Número de Expediente 2730/05

Origen Tipo Extracto
2730/05 Senado De La Nación Proyecto De Declaración MARTIN Y OTROS : PROYECTO DE DECLARACION RECORDANDO EL PASE A LA INMORTALIDAD DE DOMINGO FAUSTINO SARMIENTO ACAECIDA EL 11 DE SETIEMBRE DE 1888
Listado de Autores
Martin , Floriana Nélida
Caparrós , Mabel Luisa
Gallego , Silvia Ester
Menem , Eduardo
Giri , Haide Delia
Bar , Graciela Yolanda
Maza , Ada Mercedes

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
26-08-2005 07-09-2005 134/2005 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
31-08-2005 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO

ORDEN DE GIRO: 1
31-08-2005 07-09-2005

ENVIADO AL ARCHIVO : 27-10-2005

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 07-09-2005
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:SE AP.TEXTO UNIF.2709,2842,2380,2630,2631/05.-
En proceso de carga


Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2730/05)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación

D E C L A R A:

Recordar el pase a la inmortalidad de DOMINGO FAUSTINO SARMIENTO, acaecida el 11 de setiembre de 1888, sanjuanino de ley, austero y honrado, genio y figura capaz de entregarlo todo para alcanzar la realización de sus ideas, en aras de la civilización y el progreso de los pueblos.

Nélida Martín. - Mabel L. Caparrós. - Silvia E. Gallego. - Eduardo Menem. - Haide Giri. - Graciela Bar. - Ada Maza.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El 15 de febrero de 1811, nacía en San Juan de la Frontera, Domingo Faustino Sarmiento. Criollo de cepa hispánica con profundas raíces en lo visigótico y lo morisco de la raza, fue al mismo tiempo un hombre tierno y terrible, pacífico y combativo, libertador y autoritario, tildado de loco por muchos y clamado genial por cultos y excelsos, insultado y bendecido, blanco de burlas acerbas y objeto de admiración extrema. Pasó una niñez difícil con penurias económicas como la describe en sus escritos autobiográficos, al recordar a su madre, doña Paula Albarracín, pero la pobreza no lo doblegó. Fue autodidacta y lo que logró, lo obtuvo por su tenacidad puesta al servicio de la inteligencia.

De apariencia contradictoria, este sanjuanino de ley, mostró sus cualidades y defectos más predominantes en su rasgo de periodista, al que subordinó sus dotes de escritor. Las características de su prosa, la impresión de su estilo, su gala literaria, devenían del solo correr de su pluma, casi siempre fragmentaria, pero con un decir las cosas en forma directa y franca.

En otro ambiente y con otra misión, tal vez habría sido novelista. Su memoria fidelísima del colorido y de los detalles, su imaginación constructora, su nativo arte de contar, formaban el don característico de reproducir el paisaje y el hombre. Lo que constituyó su verdadera unidad, fue su convicción de que el conocimiento era lo único que distinguía al hombre de la bestia. Durante toda su vida sostuvo la superioridad del espíritu como el máximo valor humano y enseñó a la "generación de sibaritas y especieros enriquecidos" - según sus palabras - de cómo la hoja de papel animada por la palabra, puede transformarse en hoja de acero laboriosa y vengadora, para ejecutar tiranos, hacer civilización y fundar naciones.

Fundado por Sarmiento, el 20 de julio de 1839 apareció en la Provincia de San Juan, el semanario El Zonda, publicación que se caracterizó por sus ataques y grandes críticas contra Juan Manuel de Rosas. Cuenta la historia diversas versiones acerca de su desaparición, a los pocos días de su lanzamiento; algunos sostienen que el gobierno provincial lo obligó a pagar altos impuestos por la publicación, sosteniendo otros que Rosas ordenó levantar el precio de impresión.
por parte de la única imprenta existente. Pero en realidad, la importancia de esta publicación es que inicia al ilustre sanjuanino en su verdadera vida de periodista, sesgo que mantuvo durante toda su existencia.

Por orden de las autoridades, en la mayor pobreza, abandona San Juan y se traslada a Chile. En el trayecto, al pasar por los baños de Zonda, deja escrita en una piedra una frase en idioma francés, que luego traduciría como ¡ Bárbaros! las ideas no se deguellan, demostrando con ello su espíritu combativo y su convicción de que el conocimiento y por ende la educación como medio de alcanzarlo, son los valores mas importantes del ser humano.

Desterrado a Chile, en menos de tres meses, bajo el seudónimo de "Un teniente de Artillería en Chacabuco", publica en El Mercurio de Valparaíso, un sonoro artículo de sesgo patriótico, que le valió el cargo de redactor del periódico y le abrió las puertas del periodismo chileno. El mismo, titulado "12 de febrero de 1817", reinvindica la figura de San Martín, haciéndolo merecedor del elogio de los grandes literatos y periodistas del momento en el país trasandino.

Dos meses después, fue fundador y director de El Nacional, primer periódico de Santiago; a posteriori, funda y dirige El Progreso, diario de carácter político, comercial y literario. La Crónica, periódico semanal, político y literario y el Consejero del Pueblo, periódico mensual que sostuvo la candidatura de Montt, fueron también ediciones en las que intervino. En mayo de 1866 aparece en New York la revista "Ambas Américas", anunciando en el prólogo sus propósitos: cultivar la inteligencia, propender al desarrollo de la riqueza agrícola, mejorar la educación del pueblo y fomentar la unión de todos los pueblos americanos. Por último funda El Censor, su postrer empresa, que lo colocó entre los iniciadores de la mas adelantada época del periodismo argentino. Fue en los periódicos chilenos y argentinos donde publicó buena parte de sus principales obras: "Mi defensa", "Argirópolis", "Recuerdos de Provincia", "Campaña en el Ejército Grande", "Civilización y Barbarie". Sarmiento recordaba, en un artículo publicado en el diario Nacional, el 15 de mayo de 1841, que "por el diarismo el secreto de los gabinetes se comunica, no de oído en oído, sino de diario en diario, transmitiéndose a los extremos del mundo; por el diarismo los pueblos mandan, la opinión pública se forma y los gobiernos la siguen mal de su grado".

No hay duda alguna que Sarmiento subordinó sus dotes de escritor a su ser de periodista. Su literatura neológica y pintoresca - mal pergeñada a veces - poseía algo superior al concepto rígidamente constructor de la academia; y ese concepto no era otro que la vida, que es irregular, pero a la vez es fecunda. Añadía a esto, el prestigio de su gran virtud comunicativa, la jovialidad, que era el reflejo dichoso de una salud moral inquebrantable.

De ocurrencias, más que de expresión, iniciaba los temas de sus escritos sin meditación previa, colmándolos de originalidad, espontaneidad y frescura . "Mis ideas se arrastran al comenzar el escrito, que no adquiere vigor sino a medida que avanza, como aquellos generales a quienes la batalla misma ilumina". Su gran imaginación creadora le llevó a describir con fidelidad paisajes desconocidos para él, como la pampa en el Facundo, la que conoció siete años después de pintarla con sus palabras.

Idealista como el Quijote, arremetió con imaginación, pluma y espada todo lo que tenía o creía tener adelante, pero al enfrentar los problemas concretos aparecía Sancho y el sentido práctico, le advertía de la realidad, evitándole el cometer errores. Fue la antítesis del "no te metás", siempre en la línea de fuego, diciendo lo que pensaba y haciendo lo que le parecía justo y oportuno, sin dudar ni vacilar. Este intelectual de excepción, con la violencia de Facundo, el idealismo del Quijote y el sentido común de Sancho, es el arquetipo político nacional, austero y honrado, características que lo hicieron rondar siempre entre el genio y la figura.

No es mi intención que los envuelva la misma pasión que siento por Sarmiento, sanjuanino de lustre, parte de nuestra historia; pero anida en mi alma la pequeña ilusión de que rindiéndole el merecido homenaje que insto, recordemos que se puede lograr aún lo que muchos creen imposible: una República grande y democrática. Para ello es necesario animarse a probar, con el tesón de este grande, sin concesiones para la realización de nuestros ideales y todo ello¿por un sueño.

Nélida Martín. - Mabel L. Caparrós. - Silvia E. Gallego. - Eduardo Menem. - Haide Giri. - Graciela Bar. - Ada Maza.-

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