Número de Expediente 1322/04

Origen Tipo Extracto
1322/04 Senado De La Nación Proyecto De Declaración GIUSTINIANI Y OTROS : PROYECTO DE DECLARACION REPUDIANDO LOS ABUSOS Y TORTURAS A PRISIONEROS DE GUERRA IRAQUIES .
Listado de Autores
Giustiniani , Rubén Héctor
Ibarra , Vilma Lidia
Conti , Diana Beatriz
Rossi , Carlos Alberto
Avelin de Ginestar , Nancy

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
11-05-2004 12-05-2004 83/2004 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
12-05-2004 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO
ORDEN DE GIRO: 1
12-05-2004 12-05-2004

ENVIADO AL ARCHIVO : 15-06-2004

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 12-05-2004
SANCION: APROBO
COMENTARIO:
NOTA:C/DICT.Junto C/ S-1185-1192-1229-1222-1240/04

PRESIDENCIA/OFICIALES VARIOS

ORIGEN TIPO NUMERO FECHA AR
PE RP 568/04 07-09-2004
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-1322/04)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación

DECLARA

Su repudio a los abusos y torturas a prisioneros de guerra iraquíes por
parte de militares estadounidenses y británicos. Urge a que se respeten
los derechos fundamentales de los detenidos iraquíes, según lo marcan
las leyes humanitarias internacionales y saluda la iniciativa de
investigar la situación de los presos en Irak por la oficina del Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Rubén Giustiniani.- Vilma L. Ibarra.- Diana B. Conti.- Carlos A.
Rossi.- Nancy Avelín.-

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El periódico inglés "The Daily Mirror" divulgó el sábado 1º de mayo
cinco fotografías en blanco y negro de presuntas torturas y el programa
televisivo "60 minutes II" de la cadena CBS mostró días antes imágenes
de presos iraquíes torturados por soldados estadounidenses.

El rotativo inglés asegura que obtuvo las imágenes, investigadas por el
Ministerio de Defensa, de manos de soldados integrados en el Regimiento
de la Reina de Lancashire, un batallón mecanizado con base en el norte
de Inglaterra que ha prestado servido en Irak y las imágenes de
soldados estadounidenses humillando a los presos iraquíes provienen de
la prisión Abu Gharib, ubicada en las afueras de Bagdad, la cual estuvo
bajo responsabilidad directa de Karpinski desde que Estados Unidos tomó
el control sobre el país árabe, en abril de 2003, hasta el pasado
enero.

Desde Amnistía Internacional, Neil Durkin se declaró "conmocionado" por
las imágenes publicadas por el diario británico y resaltó que es
"importante" que la investigación de las presuntas torturas sea
"transparente".

El grupo defensor de los derechos humanos, con sede en Londres, dijo
que recibió "decenas" de informes sobre malos tratos de los detenidos a
manos de tropas británicas y estadounidenses.

La policía militar británica está investigando denuncias de abusos
presuntamente cometidos por soldados desde que el periódico Daily
Mirror publicó fotos de un supuesto prisionero iraquí encapuchado
golpeado por los soldados.

Nicole Choueiry, vocera de Amnistía en el Medio Oriente, dijo que las
fotos no la sorprendían. "Desde hace un año estamos registrando
denuncias de torturas", dijo Choueiry. "Hemos dicho que hay patrones de
torturas".

Los métodos denunciados incluyen privación prolongada de sueño,
golpizas, colocación prolongada en posiciones dolorosas, a veces
combinada con música fuerte, encapuchamiento y exposición prolongada a
luces fuertes", dijo el grupo en un comunicado.

El Secretario General de la ONU, Kofi Annan, durante su visita a
Washington, D.C. durante el fin de semana, urgió a las autoridades de
Estados Unidos y el Reino Unido deben tomar medidas firmes para que no
se repitan en el futuro violaciones a los derechos humanos como las que
han mostrado las fotografías de los detenidos iraquíes, porque "causan
daños, como se ha observado en las reacciones de la región".

En este sentido, el titular de la oficina del Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Bertrand Ramchran, ha
nombrado a un equipo especial para que investigue la situación en Iraq
tras el escándalo provocado por la publicación de las fotos donde se
muestra cómo las fuerzas de la coalición someten a tratamientos
vejatorios a los prisioneros iraquíes. También expreso que por razones
de seguridad, el grupo de expertos de Naciones Unidas no se trasladará
a Iraq, sino que investigará desde Ginebra.

La oficina del Alto Comisionado presentará un informe sobre la
situación de los derechos fundamentales en Iraq el próximo 31 de mayo.

El documento abarcará el periodo comprendido entre abril de 2003 y mayo
de 2004, y tocará asuntos como la militarización y la seguridad,
incluyendo los actos terroristas; la protección de los civiles; el
trato que se da a los detenidos; y el problema de la población
desplazada por la violencia.

Asimismo, el informe reportará sobre la situación de las mujeres y los
niños; la libertad de religión o credo; y los derechos civiles,
políticos, económicos, sociales y culturales.

También evaluará las responsabilidades y el desempeño del Ministerio de
Derechos Humanos de Iraq y de todas las instituciones dedicadas a velar
por la protección de estos derechos.

Bertrand Ramcharan, titular de la Alta Comisaría, escribió al
administrador de Estados Unidos en Iraq, Paul Bremer; a los miembros
del Consejo de Gobierno; y a los cancilleres de los países que
participan en las fuerzas de coalición para pedirles que le den la
información que consideren relevante para el informe.

El equipo que elabora el documento viajará a Amman, Jordania; Beirut,
Líbano; y a otras capitales de los vecinos de Iraq para entrevistar a
la gente que pueda aportar datos útiles para el informe, que se
presentará ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.

El grupo de trabajo sobre detenciones arbitrarias de la Comisión de
Derechos Humanos de las Naciones Unidas expresó gran preocupación por
la incertidumbre de la situación legal de muchos detenidos que son
sometidos a interrogatorios actualmente en Iraq, sobre todo a la luz de
la divulgación de las imágenes que muestran que los prisioneros son
vejados por militares estadounidenses y británicos.

De acuerdo con la información que ha reunido el grupo de trabajo, la
mayoría de los iraquíes detenidos han sido arrestados durante
manifestaciones públicas, en puntos de control y en redadas, bajo
cargos de ser sospechosos de llevar a cabo actividades contra la
coalición o de amenazar la seguridad.

Leïla Zerrougui, la relatora que preside el grupo de trabajo, destacó
en un comunicado que estas personas no han tenido acceso a un tribunal
para determinar la legalidad de las detenciones como lo marca la
Convención Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

Dicha Convención también descalifica las detenciones y los arrestos
arbitrarios y garantiza a los detenidos una audiencia pública y justa
de un tribunal independiente, además de establecer el derecho de ser
inocente hasta que se pruebe lo contrario.

En una ofensiva mediática y en respuesta a la ola de críticas que
provocó el tema, el presidente estadounidense, George W. Bush, ha
pedido que el pueblo iraquí entienda que los presuntos malos tratos
ocurridos en la prisión de Abu Ghraib, a 30 Kms al oeste de Bagdad, "no
representa a los Estados Unidos". Bush ha hecho estas declaraciones en
las entrevistas que ha concedido a dos cadenas de televisión árabes, Al
Arabiya y Al Hurra, para tratar de controlar el daño político y de
imagen creado por la divulgación de los abusos a los prisioneros
iraquíes.

El ejercito norteamericano ha informado que en el mes diciembre
último, ha iniciado investigaciones criminales sobre 35 casos de
supuestos abusos en cárceles militares de Irak y Afganistán, que
incluyen la muerte de 25 prisionero.

Debemos tener presente ante estos hechos que han acontecido que el
Gobierno de los Estados Unidos de América retiro la firma que registro
el 31 de Diciembre de 2000 en el Tratado de la Corte Penal
Internacional (CPI), adoptado en la Conferencia de Roma el 17 de Julio
de 1998.

Bush se niega a que ciudadanos de Estados Unidos de servicio en el
exterior (diplomáticos, soldados, agentes de la CIA) e implicados en
presuntos crímenes de guerra sean juzgados por la Corte Penal
Internacional.

La retirada estadounidense del CPI es una 'señal muy peligrosa',
declaro en su momento la representante del Alto Comisionado de Naciones
Unidas para los Derechos Humanos. La decisión de Washington es 'muy
lamentable y realmente preocupante', añadió en una entrevista con la
emisora británica BBC. 'Sabíamos que Estados Unidos no era favorable a
la Corte Penal Internacional', declaró. 'Están en su derecho, pero
tomar la decisión de no firmar o de retirarse de una firma es una señal
muy peligrosa', agregó. 'EE. UU. no sabe hasta qué punto es importante
para el mundo la Corte Penal Internacional'.

El Estatuto de la CPI, instrumentado por una Convención específica, y
no por una reforma de la Carta de Naciones Unidas, nació para cubrir un
gran vacío, respetando los principios garantizadores básicos del
derecho penal como son el de irretroactividad de la ley penal y del
juez natural. Estará encargado de juzgar el genocidio, los crímenes de
guerra, los crímenes contra la humanidad y la agresión, una vez que se
defina este tipo de ofensa.

A diferencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la CPI no
juzgará Estados sino individuos. Tampoco tendrá una jurisdicción
cronológica o geográficamente acotada, como sí la tienen los tribunales
penales para Ruanda y la ex Yugoslavia, creados por resolución del
Consejo de Seguridad de la ONU.

En 1948, la Asamblea General de la ONU aprobó la Convención para la
Prevención y Castigo del Crimen de Genocidio que, entre otras cosas,
solicitaba la creación de un órgano judicial internacional para juzgar
a los acusados de este delito. Posteriormente, se aprobaron tribunales
internacionales ad hoc para casos concretos -Yugoslavia y Ruanda-, pero
no se avanzó respecto a uno permanente.

Somos participes de la idea de que la Corte significa un gran paso
contra la impunidad. A partir de ahora los responsables de los crímenes
más graves contra la humanidad ya no podrán pensar en buscar refugio
fuera de las fronteras de sus países. La Corte concretará el deseo de
justicia universal que la comunidad de los derechos humanos ha
expresado en los últimos años.

Nos preocupa que Estados Unidos, la mayor potencia mundial, quede al
margen del nuevo sistema legal que se está creando en el mundo. Es por
ello que manifestamos nuestra preocupación por los graves actos
denunciados y alentamos a la comunidad internacional para que logre
aunar los esfuerzos necesarios para investigar la situación y que se
respeten los derechos humanos y las libertades fundamentales, bregando
así también por un futuro de paz e inclusión para todos los ciudadanos
iraquíes; avanzando hacia la creación de instituciones democráticas en
Iraq y en el pronto establecimiento de una Autoridad Interina Iraquí
que conduzca a la formación de un gobierno independiente con
reconocimiento internacional.

Por todo lo expuesto solicito a mis pares la aprobación del presente
Proyecto de Declaración.

Rubén Giustiniani.- Vilma L. Ibarra.- Diana B. Conti.- Carlos A.
Rossi.- Nancy Avelín.-