Número de Expediente 1688/06

Origen Tipo Extracto
1688/06 Senado De La Nación Proyecto De Declaración RODRIGUEZ SAA Y NEGRE DE ALONSO : PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL " DIA DE LA BANDERA NACIONAL " .
Listado de Autores
Rodríguez Saá , Adolfo
Negre de Alonso , Liliana Teresita

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
23-05-2006 07-06-2006 74/2006 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
01-06-2006 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO

ORDEN DE GIRO: 1
01-06-2006 07-06-2006

ENVIADO AL ARCHIVO : 07-09-2006

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 07-06-2006
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:CONJ. S. 1889/06
En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-1688/06)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación

DECLARA:

Su adhesión a la conmemoración del ¿Día de la Bandera Nacional¿ a celebrarse el próximo 20 de junio de 2006, fecha en que se cumple un nuevo aniversario del fallecimiento de su creador, el General Manuel Belgrano.

Adolfo Rodríguez Saa. - Liliana T. Negre de Alonso.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

La celebración del día de nuestra insignia nacional en la fecha en que se conmemora el fallecimiento del General Manuel Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, acaecido el día 20 de junio de 1820, es un acto de estricta justicia histórica hacia quien fue su creador, a la par que importa un acto de merecido reconocimiento a las virtudes cívicas, morales y militares de este héroe de la revolución.

Manuel Belgrano nace el 3 de junio de 1770 en la ciudad de Buenos Aires. Estudió sus primera letras en esta Ciudad. Ingresó al Colegio de San Carlos, donde hizo sus estudios complementarios. A los 16 años viajó a España y obtuvo el diploma de Licenciado en Filosofía el 8 de junio de 1787 en la Universidad de Salamanca y el de Bachiller en leyes en la de Valladolid donde recibió el Título de Abogado el 6 de febrero de 1793. En diciembre de este último año fue designado Secretario del Consulado de Buenos Aires, asumiendo dicho cargo al año siguiente al crearse efectivamente dicho Consulado.

Desde el 14 de junio de 1795 al 16 de junio de 1809 escribió quince memorias, cesando en estas actividades el 14 de abril de 1810. En el mencionado año 1810 renuncia a su cargo en el Consulado y luego es convocado por sus compañeros en Buenos Aires para integrar la Primera Junta de Gobierno en calidad de vocal.

La actitud que asumió ante el cargo que tuvo que asumir queda descripta por el mismo General Manuel Belgrano en su Autobiografía cuando dice: "Apareció una Junta de la que yo era vocal, sin saber cómo ni por dónde, en lo que no tuve poco sentimiento. Pero era preciso corresponder a la confianza del pueblo, y me contraje al desempeño de esta obligación, asegurando, como aseguro a la faz del universo, que todas mis ideas cambiaron, y ni una sola concedí a un objeto particular, por más que me interesase: el bien público estaba a todos instantes a mi vista."

Encontrándose en la ciudad de Rosario abocado a la tarea de organizar un cuerpo de ejército y fortificar un paso sobre el río Paraná, el General Manuel Belgrano propuso al Gobierno la creación de una ¿escarapela nacional¿ con los colores celeste y blanco, en vista de que los cuerpos del Ejército usaban distintivos diversos, cuyo uso fue aprobado por el Triunvirato y, posteriormente, entusiasmado con la aprobación de la escarapela diseñó una bandera con los mismos colores, encomendando su confección a doña María Catalina Echevarría de Vidal.

La insignia nacional fue enarbolada por primera vez en la ciudad de Rosario, a orillas del Río Paraná el 27 de febrero de 1812, donde el general Belgrano la hizo jurar a sus soldados, sin haber requerido la autorización del gobierno lo que motivó que fuera reprochada su conducta.

En una nota que data de aquellos días el General Manuel Belgrano, al justificar la necesidad de su creación y la elección de sus colores, expresaba que: ¿...siendo preciso enarbolar bandera, y no teniéndola, la mandé hacer blanca y celeste conforme los colores de la escarapela nacional¿.

Contribuyendo también a entender en su real dimensión histórica la decisión adoptada por Belgrano, es bueno recordar las palabras que pronunció al bendecir por primera vez la bandera frente al ejército: ¿Por primera vez veis la bandera nacional en mis manos, que ya os distingue de las demás naciones del globo, sin embargo, de los esfuerzos que han hecho los enemigos de la sagrada causa que defendemos para echarnos cadenas aún más pesadas que las que cargáis. Pero esta gloria debemos sostenerla de un modo digno, con la unión, la constancia y el exacto cumplimiento de nuestras obligaciones hacia Dios, hacia nuestros hermanos, hacia nosotros mismos; a fin de que haya de tener a la vista para conservarla libre de enemigos y en el lleno de su felicidad¿.

Después de estos hechos condujo victoriosamente a las fuerzas patrias para obtener el brillante triunfo sobre los realistas en la batalla de Tucumán. Posteriormente Belgrano marcha hasta Jujuy donde el 25 de mayo de 1812 nuevamente iza y hace jurar la bandera a las tropas nacionales, oportunidad en que la bandera fue bendecida por primera vez. Este hecho motivó que el Triunvirato ordenara nuevamente a Belgrano guardar la bandera y le recriminó su desobedeciancia.

A los nueve días de declarada la Independencia, se comprendió la necesidad de reconocer oficialmente la bandera, en cuya defensa ya habían muerto cientos de argentinos y es así que le correspondió al Congreso de Tucumán la gloria de sancionar el decreto, que legalizaba la enseña en uso.

En el año 1819 se radica en Tucumán pero, por sus graves problemas de salud decide volver a Buenos Aires, donde fallece el 20 de junio de 1820 en la pobreza.

Para honrar debidamente la bandera, el 8 de junio de 1938, el Congreso Nacional sancionó una ley que fija como ¿Día de la Bandera¿ el 20 de junio, en memoria del aniversario de la muerte de su creador Manuel Belgrano.

La cultura Nacional es el soporte de todo el andamiaje de valores e ideas que nos ayuda a adoptar conductas positivas hacia la comunidad y hacia nosotros mismos. Es por ello que proyectos como el presente son de vital importancia para colaborar al fortalecimiento de la aludida cultura nacional, recordando a un símbolo patrio como es nuestra bandera y a un argentino como Manuel Belgrano, lleno de virtudes cívicas y morales, y exento de ambiciones.

Es por todas estas razones que proponemos a nuestros pares la aprobación del presente proyecto de declaración.

Adolfo Rodríguez Saa. - Liliana T. Negre de Alonso.