No vamos a permitir un tratamiento express en el Senado del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo
Nos
aprestamos a discutir en la Cámara Alta el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo aprobado por Diputados y observo con preocupación que desde algunos sectores se
pretenden omitir las premisas que caracterizaron la discusión previa: "debate
amplio, democrático y respetuoso de la autonomía y voluntad del
legislador".
El proyecto, tanto en su tratamiento como en la votación final de Diputados, ha demostrado que no existe una voluntad unificada -de hecho hizo falta la intervención externa para torcer una votación que hasta los minutos previos a su finalización era desfavorable-.
Sin
tener en cuenta este antecedente, los presidentes de los bloques mayoritarios
del Senado de la Nación han manifestado su interés en forzar los tiempos del
tratamiento legislativo. En la materia que nos compete esta representatividad
carece de legitimidad alguna, ya que la posiciones a favor y en contra se expresaron en las principales fuerzas
políticas de manera transversal.
El Senado de la Nación no puede abstraerse de esta realidad y plantear un tratamiento "express", negándose la oportunidad de una profunda discusión de la materia legislativa de la media sanción obtenida.
Creo firmemente que debemos tener una mirada completa de la realidad territorial y no distraernos por un efecto social, que mas allá de ser atendible y legítimo no tiene la misma base de sustentación en un país heterogéneo como el nuestro. Debemos tener presente que en muchas provincias se han manifestado masivamente posiciones que rechazan el proyecto, por lo que debemos estar a la altura de las circunstancias y retomar una mirada verdaderamente federal.
Cristina Fiore Viñuales