Número de Expediente 2789/04

Listado de Autores
Giustiniani , Rubén Héctor

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Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2789/04)

PROYECTO DE DECLARACIÓN

El Senado de la Nación

DECLARA

Condenar la decisión del Gobierno de Israel de expandir los
asentamientos judíos en Cisjordania y asimismo condenar la continuación
de la construcción del muro de separación de Cisjordania, ignorando la
decisión de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que en julio
pasado dictaminó que la construcción del muro de separación que
construye Israel en Cisjordania es ilegal, por lo que debe ser
desmantelado inmediatamente.

Condenar los atentados a civiles israelíes, ocurridos en la ciudad de
Beersheba, al sur de Israel, cometidos por suicidas palestinos.

Exhortar a la comunidad internacional, y particularmente a la Autoridad
Palestina y al Gobierno de Israel para que se encaminen en la búsqueda
de una solución pacífica, reiterando los Acuerdos de Ginebra, de forma
de garantizar la existencia de un Estado Palestino y la paz de la
región.

Rubén Giustiniani.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

Israel anunció el lunes 23 de agosto de 2004 sus planes de construir
viviendas nuevas en Cisjordania. Ariel Sharon dio su autorización para
la construcción de otras 1.001 viviendas en cuatro de las mayores
colonias de Cisjordania - Adam, Emanuel, Har Adar y Har Giló, los dos
últimos próximos a Jerusalén- , en una decisión vista como un intento
por apaciguar a quienes se oponen a su plan de retirada de la franja de
Gaza.

Kofi Annan, secretario general de Naciones Unidas, expreso al día
siguientes de los anuncios, que Sharon contradice las obligaciones
establecidas en el plan de paz de la "Hoja de Ruta" - acordada por la
ONU, la Unión Europea, Rusia y diplomáticos de Estados Unidos, culmina
en la creación de un estado palestino hacia 2005-.

En un comunicado leído por el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, el
secretario general expresó su preocupación por las informaciones de que
el gobierno de Israel dio el visto bueno para la construcción de nuevas
viviendas en los asentamientos judíos en territorio ocupado de
Cisjordania.

"Este tipo de actividades claramente contradicen las obligaciones de
Israel bajo la Hoja de Ruta, que inequívocamente estipulan que el
gobierno israelí, en consistencia con el informe Mitchell, debe detener
toda actividad de construcción de asentamientos (incluso el crecimiento
natural de los que ya están establecidos)", declaró Annan.

El 9 de julio 2004 la Corte Internacional de Justicia (CIJ) - máximo
órgano judicial de las Naciones Unidas - dictaminó que la construcción
del muro de separación que construye Israel en Cisjordania es ilegal,
por lo que debe ser desmantelado inmediatamente.

En una decisión consultiva pero no vinculante que recibió el voto a
favor de 14 jueces y de uno en contra, la alta instancia sostuvo que
Israel tiene la obligación de suspender la edificación de esa barrera y
de desmantelar las estructuras ya erigidas.

Además, la Corte determinó que el gobierno israelí tiene la obligación
de reparar el daño que ha causado en el territorio palestino ocupado,
incluido el Este de Jerusalén y sus zonas aledañas.

La comunidad internacional, por su parte, no debe reconocer la
situación ilegal derivada de la construcción del muro ni dar asistencia
para mantenerla, agregó el dictamen, leído por el juez Dhi Jiuyong,
presidente de la CIJ.

En este sentido el 20 de julio de 2004 l a Asamblea General de las
Naciones Unidas votó por mayoría abrumadora a favor de que Israel siga
el dictamen de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y detenga la
construcción del muro de separación en Cisjordania, además de destruir
las partes ya edificadas.

En una resolución que obtuvo 150 votos a favor, seis en contra y diez
abstenciones, la Asamblea también urgió a los Estados miembros de la
ONU a cumplir con las obligaciones marcadas por la opinión de la CIJ,
en el sentido de "no reconocer la situación ilegal resultante de la
construcción del muro en los territorios ocupados palestinos,
incluyendo el oriente de Jerusalén".

Condenamos enérgicamente los recientes atentados de ataques suicidas
del martes 31 de agosto pasado, dejando un saldo de 16 muertos y 90
heridos en atentados simultáneos en dos buses en la ciudad Beersheba,
al sur de Israel. El grupo radical Hamas se adjudicó los actos.

Dos autobuses de línea, que marchaban por la avenida principal de la
ciudad, quedaron envueltos en llamas cuando dos de sus pasajeros, que
resultaron ser palestinos suicidas, detonaron las cargas que llevaban
consigo.

Ahmed al-Qawasme y Al-Jabari, concretaron así un primer atentado con
bomba en territorio israelí desde el que fue perpetrado en el puerto de
Ashdod, hace cinco meses, con saldo de once personas muertas.

El grupo integrista islámico Hamas se responsabilizó de los atentados a
través de un panfleto: "Este es el comienzo de la erupción del volcán
que estallará contra Israel en venganza por el asesinato del jeque
Ahmed Yassin (líder espiritual del Hamas) y de Abdelaziz Rantisi (su
sucesor)".

Tanto el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat,
como el primer ministro palestino, Ahmed Qureia, condenaron los
atentados y llamaron al gobierno de Israel a reiniciar las
negociaciones y a comprometerse con la aplicación del plan de paz
denominado Hoja de Ruta.

El Secretario General de la ONU, Kofi Annan, condenó en los términos
más enérgicos el doble atentado suicida ocurridos en la ciudad
Beersheba. En un comunicado, Annan instó a la Autoridad Palestina a
hacer todo lo posible por presentar a los responsables ante la justicia
y por ponerle fin a este tipo de crímenes.

Bajo este contexto alentamos a redoblar los esfuerzos de todas las
partes para avanzar hacia una solución política del conflicto.

Los militantes de la paz y de la democracia de todo el mundo, deben
unir sus voces y respaldar todos los esfuerzos que se hagan desde
todos los espacios, para no malograr la esperanza que no sólo es la de
israelíes y palestinos, sino también la de todos los hombres y mujeres
del mundo que creen en la posibilidad de convivir entre lo diverso.

Por las consideraciones expuestas solicitamos la aprobación del
presente Proyecto de Declaración, expresando nuestra esperanza para que
ambas partes puedan concretar esa anhelada paz con justicia, en forma
duradera y amplia en la región.

Rubén Giustiniani.-