Número de Expediente 1942/04

Origen Tipo Extracto
1942/04 Senado De La Nación Proyecto De Comunicación SAADI : PROYECTO DE COMUNICACION SOLICITANDO LA REFORMA DEL PROTOCOLO DE OURO PRETO .
Listado de Autores
Saadi , Ramón Eduardo

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
28-06-2004 07-07-2004 124/2004 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
29-06-2004 13-09-2004

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO
ORDEN DE GIRO: 1
29-06-2004 13-09-2004

ENVIADO AL ARCHIVO : 01-11-2004

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 06-10-2004
SANCION: APROBO
COMENTARIO:
NOTA:

Órdenes del Día

NÚMERO DE FECHA ESTADO ANEXO
1047/04 14-09-2004 APROBADA Sin Anexo

PRESIDENCIA/OFICIALES VARIOS

ORIGEN TIPO NUMERO FECHA AR
PE RP 192/06 07-09-2006
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-1942/04)

PROYECTO DE COMUNICACIÓN

El Senado de la Nación

Solicita al Poder Ejecutivo Nacional que a través del Ministerio de
Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, y/o los órganos que
crea conveniente, inste con la mayor brevedad posible, al Consejo del
Mercado Común (CMC) a impulsar la Reforma del Protocolo de OURO PRETO,
aprobado por la Ley 24.560, en función de institucionalizar el Parlamento
del MERCOSUR, y el Tribunal del MERCOSUR, en aras de profundizar y
consolidar el proceso de integración de nuestra región, a los efectos de
concretar los objetivos planteados por el Mercado Común.

Ramón Saadi.-


FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El presente proyecto tiene por objeto solicitar al Consejo de Mercado Común
la reforma del Protocolo de OURO PRETO aprobado por el Congreso de la Nación
mediante Ley 24.560 el 20 de septiembre de 1995, en función de
institucionalizar el Parlamento y el Tribunal del MERCOSUR.

Es menester institucionalizar, ampliar el bloque y crear un Parlamento
regional, que entre otras competencias tenga la del establecimiento de una
moneda única, una aduana perfecta, políticas comunes exteriores y de
defensa, así como la necesidad de acelerar el proceso de integración a nivel
político, social y cultural que conforman las necesidades prioritarias de un
mercado común.

Entre aquellas condiciones imprescindibles para afianzar el proceso de
integración en el marco del MERCOSUR, se suele hablar sobre la necesidad de
darle un marco institucional más representativo y equitativo. Esta
institución es un Parlamento, una institución que aspira imitar al
Parlamento Europeo pero en una dimensión mucho más acotada, integrado por
representantes de los países miembros, elegido por votación directa por los
ciudadanos de cada uno de los cuatro Estados. La materialización efectiva de
tal institución representativa, y su viabilidad, es abordada muchas veces en
forma parcial y vaga, que alejan a la realidad del MERCOSUR de la que
reviste la Unión Europea.

Es primordial y fundamental revitalizar al Mercosur, y solo una alianza de
carácter regional, traducida en instituciones más integradas y mercados más
complementarios y fuertes, servirá para mejorar el posicionamiento relativo
de cada uno de los estados miembros en un contexto mundial cambiante, para
mejorar sustancialmente cuestiones que hacen a la solidaridad común y al
propio estado de buena vecindad, que hace al intercambio de personas, bienes
y servicios.

Frente al avance aparentemente irrefrenable de la concentración del poder
mundial, se hace imperiosa la integración, como principio reactivo de
defensa y de adaptación al cambio, a la búsqueda de nuevas ventajas
comparativas en un escenario paradójicamente cada vez más previsible y
acelerado.

Desconocer este veloz cambio de las condiciones en que se establecen las
relaciones mundiales puede retrasar doblemente la recuperación de la
Argentina y de toda la región.

En la XXIV Reunión del Consejo Mercado Común, efectuada el 18 de junio de
2003, los miembros del Consejo, reafirmaron su compromiso de asegurar el
desarrollo sustentable de sus países y la inserción competitiva en la
economía global, comprometiéndose a la creación de un futuro Parlamento del
Mercosur.

Es sabido por todos, que mediante el Tratado de Asunción, que entró en vigor
el 29 de noviembre de 1991, se inicio la constitución del mercado común
entre la República Argentina, la República Federativa de Brasil, la
República del Paraguay y la República Oriental del Uruguay, en virtud a que
la ampliación de las actuales dimensiones de sus mercados nacionales, a
través de la integración, constituye condición fundamental para acelerar sus
procesos de desarrollo económico con justicia social.

Este objetivo debe ser alcanzado mediante el más eficaz aprovechamiento de
los recursos disponibles, la preservación del medio ambiente, el
mejoramiento de las interconexiones físicas, la coordinación de las
políticas macroeconómicas y la complementación de los diferentes sectores de
la economía, con base en los principios de gradualidad, flexibilidad y
equilibrio.

Con la Constitución del Mercosur, se tuvo en cuenta la evolución de los
acontecimientos internacionales, en especial la consolidación de grandes
espacios económicos y la importancia de lograr una adecuada inserción
internacional para sus países.

Mediante el Tratado de Asunción, los Estados partes decidieron constituir un
Mercado Común, que debería conformarse al 31 de diciembre de 1994, el cual
se denominaría Mercado Común del Sur (Mercosur).

Con el Protocolo adicional al Tratado de Asunción sobre la estructura
institucional del Mercosur- Protocolo de OURO PRETO, suscripto el 17 de
diciembre de 1994, y aprobado por nuestro Congreso de la Nación mediante Ley
24.560 el 20 de septiembre de 1995, quedó perfectamente constituido el
Mercosur, determinando en su artículo 1° los órganos que componen la
estructura institucional del Mercado Común, la cual queda conformada de la
siguiente manera: a) El Consejo del Mercado Común (CMC); b) El Grupo Mercado
Común (GMC); c) La Comisión del Comercio del Mercosur (CCM); d) La Comisión
Parlamentaria Conjunta (CPC); e) El Foro Consultivo Económico- Social (FCES)
y f) Secretaría Administrativa del Mercosur (SAM).

Deriva del Protocolo de OURO PRETO, que los únicos órganos con capacidad
decisoria de naturaleza intergubernamental son: el Consejo del Mercado
Común, el Grupo Mercado Común y la Comisión de Comercio del Mercosur,
expresando mediante su artículo 3° que el Consejo del Mercado Común es el
órgano superior al cual le incumbe la conducción política de proceso de
integración y la toma de decisiones para asegurar el cumplimiento de los
objetivos establecidos por el Tratado de Asunción y para alcanzar la
constitución final del mercado común. El mismo, según surge del artículo 9°
se pronuncia mediante decisiones, las que serán obligatorias para los
Estados partes.

Este Consejo, integrado por los Ministros de Relaciones Exteriores y por los
Ministros de Economía o sus equivalentes de los Estados miembros, posee
entre sus funciones y atribuciones, según el artículo 8 del protocolo
precedentemente mencionado, a) Velar por el cumplimiento del Tratado de
Asunción, de sus protocolos y de los acuerdos firmados en su marco; b)
Formular políticas y promover las acciones necesarias para la conformación
del Mercado Común; g) Crear los órganos que estime pertinentes, así como
modificarlos o suprimirlos...

Siguiendo y respetando las fuentes jurídicas del Mercosur es que se solicita
al Consejo del Mercado Común, en respeto a sus atribuciones que cree el
Parlamento del Mercosur, mediante su institucionalización en el Protocolo de
OURO PRETO, para la cual es necesario su reforma. La importancia de avanzar
hacia la institucionalización del Parlamento del Mercosur, deviene a fin de
brindarle herramientas eficaces para dinamizar el proceso y concretar los
objetivos planteados.

Por lo tanto, las bases para una política común de la región, sea del
Mercosur o de una eventual constitución de una comunidad sudamericana, están
dadas. ¿Pero dónde está el problema? En que fundamentalmente necesitamos
establecer un marco político-institucional que nos permita ir hacia
adelante, partiendo del supuesto de que esta unidad corresponde no sólo a un
anhelo histórico, como en los años de Bolívar y San Martín, sino a otra
razón más inmediata. Si nosotros no nos asociamos, será muy difícil que
tengamos posibilidades de vivir en un mundo como el actual, marcado por
fuertes asimetrías, presiones y vulnerabilidades internacionales.

El Parlamento regional, con diputados electos en todos los países, trataría
temas de legislación para aplicar en el Mercosur. Se trata, en principio, de
resolver desde los problemas básicos como por ejemplo: los esfuerzos de
integración que suelen chocar con las diferencias de legislación entre los
Estados, desde normas fitosanitarias para el comercio intrarregional (hoy,
muchos camiones quedan varios días en las fronteras mientras adecuan los
documentos de importación) hasta los requisitos para obtener la residencia.
Las normas legales disponen también exigencias aduaneras, requisitos para
equivalencias de títulos universitarios y decenas de "pequeñas diferencias"
que es necesario adecuar para allanar el camino de la integración.

Somos conscientes que no todo proceso de acercamiento económico entre
naciones culmina con una integración política exitosa o completa. Si bien
los grupos económicos pueden presionar al Estado por una mayor integración
en el plano material, esta no necesariamente puede darse a nivel
institucional.

El Mercosur y su ampliación al resto de los países de América Latina deben
ser una prioridad de los gobiernos de Uruguay, Brasil, Argentina y Paraguay.
Esta comunidad es una experiencia reciente, pero no tanto. Se realizaron
muchas discusiones sobre cuestiones comerciales y económicas, quizá no
tantas sobre los temas políticos. Quizá es el momento para que nosotros
avancemos un poco en darle importancia a la agenda política del Mercosur.

Por todo lo expuesto, y en respeto a las fuentes jurídicas del Mercosur, es
que solicito a los Señores Senadores la aprobación del presente proyecto.

Ramón Saadi.-