Número de Expediente 1098/07

Origen Tipo Extracto
1098/07 Senado De La Nación Proyecto De Declaración CAPARROS: PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA CELEBRACION DEL DIA INTERNACIONAL DE LA LIBERTAD DE PRENSA , EL 3 DE MAYO , Y OTRAS CUESTIONES CONEXAS .
Listado de Autores
Caparrós , Mabel Luisa

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
02-05-2007 23-05-2007 52/2007 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
07-05-2007 SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE SISTEMAS, MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y LIBERTAD DE EXPRESIÓN
ORDEN DE GIRO: 1
08-05-2007 28-02-2009

EL EXPEDIENTE CADUCO EL 28-02-2009

ENVIADO AL ARCHIVO : 07-07-2009

En proceso de carga

Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-1098/07)

PROYECTO DE DECLARACION

El Senado de la Nación

DECLARA:

1°) Su entusiasta adhesión a la celebración del Día Internacional de la Libertad de Prensa, instituído por la Asamblea General de Naciones Unidas el 3 de mayo de cada año, con el objeto de fortalecer el derecho a la libre expresión de las ideas como base fundamental para el desenvolvimiento de las sociedades democráticas.

2°) Su enérgico repudio a todo acto que cercene o restrinja en forma alguna la libre expresión de las ideas por la prensa, como derecho intrínseco a la condición humana.

3°) Su homenaje a los periodistas argentinos que ejerciendo con responsabilidad su deber de informar, contribuyen al fortalecimiento de una prensa libre, pluralista e independiente.

Mabel L. Caparros.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

La libertad de prensa es una piedra angular de los derechos humanos y una garantía de las demás libertades. Fomenta la transparencia y el buen gobierno; asegura que, además de gozar del imperio de la ley, la sociedad se rige por la justicia verdadera. Pese a ello, siguen habiendo quienes cuestionan el valor de la libertad de expresión para su sociedad, quienes aducen que constituye una amenaza para la estabilidad y un peligro para el progreso, quienes consideran que es algo impuesto desde fuera y no la expresión autocrática de la exigencia de libertad de cada pueblo.

Es hora de que este razonamiento se someta de una vez por todas a la única prueba que cuenta, la elección del pueblo: saber más o saber menos, ser oído o acallado, ponerse de pie o de rodillas. La libertad de expresión es un derecho por el que se debe luchar y no una bendición a la que se debe aspirar. Y aún más: es un puente de entendimiento y saber; esencial para el intercambio de ideas entre naciones y culturas, que condiciona la verdadera comprensión y la cooperación duradera. De hecho nunca es el pueblo el que esgrime los argumentos que tratan de amordazar a la prensa sino los gobiernos, nunca los que carecen de poder sino los que sí lo ejercen, nunca los que no tienen voz, sino aquellos cuyas voces son las únicas que se pueden oir.

Sabemos que en el siglo que hemos dejado atrás cada guerra implicó la comisión de graves violaciones a los derechos humanos de los periodistas, cronistas de guerra y reporteros asignados a la zona de conflicto. El hecho de que los periodistas sigan siendo el blanco demuestra la necesidad de redoblar la lucha con mayor vigor. Hacemos nuestro llamamiento cuando el mundo está siendo sacudido por un conflicto bélico de consecuencias inimaginables, que pesarán seguramente por quienes son más inocentes y ajenos a sus causas y objetivos.

Hace 14 años y por recomendación del Consejo Económico y Social, la Asamblea General de Naciones Unidas declaró el 3 de mayo como Día Mundial de la Libertad de Prensa por Resolución 48/432. La iniciativa para promover el Día partió de la Conferencia General de la UNESCO que, en su resolución de 1991 titulada "Fomento de la Libertad de Prensa en el Mundo", había reconocido que una prensa libre, pluralista e independiente era un componente esencial de toda sociedad democrática. La Conferencia General invitó al Director General de la UNESCO a que transmitiera a la Asamblea General el deseo expresado por los Estados Miembros de la UNESCO de que el 3 de mayo se proclamara "Día Internacional de la Libertad de Prensa".

La elección de la fecha responde a conmemorar la Declaración de Windhoek para el Fomento de una Prensa Africana Independiente y Pluralista, aprobada el 3 de mayo de 1991 por el Seminario para el Fomento de una Prensa Africana Independiente y Pluralista, organizado por la UNESCO y las Naciones Unidas en Windhoek (Namibia). Los términos de la mencionada Declaración, no por todos conocida, tienen la importancia de haber sentado las bases para el ejercicio de la libertad de prensa aún en aquellos países caracterizados por el control y el sojuzgamiento de la prensa independiente. De allí su importancia.

Los participantes del Seminario realizado en Namibia del 29 de abril al 3 de mayo de 1991, Recordando la Declaración Universal de Derechos Humanos, la resolución 59 (I) de la Asamblea General del 14 de diciembre de 1946, en la que se declara que la libertad de información es un derecho humano fundamental, y la resolución 45/76 A de la Asamblea General de l11 de diciembre de 1990, sobre la información al servicio de la humanidad, recordando la resolución 25 C/104 de la Conferencia General de la UNESCO de 1989 en la cual se hace principalmente hincapié en la promoción de "la libre circulación de las ideas por medio de la palabra y de la imagen" entre las distintas naciones y dentro de cada una de ellas, expresando también su sincero reconocimiento a todos los órganos y organizaciones intergubernamentales, gubernamentales y no gubernamentales, en particular al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que han contribuido al esfuerzo desplegado por las Naciones Unidas y la UNESCO para organizar el Seminario,
declararon:

a) De conformidad con el artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, el establecimiento, mantenimiento y fortalecimiento de una prensa independiente, pluralista, y libre son indispensables para el desarrollo y mantenimiento de la democracia en un país, así como para el desarrollo económico.
b) Por prensa independiente debe entenderse una prensa sobre la cual los poderes públicos no ejerzan ni dominio político o económico, ni control sobre los materiales y la infraestructura necesarios para la producción y difusión de diarios, revistas y otras publicaciones periódicas.
c) Por prensa pluralista debe entenderse la supresión de los monopolios de toda clase y la existencia del mayor número posible de diarios, revistas y otras publicaciones periódicas que reflejen la más amplia gama posible de opiniones dentro de la comunidad.
d) La evolución actual de un número creciente de países africanos hacia una democracia fundada en el pluripartidismo es acogida con beneplácito y crea un clima favorable al surgimiento de una prensa independiente y pluralista.
e) La tendencia mundial hacia la democracia y la libertad de información y de expresión es una contribución fundamental a la realización de las aspiraciones de la humanidad.
f) En el Africa actual, pese a los acontecimientos positivos que se han registrado en algunos países, periodistas y editores son víctimas de represión en muchos países -son objeto de asesinatos, arrestos, detenciones y censura-, y se restringen sus actividades por diversas presiones económicas y políticas, como las restricciones impuestas al suministro de papel periódico, los sistemas de licencia previa que limitan la libertad de publicación, las restricciones a la concesión de visas lo que obstaculiza la libertad de movimiento de los periodistas, las restricciones al intercambio de noticias y de información, y las limitaciones a la libre circulación de diarios dentro de los países y fuera de sus fronteras nacionales. En algunos países, el partido único ejerce un dominio total sobre la información.
g) En la actualidad, por lo menos 17 periodistas y editores se encuentran detenidos en prisiones africanas, y 48 periodistas africanos murieron en el ejercicio de sus funciones profesionales entre 1969 y 1990.
h) La Asamblea General de las Naciones Unidas debería incluir en el programa de su próximo período de sesiones un tema relativo a la censura con miras a declarar que ésta constituye una grave violación de los derechos humanos, cuestión que incumbe a la Comisión de Derechos Humanos.
i) Se debe alentar a los Estados africanos a que proporcionen las garantías constitucionales necesarias a la libertad de prensa y a la libertad de asociación.
j). Para fomentar y consolidar los cambios positivos que se producen actualmente en Africa y para contrarrestar los de carácter negativo, la comunidad internacional -concretamente las organizaciones internacionales (tanto gubernamentales como no gubernamentales), los organismos de desarrollo y las asociaciones profesionales- debería, como cuestión prioritaria, destinar recursos financieros al desarrollo y la creación de diarios, revistas y otras publicaciones periódicas no gubernamentales que reflejen tanto la sociedad en su conjunto como los diferentes puntos de vista de las comunidades a las que prestan servicios.
k) Toda financiación debe estar encaminada a fomentar el pluralismo así como la independencia. En consecuencia, esa financiación debe concederse a los medios de comunicación públicos únicamente si las autoridades garantizan, en el plano constitucional y de manera efectiva, la libertad de información y expresión y la independencia de la prensa.
l) Con el propósito de contribuir a la preservación de las libertades enumeradas anteriormente, la creación de asociaciones profesionales, sindicatos de periodistas y asociaciones de editores verdaderamente independientes y representativos constituye una prioridad en todos los países de Africa en que esos organismos no existan todavía.
m) La legislación nacional de los países africanos relativa a los medios de comunicación y a las relaciones laborales debería formularse de manera que garantice la existencia de asociaciones representativas como las mencionadas anteriormente y las condiciones que les permitan cumplir sus importantes tareas en defensa de la libertad de la prensa.
n) Como muestra de buena fe, los gobiernos de países africanos que han encarcelado a periodistas por sus actividades profesionales deberían liberarlos sin tardanza. Los periodistas que han tenido que salir de sus países deberían estar libres de volver a ellos y reanudar sus actividades profesionales.
o) Debería alentarse y apoyarse la cooperación tanto entre editores africanos como entre editores del Norte y del Sur (por ejemplo, de acuerdo con el principio del hermanamiento).
p) En vista de la importancia de la radio y de la televisión en la esfera de la difusión de noticias e información, se invita a las Naciones Unidas y a la UNESCO a que recomienden a la Asamblea General y a la Conferencia General, respectivamente, la organización de un seminario análogo de periodistas y directores de servicios de radio y televisión en Africa, a fin de explorar las posibilidades de aplicar a estos medios de comunicación los mismos principios de independencia y pluralismo.
q) La comunidad internacional debería contribuir al logro y aplicación de las iniciativas y de los proyectos que figuran en el anexo a la presente Declaración.
r) El Secretario General de las Naciones Unidas y el Director General de la UNESCO deberían trasmitir la presente Declaración a la Asamblea General de las Naciones Unidas y a la Conferencia General de la UNESCO, respectivamente.

Es necesario hacer un llamamiento conjunto a todos los gobiernos y las autoridades regionales y locales para que renueven el compromiso de garantizar la seguridad de los periodistas y velar por que no queden impunes los crímenes cometidos contra ellos. Máxime al celebrarse un nuevo Día Mundial de la Libertad de Prensa y encontrándose el mundo sacudido por varios focos de conflictos bélicos que alteran el equilibrio entre las naciones y el orden internacional. Cada vez que se asesina o se ataca a un periodista, es la sociedad toda la que sufre una gravísima herida. Cada vez que un periodista es víctima de un acto de violencia, de intimidación o de una detención arbitraria por su firme determinación de transmitir la verdad, son todos los ciudadanos los que se ven privados de sus derechos a pensar y actuar según su conciencia.

En el umbral de un nuevo siglo es más importante que nunca contar con una prensa libre floreciente, ya sea en el plano local, nacional o internacional, puntal de la nueva sociedad de la información y motor de un desarrollo humano sostenible. El consumo que hacemos cotidianamente de una información veraz, ya sea transmitida por satélite o por cable oceánico, sigue dependiendo del valor y la integridad con que los periodistas ejercen su misión, día tras día, de la tenacidad de los equipos de redacción, del compromiso de los medios independientes de hacer honor a los principios de una profesión que vive bajo constantes presiones.

En este Día Mundial de la Libertad de Prensa saludamos su valor y su compromiso con la búsqueda universal de la verdad y el saber y sobre todo, debemos homenajear a los periodistas valientes que corren riesgos graves en el ejercicio de su profesión y a veces pagan el empeño con la vida. En los últimos años, más de 200 periodistas han muerto mientras informaban sobre conflictos violentos. Cada vez más, tales muertes no son resultado de los accidentes de la guerra sino de una acción dirigida deliberadamente contra los periodistas por los que desean impedir la exposición de sus actividades delictivas, corruptas o terroristas por los medios de información. Vaya nuestro reconocimiento a los periodistas de todo el mundo que han sido víctimas de secuestros, torturas y ejecuciones por facciones extremistas en la guerra de Irak.

Esto demuestra que la amenaza del terrorismo para la libertad e independencia de los medios de información puede ser directa e indirecta. A menudo el terrorismo incluye ataques violentos contra periodistas y editores, entre ellos asesinatos, secuestros, torturas y ataques de las oficinas de los medios de información con bombas. Aborrecemos esa violencia. Los periodistas tienen derechos humanos como todas las demás personas, derechos que no han perdido por haber elegido su profesión.

La amenaza indirecta del terrorismo tiene dos aspectos principales. Primero, trata de intimidar, de infundir miedo y sospecha y de silenciar toda voz con la cual no está de acuerdo - un clima contrario al ejercicio de los derechos y libertades. Segundo, el terrorismo puede provocar reacciones estatales que conducen a la adopción de leyes, reglamentos y formas de vigilancia que socavan los mismos derechos y libertades que una campaña antiterrorista dice defender. De hecho, en nombre del antiterrorismo pueden ponerse en peligro principios y valores que han tardado decenios y tal vez siglos en establecerse.

Los derechos humanos y las prácticas democráticas son las mejores garantías de la libertad. Esta protección debe abarcar la libertad de prensa y la libertad de expresión como bienes en sí mismos y como medios de lucha contra el terrorismo, el narcotráfico y tantos otros males que afectan al mundo actual.

Los medios de información deben buscar y publicar la verdad; presentar información y opiniones imparcialmente; considerar con cuidado sus palabras e imágenes; y mantener normas elevadas de conducta profesional. Además, una prensa responsable es una prensa autorregulada. Se debe resistir a la tentación de imponer una regulación estatal estricta a los medios de información.
El mayor servicio que los medios de información pueden prestar en la lucha contra el terrorismo es actuar libre, independiente y responsablemente. Esto significa que no deben dejarse amedrentar por las amenazas ni convertirse en mero portavoz de sentimientos patrióticos o de opiniones que inflaman los ánimos.

En este nuevo Día Mundial de la Libertad de Prensa reafirmamos que la libertad de prensa es un elemento indispensable de la libertad de expresión, que es derecho inalienable de cada persona y uno de los fundamentos del progreso humano. Por los motivos expuestos solicito de mis pares la aprobación del presente Proyecto de Declaración.

Mabel L. Caparros.