Número de Expediente 1952/04

Origen Tipo Extracto
1952/04 Senado De La Nación Proyecto De Declaración BUSSI Y PINCHETTI : PROYECTO DE DECLARACION REPUDIANDO LOS DESMANES PRODUCIDOS EN EL PATIO DE ARMAS DEL EDIFICIO LIBERTADOR PROTAGONIZADO POR MILITANTES DE QUEBRACHO Y LA FEDERACION DE TIERRA Y VIVIENDA .-
Listado de Autores
Bussi , Ricardo Argentino
Pinchetti de Sierra Morales , Delia Norma

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
29-06-2004 07-07-2004 125/2004 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
30-06-2004 18-08-2004

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE SEGURIDAD INTERIOR Y NARCOTRÁFICO
ORDEN DE GIRO: 1
30-06-2004 18-08-2004

ENVIADO AL ARCHIVO : 28-09-2004

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 01-09-2004
SANCION: APROBO
COMENTARIO:
NOTA:

Órdenes del Día

NÚMERO DE FECHA ESTADO ANEXO
869/04 19-08-2004 APROBADA Sin Anexo
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-1952/04)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación:

DECLARA

Su más profundo repudio a los desmanes producidos en el patio de armas
del Edificio Libertador, sede del Ministerio de Defensa, el Estado
Mayor Conjunto y del Ejercito, el pasado 24 de junio, y el copamiento y
destrozos producidos en la Comisaría N° 24 de La Boca en la madrugada
del 26 de junio, todo del corriente año, cuyos autores fueron
militantes del Movimiento Patriótico Revolucionario Quebracho, y de la
Federación de Tierra y vivienda comandada por Luis D´Elia,
respectivamente. Exhortando además a las instancias que resultaren
pertinentes a fin de que se diluciden responsabilidades, tanto en
cuanto a la identidad de los agresores, como en la posible omisión de
los funcionarios públicos, que con su inacción permitieron que este
lamentable acontecimiento acaeciera.

Ricardo A Bussi.- Delia N. Pinchetti.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El pasado 24 de junio del corriente año, cerca del mediodía, un
grupusculo de militantes enrolados en el Movimiento Patriótico
Revolucionario Quebracho, quienes en una lamentable muestra de
intolerancia y falta de civilidad, tras producir destrozos en el
ingreso del Edificio Libertador, sede del Ministerio de Defensa, el
Estado Mayor Conjunto y el Ejercito, accedieron al patio de armas,
donde procedieron a quemar cubiertas y banderas de los Estados Unidos
de Norteamérica y de las Naciones Unidas, todo ello bajo la excusa de
repudiar el envío de tropas como fuerza de paz a la hermana república
de Haití.

Apenas 48 horas después de lo ocurrido en el edificio del Ejército,
otro grupo de inadaptados, en este caso los llamados piqueteros
oficialistas (mote recibido por su cercanía y aval recibido por el
Poder Ejecutivo Nacional), tomaron y produjeron todo tipo de destrozos
en la Comisaría N° 24 de La Boca, en la Capital Federal.

Estos nuevos hecho se suman a las diarias manifestaciones a que nos
estamos acostumbrando los argentinos, donde todos los días nos
desayunamos, y sufrimos con el ritual de cortes en rutas, puentes,
calles y avenidas, ocupaciones de casas de comidas, hoteles,
supermercados, secuestros de trenes, daños en las instalaciones de
empresas privadas, agresiones a particulares, interferencias en el
funcionamiento de las empresas ferroviarias, concesionarias de rutas
etc., todo ella bajo la pasividad y tolerancia del gobierno y fuerzas
policiales.

En estos últimos tiempos, pareciera que los argentinos, por la practica
cotidiana de estos eventos, nos estuviéramos acostumbrando a los mismos
y ya hasta nos parece normal su ocurrencia. Esto Señor Presidente, si
reflexionamos un poco nos esta indicando que algo no esta funcionando
bien, el estado de derecho al cual tanto mencionamos, con el cual nos
llenamos la boca y defendemos vehementemente en los discursos, no es
nada mas que un mero argumento para bellos discursos.

Este nuevo agravio al pueblo argentino que encuentra su manifestación
en la ofensa a la Institución del ejercito Sanmartiniano, por un grupo
de inadaptados, que por su incoherencia, y al edificio de nuestra
Policía Federal Argentina, como emblema de la seguridad de los
ciudadanos, han recibido en repetidas oportunidades la repulsa de la
civilidad, que reiteradamente les rechazo su metodología de violencia
aplicada al campo de la política, es la gota que rebalso la copa.

Ante la indubitable carencia de apoyo popular, en un claro
reconocimiento a su imposibilidad de lograr su inserción
institucional, porque saben, que nadie, salvo los trasnochados de
siempre pueden adherir a su delirante ideología, acuden a una cobarde
metodología, y digo cobarde, porque ni siquiera son capaces de dar la
cara, para obtener supuestos réditos políticos.

Por cierto es poco lo que puede esperarse de quienes reivindican a la
violencia como método de construcción de poder y que rechazan a las
elecciones por considerar que " sin poder real, participar de la
contienda electoral es facilitar el montaje de un juego tramposo"

Por todo esto, si queremos ser reconocidos como país serio, es hora de
que empecemos a ser serios con nosotros mismos, es hora de que
empecemos a respetar al otro, es hora de entender que el disenso es
valido, pero básicamente es hora que empecemos a respetar el derecho
del prójimo y de que, cada uno es responsable de sus actos.

Grupúsculos como el Movimiento Patriótico Revolucionario Quebracho o
los diferentes grupos piqueteros, no pueden contar con la aquiescencia
del poder de turno, no puede ser que actúen a cara cubierta con palos y
las fuerzas policiales, sean meros testigos de su accionar delictivo,
y no se tome esto, como una actitud de criminalizar la protesta, es
simplemente poner cada cosa en su lugar

Por ello entiendo que si queremos construir un país grande que sea
reconocido como serio, tenemos que empezar a entender que el derecho
de cada uno termina donde empieza el del otro, tenemos que entender
que el derecho de la mayoría no se puede ver conculcado por unos
pocos, que más allá de la legitimidad de sus reclamos, su protesta no
debe afectar los derechos de los mas, lo cual cuando acaece trae como
consecuencia de que termina desvirtuando con ello, la justicia de su
propio reclamo.

Entonces si no empezamos a respetar nuestras cosas comunes, nuestras
tradiciones, nuestras instituciones, nuestras costumbres, va ser
difícil que nos ganemos el respeto de los de afuera.

Es hora de empezar a ser respetuosos, lo que no significa pusilánimes,
es hora de entender que del pozo salimos todos juntos y que para ello,
debemos aunar voluntades, lo cual no significa pensar igual,
simplemente es pensar en una patria nuestra, en un mundo mejor para
nuestros hijos y nietos y que si cada uno aporta lo mejor de si, mas
allá de las diferencias lógicas, podremos lograr un país mejor, como el
que ambicionamos, pero lamentablemente no construimos.

Por las razones expuestas es que me permito solicitar a mis pares la
pronta aprobación del presente Proyecto de Declaración.-

Ricardo A Bussi.- Delia N. Pinchetti.-