Número de Expediente 2768/03

Origen Tipo Extracto
2768/03 Senado De La Nación Proyecto De Declaración FALCO : PROYECTO DE DECLARACION REPUDIANDO LOS ATENTADOS PERPRETADOS EN BAGDAD , IRAK .
Listado de Autores
Falco , Luis

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
04-11-2003 05-11-2003 162/2003 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
05-11-2003 10-03-2004

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO
ORDEN DE GIRO: 1
05-11-2003 10-03-2004

ENVIADO AL ARCHIVO : 19-04-2004

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 18-03-2004
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:SE AP. UN PD. CONJ.S. 2686/03

Órdenes del Día

NÚMERO DE FECHA ESTADO ANEXO
8/04 16-03-2004 CADUCA Sin Anexo
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2768/03)

PROYECTO DE DECLARACIÓN

El Senado de la Nación,

DECLARA:

Que repudia la ola de atentados suicidas perpetrados en la ciudad de
Bagdad el lunes 27 de octubre que dejara como saldo 45 muertos y más de
200 heridos.

Su solidaridad con la Cruz Roja Internacional, cuya sede del Comité
Internacional (CICR) fue alcanzada por una de las explosiones en lo que
constituye el más grave ataque contra esta institución en sus 140 años
de vida.

Luis A. Falcó.-

FUNDAMENTOS

Señor presidente:

A días del inicio del mes de ayuno musulmán del Ramadán, en un lapso
de tan sólo 45 minutos, cinco atentados suicidas fueron perpetrados en
la ciudad de Bagdad el pasado lunes 27 de octubre causando casi medio
centenar de víctimas fatales y más de 200 heridos.

En distintos sectores de la ciudad, y en este breve lapso, varios
coches bomba conducidos por terroristas suicidas atacaron la sede de la
Cruz Roja Internacional y cuatro puestos policiales, considerados
"colaboradores" de las fuerzas de ocupación anglo-norteamericanas.

Esta es obra de la denominada resistencia iraquí que, desplegando una
estrategia de guerra de guerrillas, se ha propuesto atacar focos
invasores y "colaboracionistas".

De la sincronización y el nivel de temeridad de los hechos se colige
que estamos frente a una nueva modalidad estratégica de acción directa
destinada a sembrar el terror buscando repercusiones que, trascendiendo
los límites propios de la escena generen impacto en las naciones que
componen la alianza "ganadora".

El listado de víctimas registradas incluye a un soldado norteamericano,
una decena de policías iraquíes y, por lo menos, 30 civiles iraquíes.
Dos de las víctimas eran agentes del Cruz Roja Internacional,
destinados a la seguridad de la sede.

Según fuentes de la organización la tragedia podría haber sido mucho
más grave, ya que en el edificio trabajan más de 100 personas.

Por tal motivo, la entidad humanitaria anunció públicamente por medio
de su director de operaciones, Pierre Kraehenbuehl, la reducción de
personal en Bagdad y sostuvo que la institución seguirá trabajando en
Irak "porque tiene un mandato muy claro según las Convenciones de
Ginebra".

A esta actitud de la Cruz Roja debe sumarse el retiro temporal del
personal de las Naciones Unidas decidido sorpresivamente el jueves 30
de octubre para, según trascendió, "realizar consultas sobre la
situación de seguridad".

Según la vocera de la ONU en Ginebra, Marie Heuze, "se ha pedido al
personal de Bagdad que salga temporalmente para consultar con nuestra
gente de la sede central sobre el futuro de nuestras operaciones".

Más allá de toda especulación sobre quiénes son los autores
intelectuales del hecho y de las razones (o sinrazones) que asisten a
la resistencia iraquí, este hecho nos parece tan condenable como
cualquier otro atentado criminal.

Si bien es cierto que desde mi banca repudié siempre la invasión a Irak
y me opuse a la desmesurada ambición imperial de los Estados Unidos y
sus aliados, no es menos cierto que rechazar cualquier atentado fue
siempre una constante en mi labor parlamentaria. Y esta actitud no
obedece a un mero hábito legislativo sino a la convicción profunda de
que la violencia no constituye medio apropiado para la obtención de
objetivos políticos de ninguna naturaleza.

Esta sucesión de hechos que hoy repudiamos constituyen una previsible
respuesta a la agresión invasora y plantean un desafío de proporciones
al sistema de seguridad desplegado por la coalición que intenta
impulsar la reconstrucción de Irak bajo un régimen de "autonomía
vigilada".

Vale la pena recordar que los actos terroristas de magnitud en la
Bagdad de post guerra comenzaron con la voladura del edificio sede la
Organización de las Naciones Unidas (que costara 23 vidas el 19/8/2003)
y con el frustrado intento de asesinato del número dos del Pentágono,
Paul Wolfowitz, perpetrado el día anterior de los hechos que mediante
este proyecto rechazamos.

Remarcando una vez más que los actos de terror sólo generan más
violencia y que resultan absolutamente inconducentes para el camino de
por sí dificultoso hacia una transición en paz, solicito a mis pares su
voto afirmativo para la aprobación de la presente iniciativa.

Luis A. Falcó.-