Número de Expediente 2155/06

Listado de Autores
Pinchetti de Sierra Morales , Delia Norma
Bussi , Ricardo Argentino

En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2155/06)

PROYECTO DE COMUNICACION

El Senado de la Nación

Vería con agrado que el Poder Ejecutivo nacional, a través del organismo que corresponda, informe sobre los siguientes puntos, concernientes a la provincia de Tucumán:

· Que programas se ejecutan en la provincia de Tucumán respecto a menores con problemas de conducta.
· Que programas se ejecutan en la provincia de Tucumán respecto a menores en conflicto con la ley.
· Cuales son los montos de las partidas efectivamente giradas a la provincia de Tucumán para los hogares que albergan a menores con problemas de conducta.
· Que fondos envió la Nación a la provincia de Tucumán especialmente para la reestructuración y reparación del Instituto Roca, destinado a menores en conflicto con la ley.
· Que avances se lograron a la fecha en dicha obra.
· Si se tiene conocimiento de la urgencia de contar con las dependencias adecuadas, ya que, ante la falta de espacio en los hogares, de menores estos eran alojados en la Alcaidía de Menores del Departamento Central de la Policía de Tucumán, en dos enormes jaulas de alambre tejido, que a su vez estaban subdivididas en espacios más reducidos, de un metro por dos.
· Si en esa oportunidad el Poder Ejecutivo nacional aportó alguna medidas al respecto.
· Que evaluación cabe sobre esta situación y otras en materia de Justicia y Seguridad.

Delia N. Pinchetti de Sierra Morales. - Ricardo A. Bussi.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

Durante 2002, en medio de la profunda crisis que afecto a nuestro país un medio gráfico local había realizado una encuesta que arrojo que los tucumanos sufrían por la inseguridad. Los vecinos de San Miguel de Tucumán y de las principales ciudades del interior aseguraban que lo que más les molestaba era vivir en medio de una ola de delitos. Por entonces el 41% de los consultados respondió eso ante las preguntas. Esta encuesta se había realizado, al azar, por teléfono, a 400 personas mayores de 18 años.

En ese momento lo que mas había llamado la atención fue que el 41% de los entrevistados respondió afirmativamente a la pregunta: ¿vivió usted algún episodio relacionado con la inseguridad durante 2002? Esta encuesta destaco que la delincuencia no distingue géneros, ya que del total de encuestados que dijeron haber sido víctimas de algún delito, el 42% eran mujeres.

Según una encuesta realizada recientemente para otro medio local los tucumanos siguen preocupados por la inseguridad y en este caso los guarismos han crecido. Con un 51,29 %, la inseguridad encabeza las preferencias al momento de solicitar mejoras en la acción de gobierno, mientras la acción de la Justicia debe mejorar para un 21, 29% de nuestros comprovincianos.

Todos sentimos que desde 2002 a la fecha la situación social ha mejorado en nuestro país, pero parece haber empeorado en Tucumán, si nos llevamos por el crecimiento de la sensación de inseguridad que se detenta en nuestros comprovincianos.

Mientras tanto se conoce que el ritmo de crecimiento del índice delictivo de menores en la provincia de Tucumán entre 1997 y 2004 subió un 40 %, y que ese ritmo no fue acompañado por el presupuesto de la provincia destinado a los hogares de menores.

En mayo de 2004 el Gobierno provincial había asegurado que se notaba la baja en la inseguridad en las zonas más peligrosas de Tucumán. El secretario de Seguridad Ciudadana de la Provincia, aseguró entonces que había un importante avance en la disminución de los índices delictivos en las denominadas "zonas rojas" de San Miguel de Tucumán. Sin embargo reconoció que la situación con respecto a los menores que delinquen era preocupante.

En septiembre de 2004 tres menores simularon una pelea en una celda para lograr escapar. Para eso arrebataron el arma de un policía y no aserraron rejas, ni violentaron cerraduras, tampoco aprovecharon un momento de descuido para poder huir. Simplemente simularon pelear entre ellos para que los policías ingresaran a la celda, y sin hesitaciones, redujeron a uno de ellos y le arrebataron el arma reglamentaria. Eran cerca de las dos de la mañana y se suponía que todos los internos debían de estar durmiendo. De repente gritos e insultos en una de las celdas que alojaba a tres menores de entre 15 y 16 años. Policías de la guardia de infantería fueron hasta el lugar de los disturbios, e intentaron separar y calmar a los menores que además habían prendido fuego a uno de los colchones. Los policías sofocaron el conato de incendio pero en ese momento, uno de los precoces delincuentes, forcejeó con un agente a quien le quitó su pistola. Arma en mano amenazó de muerte a un sargento y a un agente y luego los tres menores salieron al patio del Instituto y desde allí escaparon realizando disparos a los policías que intentaron detenerlos.

Durante los primeros meses del año 2005 los medios locales dieron cuenta de la gravedad de la situación y de la falta de propuestas del área responsable de los menores, al hacer referencia al aumento presupuestario que benefició a algunas áreas del estado provincial, pero no alcanzó a los organismos que trabajan en la recuperación de menores en conflicto con la ley.

Si nos llevábamos por esos datos resultaba evidente que la provincia carecía de un programa de resocialización de los jóvenes alojados en hogares de detención, lo que agravaba su situación en cuanto a su inserción en la sociedad. En ese momento, en cuanto a la falta de recursos para el área se dijo desde el oficialismo que el sistema seria financiado con aportes extraordinarios de la Nación.

El presidente de la Comisión de Seguridad de la Honorable Legislatura de Tucumán explicó entonces, en medio de la discusión del Presupuesto provincial, que los fondos que llegarían de la Nación para construir un centro de menores iban a ser una inversión sin precedentes en el área.

El aumento presupuestario con fondos provinciales que beneficiaba a otras áreas del Estado no alcanzo durante 2005 en igual proporción a los organismos que trabajan en la recuperación de los menores en conflicto. Si se comparaban los gastos de estos institutos en 2004 con lo proyectado para el año 2005 las subas resultaron insignificantes y en algunos casos, hubo entidades que sufrieron recortes.

Tal fue el caso del Hogar Escuela Eva Perón y Centro Recreativo San Luis Gonzaga, que en 2004 contó con un presupuesto de $ 745.000 y, en 2005, tuvo una partida de $ 730.000.

En idéntica situación apareció el Instituto Adoratriz de Protección a la Joven ($ 209.000 contra $ 205.000) y el Instituto de Orientación Juvenil y Buen Pastor ($ 233.000 frente a $ 232.000).

Todo ello se contrapuso a la opinión de los especialistas que aseguran que la solución no es la detención prolongada de los menores, sino una contención adecuada acorde a la edad. Sin embargo, por ahora eso parece estar lejos de concretarse en Tucumán.

El 2 de marzo de 2005 arribó a nuestra provincia el Ministro de Justicia de la Nación. Su llegada generó expectativa por parte de los funcionarios provinciales quienes pugnaron por acercarle sus inquietudes.

El presidente de la Comisión de Seguridad y Justicia de la Cámara Legislativa, afirmó que la visita de esos funcionarios nacionales a Tucumán era de suma importancia, ya que eso significaba que el Estado Nacional tenía interés en la problemática del interior del país.

En esa oportunidad el parlamentario provincial acepto que el gran porcentaje de delitos lo cometían menores de edad y que por ese motivo la reestructuración del Instituto Roca significaría la disminución de los hacinamientos en los lugares donde se alojan a los menores que delinquen.

En ese momento se aseguro que con el arribo del Ministro de Justicia de la Nación en marzo de 2005, había quedado formalizado el desembolso por parte del Gobierno Nacional de 2,7 millones de pesos para la refacción del Instituto Roca, para menores en conflicto con la ley penal.

El mismo Marzo de 2005 se denuncio una violenta riña entre menores detenidos en la Jefatura. El juez de menores había estado a la mañana en la alcaidía de Menores que está en la Jefatura de Policía, luego de intervenir en una revuelta que armaron ocho internos. Estos habían sido trasladados allí porque habían quemado todos los colchones que había en el sector de máxima seguridad del instituto Belgrano.

Los menores se habían infligido heridas y habían peleado entre ellos, por lo que debieron ser atendidos por médicos. No había dudas entonces que la situación estaba totalmente descontrolada. ¿En esta alcaidía hay 58 menores, y hay otros 21 en el Instituto Roca. No hay más lugar para nadie, pero la Policía, por los hechos que producen, sigue deteniendo a menores, y la verdad es que ya no sé qué hacer¿, indicó el magistrado.

El problema se había agravado con los mayores, ya que las comisarías de Tucumán estaban abarrotadas. Entre detenidos por delitos y contraventores (la Alcaidía de la Jefatura estaba destinada para estos últimos) había más de 200 menores alojados. Por la tarde, en el Salón Blanco de Casa de Gobierno, el ministro de Justicia de la Nación, había firmado un convenio a través del cual Tucumán recibiría $ 2,7 millones para reconstruir el Instituto Roca, aclarando que la obra demandaría varios meses. Tanto en la Justicia como en la Policía se preguntaban: ¿qué se hará con los menores detenidos mientras tanto?

En Junio de 2005 un legislador de la oposición denuncio que más de 30 chicos, de entre los 14 y los 18 años, estaban detenidos en la Alcaidía de Menores del Departamento Central de la Policía de Tucumán, en condiciones infrahumanas.

La denuncia la efectuó el Presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Legislatura provincial, quien había afirmado que nunca había visto situación parecida.

Reveló el estado de abandono y el trato cruel e inhumano que sufrían los menores de edad detenidos en jaulas de alambre en el interior de un regimiento. Los chicos no tenían agua, ni luz ni camas y comían en el piso. Los organismos que tienen directa responsabilidad en el tema de los menores en conflicto con la ley son las secretarías de Seguridad, Políticas Sociales y Derechos Humanos, quienes han permanecido sistemáticamente en silencio. Los especialistas, mientras tanto dicen que en la Justicia por cada chico con problemas penales hay otros dos con expedientes abiertos por razones "asistenciales".

Transitando la mitad del año 2006 estamos en condiciones de afirmar que en Tucumán todavía no existe un programa efectivo de prevención ni tampoco de seguimiento de los menores en conflicto. Nadie prevé por ejemplo que el menor en riesgo sea contenido y su familia asistida, que el menor que delinque se disculpe con la víctima, que repare el daño causado, que trabaje haciendo tareas comunitarias, que se someta a un tratamiento, que no vaya a determinados lugares, o se junte con algunas personas, que se quede en su casa o en un centro durante su tiempo libre o fines de semana, etc. Los especialistas, mientras tanto dicen que en la Justicia por cada chico con problemas penales hay otros dos con expedientes abiertos por razones "asistenciales".

El año pasado se dijo que la Nación aportaría los recursos para el área y una suma especial para la reparación y ampliación del Instituto Roca, de régimen cerrado y de alta seguridad, sin embargo los menores continúan en la calle, sin contención y lo que es peor, los ciudadanos corriendo peligro porque las estadísticas dicen que el 80% de los delitos en mi provincia son cometidos por menores. De ellos, existen 500 menores infractores, de diferente peligrosidad y probada reincidencia que entran y salen de los distintos Institutos sin recibir los efectos beneficiosos de programa alguno.

Es por todas estas razones que precisamos conocer el monto de las partidas efectivamente giradas a la provincia de Tucumán para los hogares que albergan a menores con problemas de conducta, los fondos que envió la Nación a la provincia de Tucumán especialmente para la reestructuración y reparación del Instituto Roca, los verdaderos avances a la fecha de dicha obra, los programas que se ejecutan en la provincia de Tucumán respecto a menores con problemas de conducta, los programas que se ejecutan con respecto a menores en conflicto con la ley, conocer además si la Nación conocía que ante la falta de espacio en los hogares de menores de Tucumán, las autoridades los alojaban en la Alcaidía de Menores del Departamento Central de la Policía de Tucumán, en dos enormes jaulas de alambre tejido, que a su vez estaban subdivididas en espacios más reducidos, de un metro por dos, en este caso si la respuesta era afirmativa, medidas que en la oportunidad se tomo al respecto y cómo se evalúa desde la Nación la gestión del Gobierno de Tucumán en materia de Justicia y Seguridad. Creemos que si la Nación envió fondos seguramente conoce su destino y habrá podido evaluar su ejecución, y acercándonos esos datos nos facilitara poder hacer nuestro aporte de ideas superadoras por el bien de nuestra comunidad.

Señor Presidente, por las razones expuestas solicito a mis pares acompañar el presente Pedido de Informes.

Delia N. Pinchetti de Sierra Morales. - Ricardo A. Bussi.