Número de Expediente 2000/03
N° | Origen | Tipo | Extracto |
---|---|---|---|
2000/03 | Senado De La Nación | Proyecto De Declaración | FALCO : PROYECTO DE DECLARACION MANIFESTANDO PREOCUPACION POR EL REBROTE DE AFTOSA EN TARTAGAL , PROVINCIA DE SALTA . |
Listado de Autores |
---|
Falco
, Luis
|
Fechas en Dir. Mesa de Entradas
MESA DE ENTRADAS | DADO CUENTA | Nº DE D.A.E. |
---|---|---|
09-09-2003 | 17-09-2003 | 120/2003 Tipo: NORMAL |
Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones
DIR. GRAL. de COMISIONES | INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS |
---|---|
10-09-2003 | 07-10-2003 |
Giros del Expediente a Comisiones
COMISIÓN | FECHA DE INGRESO | FECHA DE EGRESO |
---|---|---|
DE AGRICULTURA, GANADERÍA Y PESCA
ORDEN DE GIRO: 1 |
10-09-2003 | 07-10-2003 |
ENVIADO AL ARCHIVO : 12-11-2003
Resoluciones
SENADO |
---|
FECHA DE SANCION: 29-10-2003 |
SANCION: APROBO |
COMENTARIO: |
NOTA: |
Órdenes del Día
NÚMERO | DE FECHA | ESTADO | ANEXO |
---|---|---|---|
886/03 | 15-10-2003 | APROBADA | Sin Anexo |
PRESIDENCIA/OFICIALES VARIOS
ORIGEN | TIPO | NUMERO | FECHA | AR |
---|---|---|---|---|
PE | RP | 515/04 | 01-09-2004 |
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-2000/03)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación,
DECLARA:
· Su preocupación ante el rebrote de fiebre aftosa confirmado por el
Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) en la
localidad salteña de Tartagal, que implica para la Argentina la pérdida
del status "libre de aftosa con vacunación" otorgado por la La Oficina
Internacional de Epizootias (OIE) el 7/7/2003.
· Que insta al gobierno nacional a realizar una profunda investigación
al respecto que determine el origen del brote y a tomar las medidas
necesarias para evitar su expansión.
Luis A. Falcó.-
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA)
acaba de confirmar la existencia de un rebrote de fiebre aftosa en la
localidad salteña de Tartagal.
Este nuevo foco de la enfermedad es el primero que se verifica en el
país desde enero de 2002 y, aunque las autoridades del área
correspondiente se esfuercen por minimizar el alcance de sus
consecuencias comerciales, la cuestión no deja de parecernos grave.
Si bien es cierto que los animales infectados son cerdos y que el
rebrote se constató en un matadero cuya actividad no se orienta a la
exportación, la reaparición de la enfermedad supone un importante
desafío para las autoridades sanitarias que, de ahora en adelante,
deberán redoblar sus esfuerzos de vigilancia epidemiológica para que la
afección no se propague.
Vale la pena recordar que en mayo pasado, durante la Asamblea Anual de
la OIE, la Comisión Científica para las Enfermedades de los Animales
del organismo, declaró libre de fiebre aftosa con vacunación a la zona
de la Argentina situada al norte del paralelo 42º, desde el 7 de julio
de 2003, de acuerdo con las disposiciones de su Código Sanitario para
los Animales Terrestres.
La recalificación por parte del máximo organismo veterinario mundial
significó entonces un voto de confianza para la Nación y se produjo 7
años después de que la Argentina obtuviera, en mayo de 1996, por
primera vez en su historia un status similar.
Es importante remarcar que si este rebrote no resultara inmediatamente
controlado, todo el esfuerzo que significó el reestablecimiento de la
vacunación sistemática (con la aplicación de más de 270 millones de
dosis de vacuna en cinco campañas consecutivas y la reconstrucción del
sistema de prevención y vigilancia epidemiológica organizado 10 años
atrás) corre serio peligro de desmoronarse.
De eliminarse este foco, la Argentina tendrá que volver a esperar 18
meses para recuperar el status de "país libre con vacunación" que,
luego de enorme esfuerzo, había recibido el 7 de julio pasado.
Recordemos también que durante la última reunión del Consejo
Agropecuario del Sur (CAS) que se llevó a cabo en Santa Cruz de la
Sierra, Bolivia, los países integrantes del MERCOSUR, más Bolivia,
Chile y Perú, resolvieron declarar el estado de "alerta regional" ante
la reciente detección de 15 brotes de fiebre aftosa en territorio
paraguayo y boliviano.
Ahora, frente a este nuevo brote argentino, la mayor parte de los
países vecinos han decidido cerrar preventivamente sus fronteras y es
por ello que nos preguntamos: ¿qué acciones concretas realizó el SENASA
para dar cumplimiento a las disposiciones emanadas del Comité
Veterinario Permanente del Consejo Agropecuario del Sur cuando declaró
el estado de alerta?
En aquel entonces, impulsados por la preocupación y la amenaza que los
brotes detectados en países limítrofes suponían para la industria
cárnica nacional, presentamos un proyecto de comunicación (expediente
S-1670/03, del 06/08/03) en cuyos fundamentos se sostenía: "mucho
sacrificio le costó al país erradicar esta enfermedad y reconquistar
mercados internacionales a los que hoy se exporta el producto de
nuestra ganadería generando empleo y divisas. Es por ello que las
acciones que se planifiquen para mantener a raya a la fiebre aftosa no
pueden ser improvisadas ni fruto de reacciones espasmódicas meramente
defensivas ante un estado circunstancial de alarma. Por el contrario,
es preciso desarrollar estrategias preventivas, sostenidas en el
tiempo, mediante la ejecución de acciones de carácter permanente".
Es evidente que las medidas implementadas -si es que se aplicaron-
resultaron insuficientes para evitar el rebrote de esta enfermedad. Es
por ello que nuestra preocupación se mantiene y acrecienta.
Es preciso que las autoridades sanitarias demuestren su competencia
ejecutando una profunda investigación que determine el origen del brote
y erradique con medidas enérgicas esta enfermedad que ensombrece el
panorama productivo de nuestra ganadería.
Por estas razones, ponemos a consideración de nuestros pares la
presente iniciativa, solicitándoles su voto afirmativo para su pronta
aprobación.
Luis A. Falcó.-
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-2000/03)
PROYECTO DE DECLARACIÓN
El Senado de la Nación,
DECLARA:
· Su preocupación ante el rebrote de fiebre aftosa confirmado por el
Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) en la
localidad salteña de Tartagal, que implica para la Argentina la pérdida
del status "libre de aftosa con vacunación" otorgado por la La Oficina
Internacional de Epizootias (OIE) el 7/7/2003.
· Que insta al gobierno nacional a realizar una profunda investigación
al respecto que determine el origen del brote y a tomar las medidas
necesarias para evitar su expansión.
Luis A. Falcó.-
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA)
acaba de confirmar la existencia de un rebrote de fiebre aftosa en la
localidad salteña de Tartagal.
Este nuevo foco de la enfermedad es el primero que se verifica en el
país desde enero de 2002 y, aunque las autoridades del área
correspondiente se esfuercen por minimizar el alcance de sus
consecuencias comerciales, la cuestión no deja de parecernos grave.
Si bien es cierto que los animales infectados son cerdos y que el
rebrote se constató en un matadero cuya actividad no se orienta a la
exportación, la reaparición de la enfermedad supone un importante
desafío para las autoridades sanitarias que, de ahora en adelante,
deberán redoblar sus esfuerzos de vigilancia epidemiológica para que la
afección no se propague.
Vale la pena recordar que en mayo pasado, durante la Asamblea Anual de
la OIE, la Comisión Científica para las Enfermedades de los Animales
del organismo, declaró libre de fiebre aftosa con vacunación a la zona
de la Argentina situada al norte del paralelo 42º, desde el 7 de julio
de 2003, de acuerdo con las disposiciones de su Código Sanitario para
los Animales Terrestres.
La recalificación por parte del máximo organismo veterinario mundial
significó entonces un voto de confianza para la Nación y se produjo 7
años después de que la Argentina obtuviera, en mayo de 1996, por
primera vez en su historia un status similar.
Es importante remarcar que si este rebrote no resultara inmediatamente
controlado, todo el esfuerzo que significó el reestablecimiento de la
vacunación sistemática (con la aplicación de más de 270 millones de
dosis de vacuna en cinco campañas consecutivas y la reconstrucción del
sistema de prevención y vigilancia epidemiológica organizado 10 años
atrás) corre serio peligro de desmoronarse.
De eliminarse este foco, la Argentina tendrá que volver a esperar 18
meses para recuperar el status de "país libre con vacunación" que,
luego de enorme esfuerzo, había recibido el 7 de julio pasado.
Recordemos también que durante la última reunión del Consejo
Agropecuario del Sur (CAS) que se llevó a cabo en Santa Cruz de la
Sierra, Bolivia, los países integrantes del MERCOSUR, más Bolivia,
Chile y Perú, resolvieron declarar el estado de "alerta regional" ante
la reciente detección de 15 brotes de fiebre aftosa en territorio
paraguayo y boliviano.
Ahora, frente a este nuevo brote argentino, la mayor parte de los
países vecinos han decidido cerrar preventivamente sus fronteras y es
por ello que nos preguntamos: ¿qué acciones concretas realizó el SENASA
para dar cumplimiento a las disposiciones emanadas del Comité
Veterinario Permanente del Consejo Agropecuario del Sur cuando declaró
el estado de alerta?
En aquel entonces, impulsados por la preocupación y la amenaza que los
brotes detectados en países limítrofes suponían para la industria
cárnica nacional, presentamos un proyecto de comunicación (expediente
S-1670/03, del 06/08/03) en cuyos fundamentos se sostenía: "mucho
sacrificio le costó al país erradicar esta enfermedad y reconquistar
mercados internacionales a los que hoy se exporta el producto de
nuestra ganadería generando empleo y divisas. Es por ello que las
acciones que se planifiquen para mantener a raya a la fiebre aftosa no
pueden ser improvisadas ni fruto de reacciones espasmódicas meramente
defensivas ante un estado circunstancial de alarma. Por el contrario,
es preciso desarrollar estrategias preventivas, sostenidas en el
tiempo, mediante la ejecución de acciones de carácter permanente".
Es evidente que las medidas implementadas -si es que se aplicaron-
resultaron insuficientes para evitar el rebrote de esta enfermedad. Es
por ello que nuestra preocupación se mantiene y acrecienta.
Es preciso que las autoridades sanitarias demuestren su competencia
ejecutando una profunda investigación que determine el origen del brote
y erradique con medidas enérgicas esta enfermedad que ensombrece el
panorama productivo de nuestra ganadería.
Por estas razones, ponemos a consideración de nuestros pares la
presente iniciativa, solicitándoles su voto afirmativo para su pronta
aprobación.
Luis A. Falcó.-