Número de Expediente 2407/06

Origen Tipo Extracto
2407/06 Senado De La Nación Proyecto De Ley SAADI : PROYECTO DE LEY MODIFICANDO LA LEY N° 22428 DE CONSERVACION Y RECUPERACION DE LA CAPACIDAD PRODUCTIVA DE LOS SUELOS .
Listado de Autores
Saadi , Ramón Eduardo

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
06-07-2006 12-07-2006 107/2006 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
12-07-1906 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE AGRICULTURA, GANADERÍA Y PESCA
ORDEN DE GIRO: 1
13-07-2006 28-02-2008
DE PRESUPUESTO Y HACIENDA
ORDEN DE GIRO: 2
13-07-2006 28-02-2008

EL EXPEDIENTE CADUCO EL 29-02-2008

ENVIADO AL ARCHIVO : 29-07-2008

En proceso de carga


Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2407/06)

PROYECTO DE LEY

El Senado y Cámara de Diputados,...

ARTICULO 1º.- Modifícase la Ley 22.428, de Conservación y Recuperación de la Capacidad Productiva de los Suelos, en la siguiente forma:

a. Sustitúyese el último párrafo del artículo 11, por el siguiente:
¿Dicho monto podrá llegar al CIEN POR CIENTO (100%) en los Distritos de Conservación sin riego ubicados al sur del Río Colorado y en los Distritos de Conservación ubicados en las provincias del NOA (La Rioja, Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Salta y Jujuy).¿
b. Sustitúyese el último párrafo del artículo 21, por el siguiente:
¿Esta exención se extenderá a DIEZ (10) años en los casos en que los predios se encuentren ubicados en Zona de Frontera (Ley 18.575 y sus Decretos reglamentarios), al sur del Río Colorado (Zona Patagónica) o en las provincias del NOA (La Rioja, Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Salta y Jujuy).¿
c. Sustitúyese el último párrafo del artículo 24 por el siguiente:
¿Esta Comisión tendrá carácter de organismo asesor y podrá emitir dictámenes vinculantes, procurando asegurar la compatibilización de los esfuerzos nacionales, provinciales y privados, en todos los aspectos relacionados a los problemas del uso, conservación y mejoramiento del recurso. Los integrantes de la misma desempeñarán sus cargos en forma
honoraria.

ARTICULO 2º.- Facúltase a la Jefatura de Gabinete de Ministros a redistribuir las partidas necesarias con el objeto de facilitar la plena vigencia de la Ley 22.428, de Conservación y Recuperación de la Capacidad Productiva de los Suelos.

ARTICULO 3º.- Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Ramón Saadi.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:


Un 70 por ciento del territorio argentino está cubierto por ecosistemas áridos que son vulnerables al impacto del cambio climático global, cuyas consecuencias día a día se intensifican.

El tema seleccionado para el Día Mundial del Medio Ambiente 2006 ha sido no por casualidad "Desiertos y Desertificación": indicando la importancia de cuidar las vastas extensiones de tierras áridas y semiáridas del mundo frente a la creciente pérdida de las propiedades del suelo.

El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), trata de enfatizar la relevancia de proteger a estas tierras, las cuales cubren más del 40% de la superficie del planeta teniendo en cuenta que, el deterioro de los suelos va en desmedro de la producción y consecuentemente conduce al deterioro de la salud y la calidad de vida de los ciudadanos.

En Argentina, donde más del 80 por ciento del territorio está bajo actividades agrícola-ganaderas y forestales, se registra un desgaste de 60 millones de hectáreas, que cada año entran en procesos erosivos posibles de ser categorizados como desertificación.

Actualmente la población de nuestro país asentada en tierras con problemas de desertificación, ocupa el 30 por ciento del total nacional, es decir, unos 9 millones de habitantes ven disminuida sus condiciones de vida: se generan procesos socioeconómicos que agudizan la pobreza y la marginalidad, promoviendo movimientos migratorios no planificados hacia las grandes ciudades.

La desertificación también conlleva problemas para la salud: desnutrición y malnutrición, enfermedades de origen hídrico, patologías infecciosas entre las más comunes.

La Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación ha trabajado en planes, programas y proyectos referidos a la recuperación y utilización sostenible de los suelos, tendiendo a evitar la erosión y degradación de las tierras. En esa línea, la Secretaría se integró al Programa de Acción Nacional de Lucha Contra la Desertificación (PAN) que tiene como meta mitigar los efectos de las sequías a fin de contribuir al logro del desarrollo sostenible de las zonas afectadas.

Debemos destacar que el ciclo de los nutrientes en los suelos del noroeste argentino es muy diferente a las zonas templadas -en éstas una porción importante de la materia orgánica (MO) y de los nutrientes disponibles permanece en el suelo, mientras que en aquellos una proporción mayor está en la biomasa y recorre su ciclo dentro de la estructura orgánica del sistema-.

Por ejemplo, la supresión de un bosque significa que el suelo no puede retener los nutrientes ni permitir su ciclo natural, situación ésta que resulta agravada por las altas temperaturas y períodos de lluvias lixiviadoras.

El enlace de las partículas del suelo para formar agregados estables es esencial para que sus condiciones de laboreo sean óptimas, los frágiles suelos del NOA de encontrarse con buenas condiciones de agregación proveerían condiciones físicas óptimas para la penetración de las raíces, drenaje libre y moderada retención de agua.

Los suelos bien agregados son más resistentes a la erosión que las partículas que lo componen: arcilla, arena, limo y materia orgánica. La dinámica e inestabilidad de ésta última en zonas tropicales, como las que abarcan suelos del NOA merece discutir el argumento en particular y en relación al laboreo del suelo.

La materia orgánica del suelo tiene una fuerte relación con la persistencia y degradación de los pesticidas y residuos orgánicos en el suelo, la importancia de sus efectos positivos son aún ampliamente ignorados por muchos actores del sector agrícola. Entre sus contribuciones positivas conviene destacar: a) es la mayor fuente natural de nutrientes inorgánicos y de energía microbiana, b) sirve como material de intercambio iónico y agente quelante para mantener disponibles el agua y los nutrientes del suelo, c) promueve la agregación del suelo y el desarrollo de la raíces, d) mejora la infiltración del agua y su eficiencia de uso.

El nivel de materia orgánica en el suelo es influenciado por los factores que según su importancia son: el clima, la vegetación, la topografía, el material original y el tiempo. Todos ellos interactúan parcialmente, por ejemplo lluvias abundantes (clima) resultan generalmente en mayor producción de biomasa (vegetación). La materia orgánica del suelo alcanza un estado de equilibrio cuando estos factores, excepto el tiempo, varían muy poco; para alcanzar un equilibrio estable, según el clima, son necesarios entre 100 y 2000 años.

El efecto de los residuos orgánicos sobre la materia orgánica del suelo parece jugar un rol muy importante en la determinación del equilibrio y se relaciona mucho con la cantidad y muy poco con el tipo de residuo. Su descomposición es un hecho fundamental para sostener el contenido de materia orgánica en el suelo, pues los productos de la degradación son incorporados en diferentes combinaciones.

En el NOA la tala y el uso del suelo en agricultura, con aumento de la presión sobre el mismo, provocan un considerable incremento y concentración de los escurrimientos superficiales. Las condiciones naturales dan lugar a cambios en la red de drenaje natural, favorecidos por las características del relieve de pendientes largas y continuas. Por ello, es esencial conocer cuanto y como se mueve el agua superficial dentro de una cuenca; manejar los escurrimientos, sanear y recuperar las áreas afectadas por erosión y/o anegamiento.

De los 3,8 millones de ha con aptitud agrícola del NOA 1,4 millones de ha están habilitadas, de ellas 330 mil presentan desmontes inapropiados, 827 mil muestran signos de erosión hídrica y 102 mil erosión eólica. Es común observar pérdidas de materia orgánica, cambios en la disponibilidad de nutrientes (Nitrógeno y Fósforo) y acidificación del suelo.

En diversas zonas del Noroeste Argentino la incorporación de tierras se realizó y realiza aún, por medio del desmonte, con la particularidad que debido a la fuerte demanda en lo últimos años para ejecutar proyectos, cada vez mas se deben utilizar zonas que tienen menor "calidad ambiental", es decir, suelos de inferior calidad, extremas condiciones de temperaturas y evapotranspiración, lluvias irregulares y escasas y muy poca infraestructura de apoyo como caminos transitables, puestos de repuestos y gas-oil e insumos, etc.

En las Provincias de La Rioja, Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Salta y Jujuy ha habido ampliaciones sucesivas de la frontera agropecuaria, al ritmo de las fluctuaciones económicas de nuestro país.

En la década del 70 comenzó en el Este de la Provincia de Tucumán, con dos ampliaciones posteriores, en el 80 y una última en los 90; hoy Tucumán tiene su frontera agropecuaria colmada, es decir no quedan tierras para incorporar al cultivo de granos, o son muy escasas.

En la actualidad en esta región se contabiliza que Tucumán, tiene unas 260.000 has. de soja; Salta 355.000 has.; Santiago del Estero pasa a 775.000 has. liderando el NOA., y Catamarca con una pequeña parte de la producción; que en conjunto, y con poco maíz-sorgo en verano y trigo en invierno se llega a aproximadamente 1.900.000 hectáreas en producción de granos (NOA 2005).

No hay que desconocer los cultivos regionales; poroto en Salta y algodón en Santiago del Estero, que no se incluyen en este análisis, pero que tienen una importancia indiscutida.

Con esta cantidad de hectáreas bajo cultivo, todo lo que se realizó mal desde el comienzo, o que se continúa realizando -como por ejemplo desmontes mal planificados, ocupación de suelos con severas limitaciones agronómicas, etc.-, hace que se manifiesten a nuestros días síntomas de ese mal manejo; y como se trata de extensas áreas, con clima monzónico tropical o subtropical continental, seco en invierno y caluroso y húmedo en verano, el tiempo que tardan en cicatrizar los problemas, principalmente los de suelo, lleva décadas, y no se retorna a la situación inicial.

Varias de estas provincias no pudieron aprovechar desde el comienzo los beneficios de la siembra directa, porque no se practicaba cuando se inició el desmonte, o las tecnologías de fertilización y manejo integrado de plagas, enfermedades y malezas, ya que en la primera incorporación de tierras se siguió un esquema tradicional de cultivo.

Al aparecer los primeros alertas de erosión, se realizaron curvas de nivel, arados de cincel, menor movimiento de suelos, etc. pero eso no bastó, mientras que en Salta, Jujuy, La Rioja, Catamarca, Tucumán y Santiago del Estero, parte de la superficie incorporada pasó a manejarse con mayor criterio ecológico.

En la actualidad, con la conjunción del conocimiento y de las herramientas de manejo y conservación de suelos disponibles para la región, el objetivo debería ser estabilizar el ingreso neto de los productores, que sea positivo en el tiempo, y con el menor deterioro y contaminación ambiental posible.

Desde las acciones en ese sentido, se debe impulsar el crecimiento de economías regionales a través de la enseñanza de un mejor aprovechamiento del suelo, con la promoción de actividades de capacitación a productores y técnicos de todas las provincias que ya sufren sus secuelas.

Como una forma de garantizar lo anteriormente expuesto, se propone ampliar los beneficios actualmente existentes para los distritos de conservación situados al sur del Río Colorado equiparándolos con los ubicados en las Provincias del Noroeste Argentino, facultando a la Jefatura de Gabinete de Ministros a redistribuir las partidas necesarias con el objeto de garantizar la plena vigencia de la legislación sobre la materia.

Por estas consideraciones, solicito de los señores Senadores el voto afirmativo para el presente proyecto.

Ramón Saadi.