero si sumado a la ocurrencia de un hecho luctuoso que ofendió a la
sociedad toda, se sospecha una presunta inacción, o peor aún, un doloso
desvío de la investigación, ocultamiento o destrucción de pruebas
presuntamente generado desde el mismo Estado, nos encontramos frente a
una situación que atenta contra la naturaleza misma del orden social y
jurídico en que vivimos. Fue muy grave el atentado, pero no lo es menos
una supuesta indiferencia o encubrimiento estatal.

Es menester que todos los estamentos de la estructura estatal,
pertenecientes a cualquier departamento del Estado, tomen la más firme
determinación de confluir a la dilucidación tanto del atentado cuanto
de las presuntas irregularidades cometidas, con todos los recursos a su
alcance. Y que la sanción que se aplique sea conforme a derecho.

Solamente si ello es así, si nuestro Estado está en condiciones de
recobrar la confianza que ha perdido del ciudadano común, y si la
sociedad acepta que la tarea de combate al terrorismo es constante,
compleja y amarga, podremos sentar las bases para la construcción de
una sociedad más justa y realista.

Sonia Escudero.-