Número de Expediente 1784/04

Origen Tipo Extracto
1784/04 Senado De La Nación Proyecto De Declaración NEGRE DE ALONSO : PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL " DIA DE LA BANDERA NACIONAL ".-
Listado de Autores
Negre de Alonso , Liliana Teresita

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
15-06-2004 23-06-2004 113/2004 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
16-06-2004 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO

ORDEN DE GIRO: 1
16-06-2004 23-06-2004

ENVIADO AL ARCHIVO : 05-07-2004

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 23-06-2004
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-1784/04)

PROYECTO DE DECLARACIÓN

El Senado de la Nación

DECLARA:

Su adhesión a la conmemoración del "Día de la
Bandera Nacional" a celebrarse el próximo 20 de junio de 2004, fecha en
que se cumple un nuevo aniversario del fallecimiento de su creador, el
General Manuel Belgrano.

Liliana T. Negre de Alonso.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:


La celebración del día de nuestra insignia
nacional en la fecha en que se conmemora el fallecimiento del General
Manuel Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, acaecido el día 20 de
junio de 1820, es un acto de estricta justicia histórica hacia quien
fue su creador, a la par que importa un acto de merecido reconocimiento
de las virtudes cívicas, morales y militares de este héroe de la
revolución y, junto con el General José de San Martín, Padre de la
Patria.


Manuel Belgrano nace el 3 de junio de 1770 en la ciudad de Buenos
Aires. Estudió sus primera letras en esta Ciudad. Ingresó al Colegio de
San Carlos, donde hizo sus estudios complementarios. A los 16 años de
edad viajó a España y obtuvo el diploma de Licenciado en Filosofía el
8 de junio de 1787 en la Universidad de Salamanca y el de Bachiller en
leyes en la de Valladolid donde recibió el Título de Abogado el 6 de
febrero de 1793. En diciembre de este último año fue designado
Secretario del Consulado de Buenos Aires, asumiendo dicho cargo al año
siguiente al crearse efectivamente dicho Consulado.


Desde el 14 de junio de 1795 al 16 de junio de 1809 escribió quince
memorias, cesando en estas actividades el 14 de abril de 1810.

En el mencioando año 1810 renuncia a su cargo en el Consulado y luego
será convocado por sus compañeros en Buenos Aires para integrar la
Primera Junta de Gobierno en calidad de vocal.


La actitud que adoptó ante la nueva situación
que le tocó afrontar, queda descripta por el mismo General Manuel
Belgrano en su Autobiografía: "Apareció una Junta de la que yo era
vocal, sin saber cómo ni por dónde, en lo que no tuve poco sentimiento.
Pero era preciso corresponder a la confianza del pueblo, y me contraje
al desempeño de esta obligación, asegurando, como aseguro a la faz del
universo, que todas mis ideas cambiaron, y ni una sola concedí a un
objeto particular, por más que me interesase: el bien público estaba a
todos instantes a mi vista."

Desde mayo de 1810 hasta enero de 1814 es el encargado de conducir
varias batallas y ejércitos. Ese mismo año parte en misión diplomática
a Europa, regresando en el año 1816. En ese momento, el Congreso de
Tucumán lo designa comandante del Ejército del Norte, y tras permanecer
allí tres años; cae gravemente enfermo, debiendo regresar a Buenos
Aires, Ciudad donde fallece.


Encontrándose en la ciudad de Rosario abocado a la tarea de organizar
un cuerpo de ejército y fortificar un paso sobre el río Paraná, el
General Manuel Belgrado creó primero la escarapela celeste y blanca y
luego encomendó la confección de nuestra bandera, con los mismos
colores de la escarapela, a doña María Catalina Echevarría de Vidal.


La insignia nacional fue enarbolada
por primera vez en la ciudad de Rosario el 27 de febrero de 1812,
siendo por este motivo observada su conducta al no haber requerido la
autorización correspondiente del gobierno.


En una nota que data de aquellos días el
General Manuel Belgrano, al justificar la necesidad de su creación y
la elección de sus colores, expresaba que: "...siendo preciso
enarbolar bandera, y no teniéndola, la mandé hacer blanca y celeste
conforme los colores de la escarapela nacional".


Contribuyendo también a entender en su
real dimensión histórica la decisión adoptada por Belgrano, es bueno
tener en cuenta las palabras que pronunció al bendecir por primera vez
la bandera frente al ejército: "Por primera vez veis la bandera
nacional en mis manos, que ya os distingue de las demás naciones del
globo, sin embargo, de los esfuerzos que han hecho los enemigos de la
sagrada causa que defendemos para echarnos cadenas aún más pesadas que
las que cargáis. Pero esta gloria debemos sostenerla de un modo digno,
con la unión, la constancia y el exacto cumplimiento de nuestras
obligaciones hacia Dios, hacia nuestros hermanos, hacia nosotros
mismos; a fin de que haya de tener a la vista para conservarla libre de
enemigos y en el lleno de su felicidad".

Después de estos hechos condujo
victoriosamente a las fuerzas patrias para obtener el brillante triunfo
sobre los realistas en la batalla de Tucumán. Posteriormente Belgrano
marcha hasta Jujuy donde nuevamente iza y hace jurar la bandera a las
tropas nacionales, haciendo expresar reconocimiento a la Soberana
Asamblea Constituyente del año 1813 instalada en Buenos Aires.

A los nueve días de declarada la Independencia,
se comprendió la necesidad de aprobar oficialmente la bandera, en cuya
defensa ya habían muerto cientos de argentinos y es así que le
correspondió al Congreso de Tucumán la gloria de sancionar el decreto,
que legalizaba la enseña en uso.

Para honrar debidamente la bandera, el 8 de
junio de 1938, el Congreso Nacional sancionó una ley que fija como "Día
de la Bandera" el 20 de junio, en memoria del aniversario de la muerte
de su creador Manuel Belgrano.

La cultura Nacional es el soporte de todo el
andamiaje de valores e ideas que nos ayuda a adoptar conductas
positivas hacia la comunidad y hacia nosotros mismos. Es por ello que
proyectos como el presente son de vital importancia para colaborar al
fortalecimiento de la aludida cultura nacional, recordando a un símbolo
patrio como es nuestra bandera y a un argentino como Manuel Belgrano,
lleno de virtudes cívicas y morales, y excento de ambiciones.

Es por todas estas razones que proponemos a
nuestros pares la aprobación del presente proyecto de declaración.

Liliana T. Negre de Alonso.