MIRADOR A LA SOLIDARIDAD EN EL CHACO
Un grupo de la escuela del Mirador se encuentra desarrollando tareas solidarias en Tres Isletas, Chaco.
Ayer domingo partieron 53 personas entre estudiantes, ex alumnos, padres y profesores de la escuela el Mirador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para dar continuidad a su labor de padrinazgo de la escuela rural 814 de Tres Isletas de la Prov. del Chaco.
Desde el 2002 este grupo solidario está generando resultados en las personas que conforman la población de educandos, padres y maestros de la mencionada escuela rural. A la vez que el impacto en los propios alumnos del Mirador es importante en tanto que esta comunidad educativa ha incluido como parte de sus parte sus objetivos de formación de sus alumnos el importante tema de la solidaridad y ayuda a los pobladores con menos recursos.
En esta semana el grupo realizará una serie de actividades que complementan la actividad ya desarrollada y la que para su mejor entendimiento se puede apreciar en el archivo adjunto.
Este trabajo conjunto de estas personas solidarias, el intendente de la localidad de Tres Isletas y el senador Jorge Capitanich es desarrollado en forma silenciosa y está siendo publicado por primera vez.
El senador Jorge Capitanich agradeció personalmente la actividad que ejecuta esta institución y particularmente el sigiloso modo de educar con el ejemplo ayudando a su gente del Chaco.
La directora de la escuela del Mirador, Lic. Gabriela D. Barrera, expresa el sentir del grupo cuando afirma:
"Será tal vez que aún creo en la educación como liberadora de los pueblos, que me importan más los hechos que los dichos, que sigo creyendo que se educa con el ejemplo y que aquello que se conoce y se vivencia es generador de compromiso. Me apena y siento vergüenza de que cada vez que se habla de la educación más empobrecida se nombre a la Provincia del Chaco, como olvidada de la memoria de aquellos que surgieron de esas raíces. Sé que los grandes ideales se pierden por la comodidad y que los recursos sólo llegan si van de la mano de nobles gestiones. Por eso una enorme energía y profesionalismo me llevan a sembrar en mis alumnos de la capital un compromiso social con el país y su gente, enseñándoles a amar aquello que es nuestro aunque estéticamente no sea valorado; porque en pocos lugares el sol es rojo, como en mi querido Chaco.
A pesar de los obstáculos que no son pocos nos alienta el ver que cada año una comunidad mejora, y pienso que esos niños de la zona rural más carenciada también son el futuro de nuestra Nación. Por eso estimulo a mis alumnos año tras año a trabajar en valores convencidos de que cuando se realizan efectivamente las tareas, la realidad cambia y esto depende de cada uno de nosotros."



